El Ejercito tailand¨¦s confirma que el cad¨¢ver encontrado en una choza es el de Pol Pot
/ REUTERS El Ej¨¦rcito tailand¨¦s confirm¨® ayer que el cad¨¢ver mostrado el jueves a un reducido grupo de periodistas occidentales es el de Pol Pot. Las autoridades militares de Tailandia afirmaron que el cad¨¢ver que custodian los "irreductibles" del Jemer Rojo en un poblado distante dos kil¨®metros de la frontera de Tailandia, al norte de Camboya, corresponde al de Pol Pot. El l¨ªder jemer ser¨¢ incinerado hoy en una ceremonia en el exterior de la choza donde viv¨ªa. El Gobierno camboyano, al igual que los de EE UU y Australia, ha reclamado, sin embargo, la realizaci¨®n de una autopsia.
Un equipo militar tailand¨¦s, que no inclu¨ªa ning¨²n m¨¦dico, entr¨® en la choza para recoger piezas dentales, muestras del cabello y las huellas digitales del cad¨¢ver. Aparentemente, el cuerpo no presentaba signos de violencia, seg¨²n explicaron los militares que lo examinaron, aunque no contaban con un equipamiento forense para determinar las causas del fallecimiento, atribuido a un paro card¨ªaco. La causa de la muerte de Pol Pot, que ten¨ªa 73 a?os, es probable que nunca llegue a conocerse al igual que su mito dif¨ªcilmente se extinguir¨¢ entre los aterrados camboyanos que, a duras penas, se creen que haya muerto. "Su muerte es realmente un misterio", declaraba ayer en Phnom Penh un hombre que perdi¨® cinco familares en los campos de exterminio que implant¨® la dictadura jemer entre 1975 y 1979. "Antes de que EE UU solicitara su procesamiento por un tribunal internacional estaba vivo. Y de repente, llega la noticia del fallecimiento", agreg¨®.
El presidente norteamericano, Bill Clinton, ha insistido en que la muerte de Pol Pot no debe impedir los esfuerzos de la comunidad internacional para llevar a juicio al resto de los dirigentes de los jemeres rojos como responsables de "cr¨ªmenes horrendos". Tambi¨¦n Francia ha expresado su disponibilidad a colaborar para que sean procesados.
El rey de Camboya, Norodom Sihanuk, expres¨® ayer la esperanza de que la muerte de Pol Pot devuelva la paz a su atribulado pa¨ªs. El- monarca manifest¨® en Siemreap, a unos 240 kil¨®metros al norte de Phnom Penh, que lo mejor con Pol Pot era "dejarle muerto". Sihanuk siempre se ha manifestado en contra de conceder el perd¨®n real al l¨ªder guerrillero y a favor de su enjuiciamiento. El Gobierno camboyano va a pedir la ayuda extranjera para detener y juzgar a los tres principales jefes de la guerrilla jemer: el general Ta Mok, el ide¨®logo Noun Chea y el l¨ªder pol¨ªtico, Khie Samphan.
El general Ta Mok, conocido como El carnicero, se ha hecho con el control total de la guerrilla jemer, lo que le convierte en reo de la justicia internacional. Ta Mok tom¨® el control de la diezmada guerrilla el pasado junio tras deponer a Pol Pot. Durante su larga trayectoria en los jemeres, Ta Mok se ha labrado la reputaci¨®n de ser uno de los mandos militares m¨¢s crueles y al igual que PoI Pot siente un profundo y obsesivo odio hacia los vietnamitas. Se le atribuyen los asesinatos de centenares de camboyanos de la etnia vietnamita y el de al menos tres extranjeros desaparecidos en el norte de Camboya durante los ¨²ltimos a?os. El carnicero, que perdi¨® una de sus piernas al pisar una mina antipersonal, fue uno de los comandantes que prepar¨® junto a Pol Pot el definitivo asalto contra Phnom Penh en abril de 1975. Despu¨¦s, ostent¨® el cargo de comandante de la regi¨®n Oeste, en cuyos campos de trabajo perecieron miles de personas. La ¨²ltima responsabilidad que recibi¨® de Pol Pot, antes de que el veterano l¨ªder jemer fuera sentenciado a arresto domiciliario en junio de 1997, fue la de tratar de evitar la deserci¨®n de la guerrilla.
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