Aznar no acepta de momento la dimisi¨®n de Calder¨®n por las escuchas a HB
, El presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, no ha aceptado por ahora la dimisi¨®n que le ha ofrecido el director general el Cesid, Javier Calder¨®n, por las escuchas descubiertas en la sede de Herri Batasuna en Vitoria. Calder¨®n se ofreci¨® desde el primer momento a asumir toda la responsabilidad derivada del caso, poniendo su cargo a disposici¨®n del presidente, pero Aznar, con quien se reuni¨® el pasado martes, le recomend¨® tranquilidad y le pidi¨® que contin¨²e al frente del servicio secreto hasta que concluya la investigaci¨®n abierta, seg¨²n fuentes gubernamentales.
El director del Cesid, Javier Calder¨®n, se reuni¨® el viernes 3 de abril con el ministro de Defensa, Eduardo Serra, a quien transmiti¨® su disposici¨®n a asumir toda la responsabilidad por las escuchas descubiertas el 31 de marzo en la sede de Herri Batasuna en Vitoria.Calder¨®n, que ofreci¨® su dimisi¨®n inmediata, pidi¨® ¨²nicamente que no se desampare a sus subordinados y que no se le presente como un desleal o un inepto, en alusi¨®n a las informaciones que pretend¨ªan que el director del servicio secreto o hab¨ªa ocultado al Gobierno el espionaje a HB o ni siquiera estaba al corriente de la operaci¨®n.
Ese mismo d¨ªa, el vicepresidente Francisco Alvarez Cascos se reuni¨® en La Moneloa con Eduardo Serra y con los ministros de Interior, Jaime Mayor Oreja, y Justicia, Margarita Mariscal, para estudiar las consecuencias del caso.
A la reuni¨®n no pudo asistir el presidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, que se encontraba en Londres, donde el s¨¢bado 5 de abril hizo sus hasta ahora ¨²nicas declaraciones sobre este asunto. ''Personalmente", dijo, "no soy dispuesto a aceptar comportamientos que no me parecen correctos pero, como debe hacer cualquier persona prudente, esperar¨¦ a las conclusiones de la investigaci¨®n que se ha establecido para tomar una decisi¨®n".
De regreso a Madrid, el presidente se reuni¨® el pasado martes con Calder¨®n a quien, seg¨²n fuentes gubernamentales, transmiti¨® un mensaje de tranquilidad y pidi¨® que contin¨²e en su cargo hasta que concluya la investigaci¨®n en marcha.
El Gobierno se ha tomado un periodo de reflexi¨®n, contando con que no tendr¨¢ que adoptar ninguna decisi¨®n hasta pasados unos d¨ªas. En el frente parlamentarlo, la comparecencia de Serra, solicitada por varios grupos, no podr¨¢ producirse hasta la semana pr¨®xima, ya que el pleno del Congreso ocupar¨¢ toda la jornada del miercoles y buena parte del jueves. A¨²n no est¨¢ claro si el ministro comparecer¨¢ ante la Comisi¨®n de Defensa o solicitar¨¢ informar a puerta cerrada a la Comisi¨®n de Secretos Oficiales. Pero el debate podr¨ªa tener un anticipo en el pleno de ma?ana si se plantea el asunto en la sesi¨®n de control al Gobierno.
Respecto al frente judicial, lo l¨®gico es que el Gobierno se ampare en la Ley de Secretos Oficiales cuando la juez Carmen Lasanta, que instruye el caso, indague sobre la propiedad de los equipos incautados en el piso superior a la sede de HB o llame a declarar a agentes del Cesid, seg¨²n las fuentes consultadas. Para ello tendr¨ªa, sin embargo, que asumir el coste derivado de un probable conflicto de jurisdicci¨®n, como el que enfrent¨® al Ejecutivo socialista con el juez Baltasar Garz¨®n por los papeles del Cesid.
Mutismo de HB
Por otra parte, HB mantuvo ayer un absoluto mutismo en relaci¨®n con el nuevo episodio de espionaje revelado por este peri¨®dico, que afect¨® al menos hasta 1995 a su sede de Bilbao, informa La coalici¨®n radical no se pronunci¨® en el d¨ªa de ayer, una jornada festiva en Euskadi, si bien desde sus filas se pudo percibir el malestar, transmitido de forma oficiosa, por la reproducci¨®n de un documento del Cesid que refleja la grabaci¨®n parcial de una reuni¨®n celebrada el 20 de mayo de 1994.En dicha reuni¨®n -a la que asisti¨®, entre otros, Arnaldo Otegi, m¨¢ximo responsable de la nueva Mesa Nacional de HB, y varios dirigentes de Jarrai- se planificaron acciones violentas para reventar las fiestas de varias localidades vascas y se mencionaron posibles ataques callejeros contra la Guardia Civil y la Ertzaintza.
En cambio, s¨ª se pronunci¨® ayer el portavoz del PNV en el Congreso, I?aki Anasagasti, quien asegur¨® que no le ha sorprendido la informaci¨®n publicada, ya que en su partido tambi¨¦n se sienten espiados, "pero es muy dif¨ªcil demostrarlo".
Anasagasti agreg¨® que no considera meramente casual que en la calle de Astarloa de Bilbao, donde el Cesid espiaba a HB mediante c¨¢maras y micr¨®fonos ocultos, tuviera su despacho profesional de abogado el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, antes de trasladarse a la nueva sede del partido.
"No nos ha extra?ado saber esto; incluso nosotros hemos denunciado siempre esta sospecha, en p¨²blico y en privado, a todos los ministros de Defensa, tanto Narc¨ªs Serra y Juli¨¢n Garc¨ªa Vargas como Eduardo Serra, que siempre nos lo han negado, por activa y por pasiva", declar¨®.
El portavoz parlamentario del PNV a?adi¨® que este tipo de actuaciones le parecen "escandalosas" porque, con independencia de la animosidad que se pueda tener contra HB, todo dem¨®crata debe saber que es una fuerza pol¨ªtica legalizada y que no est¨¢ permitido realizar ning¨²n tipo de escuchas sin mandato judicial''.
Anasagasti record¨® asimismo que, en el debate sobre el Estado de la Naci¨®n celebrado el a?o pasado, ¨¦l mismo denunci¨® en el Congreso la falta de una legislaci¨®n que regule de una vez por todas el funcionamiento de los servicios secretos y establezca que el control de ¨¦stos debe ser civil.
Por su parte, el coordinador general de IU-EB, Javier Madrazo, defini¨® ayer como un "esc¨¢ndalo pol¨ªtico de primera magnitud" el espionaje a la sede HB y pidi¨® la urgente investigaci¨®n de este hecho y la depuraci¨®n de responsabilidades.
"El Gobierno del PP y el que estuvo anteriormente se han servido del Cesid con fines ?l¨ªcitos", dijo Madrazo. Adem¨¢s de mostrarse convencido de que este episodio no constituye un hecho aislado, se pregunt¨®: "?Acaso alguien puede creer que el Cesid ha espiado s¨®lo las dos sedes de HB?"
"Tengo la certeza de que, por orden del PP ahora y antes del PSOE, todos los partidos pol¨ªticos, agentes, sociales y determinados ciudadanos han sido objeto de escuchas ilegales citando a quien detenta el poder le ha interesado", a?adi¨®.
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