Galicia legal¨ªza el f¨²tbol mixto
'Las mujeres gallegas podr¨¢n jugar con los hombres
Una epidemia de vanguardismo social recorre Galicia: primero fueron las uniones entre hermanos y los pol¨ªgonos amorosos, luego los matrimonios a tiempo parcial y ahora el f¨²tbol mixto. El Comit¨¦ de Disciplina Deportiva de Galicia acord¨® ayer permitir el acceso de mujeres a todas las competiciones, hasta el momento exclusivamente masculinas, que organiza la federaci¨®n de f¨²tbol de esta comunidad. La revolucionaria decisi¨®n es fruto de la tenacidad de un diminuto club pontevedr¨¦s, el Furia Atl¨¦tico, fundado hace dos a?os y que recurri¨® incluso al Defensor del Pueblo Auton¨®mico para preservar los derechos de tres chicas de equipo cadete. La decisi¨®n del Comit¨¦ de Disciplina, la ¨²ltima instancia de la justicia deportiva en Galicia, anula un acuerdo anterior de la Federaci¨®n Gallega, que en septiembre de 1997 se hab¨ªa negado a tramitar las fichas de Diana Rey, de 16 a?os, y Rosa Pardal y Rebeca Vi?as, ambas de 14. Las chicas hab¨ªan jugado tres partidos oficiales con el equipo cadete del Furia Atl¨¦tico, de Tercera Regional, mientras esperaban por la licencia definitiva.
El Furia representa a la parroquia de Campa?a, con apenas 1.200 habitantes dentro del municipio pontevedr¨¦s de Valga. Y no se call¨®. "No fue por chuler¨ªa, ni por ir de campeones de causas perdidas", recuerda Genaro Barreiro, directivo del club, "pero es que ning¨²n reglamento, ni siquiera la Ley del Deporte de Galicia, imped¨ªa la participaci¨®n de mujeres. Yo tambi¨¦n tengo una hija y no me gustar¨ªa que le hicieran eso". Barreiro se hart¨® de polemizar con los federativos, y uno lleg¨® a replicarle en un debate que cualquiera de las chicas podr¨ªa acusar de acoso sexual al compa?ero que la acometiese en el campo con excesiva fogosidad.
Carmino pr¨¢ctico
El club no ten¨ªa dinero para entablar un contencioso en la justicia ordinaria, y Barreiro opt¨® por lo pr¨¢ctico. Habl¨® con dos soci¨®logos de la Universidad de Santggo, Miguel Cancio y Carlos Allones, les pidi¨® un informe y recurri¨® al Comit¨¦ de Disciplina y al Valedor do Pobo. ?ste le contest¨® que, al tratarse la federaci¨®n de f¨²tbol de una entidad privada, no pod¨ªa entrometerse en su funcionamiento interno. Pero ha sido la justicia deportiva la que ha fallado a su favor, al dictaminar que a partir de ahora se podr¨¢n formar equipos mixtos en cualquier categor¨ªa. La experiencia ya se hab¨ªa ensayado con benjamines e infantiles. Tras la prohibici¨®n federativa, las tres chicas siguieron entren¨¢ndose y jugando partidos amistosos. La que m¨¢s promete, y tanbi¨¦n la m¨¢s constante, es Rosa Pardal, estudiante de 2? de ESO, delantera, zurda, y admiradora de Seedorf y Roberto Carlos. Un equipo femenino de Vilagarc¨ªa de Arousa ya le hab¨ªa echado el ojo, pero prefiri¨® renunciar para no perjudicar sus estudios. "A m¨ª me da igual jugar con chicos que con chicas", asegura, "lo que no me esperaba es que nos diesen la raz¨®n ahora, porque esos de la federaci¨®n son un poco raros".
Un caso similar ocurri¨® en 1994 en Benidorm (Alicante). La federaci¨®n valenciana dio por perdido un encuentro al Rayo Levantino por haber alineado a Lara R¨²as, que entonces ten¨ªa 9 a?os. La ni?a no volvi¨® a jugar. Desde 1993 la federaci¨®n espa?ola da libertad a sus asociados territoriales para que regulen esta cuesti¨®n. En algunas comunidades, como Madrid, tambi¨¦n se permite la presencia de ni?as s¨®lo en el f¨²tbol base.
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