El Athletic resuelve un 'test`
El club vasco mantiene todas sus aspiraciones
El Athletic afrontaba un test de personalidad y lo resolvi¨® como los quinielistas poco documentados: sin demasiadas vueltas. Primero un patad¨®n del portero habilit¨® un gol; despu¨¦s una genialidad de Guerrero, previo ejercicio de hombr¨ªa de Lacruz, ratific¨® el resultado. Poco m¨¢s hizo que apretar los dientes ante un Compostela alica¨ªdo que a lo sumo se aprest¨® a planchar el traje y no desentonar en la recepci¨®n. A estas alturas las recepciones futbol¨ªsticas no est¨¢n para exquisiteces y el barullo favorece al Athletic que combina desde ayer la aspiraci¨®n europea en dos fronteras: la UEFA y la Liga de Campeones.El Athletic quer¨ªa jugar con calma. Lo hab¨ªa preparado todo para no atolondrarse, para levantar la cabeza y elegir las opciones. Pero se olvid¨® del ritmo del partido y al tran-tr¨¢n de los minutos fue transmutando la calma en parsimonia, la elecci¨®n en abstenci¨®n, la tranquilidad en obsesi¨®n. El partido tom¨® un mal cariz para el Athletic y afianz¨® al Compostela.
El partido se mor¨ªa. Buena culpa de ello la ten¨ªa el ordenamiento de contenci¨®n del Compostela y la falta de personalidad del Athletic para asumir responsabilidades individuales. El juego transcurr¨ªa lejos de los guardametas, ajeno a los disparos a puerta y sometido a condiciones extra?as al las dos mejores ocasiones de Joseba Etxeberria concluyeron con el futbolista por los suelos a cuenta de sendos resbalones. Guerrero hasta entonces no exist¨ªa. Ziganda, corr¨ªa. Jorge P¨¦rez, jugaba. Los dem¨¢s estaban.
Luis Fern¨¢ndez entendi¨® que el esp¨ªritu de partido agonizaba y decidi¨® jugar con estados de ¨¢nimo, es decir incluir al renqueante Urzaiz. A partir de entonces, el Athletic agudiz¨® su sesgo m¨¢s personal. A falta de juego, de toque, de paredes, de desbordamientos personales P¨¦rez acusaba el cansancio del reaparecido- apel¨® a una jugada tradicional que le ha procurado algunos goles; el guardameta Etxeb¨¦rria arre¨® un zapatazo, Urzaiz pugn¨® con un defensor y el bal¨®n fue a los pies de Etxeberria que gan¨® por pundonor a su marcador y obtuvo el primer gol.
No hab¨ªa otra manera y el Compostela padeci¨® una jugada previsible del Athletic e imprevisible con Urzaiz de por medio. Por extra?o que parezca, una jugada tan primaria como esa result¨® providencial. Lo dem¨¢s se ajust¨® al gui¨®n: el Compostela adelant¨® l¨ªneas, pero mantuvo sus defectos.
El segundo gol fue una mezclado de tiempos: Urzaiz control¨® el en¨¦simo bal¨®n con el pecho, lo cedi¨® a Lacruz que entr¨® con todo ante la bota de su oponenente. Entonces surgi¨® un apagado Julen Guerrero: lo control¨® con el pecho, recort¨® y lo mando a la otra esquina de Rafa. El ayer y el hoy en apenas un par de segundos.
El Athletic cumpl¨ªa los pron¨®sticos: ganar en casa y aprovechar los errores de los dem¨¢s. No le importa el juego, la exquisitez, la diplomacia. Antepone el resultado y lo obtiene mirando al pasado y al futuro.
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