Cautela ante los trasplantes de mono o de cerdo a hombre
El rechazo de ¨®rganos entre especies se estudia en A Coru?a
El descubrimiento reciente de retrovirus end¨®genos del cerdo capaces de infectar c¨¦lulas humanas ha puesto en tela de juicio la viabilidad del trasplante de ¨®rganos de este animal a personas. En los ¨²ltimos meses, han proliferado en las revistas cient¨ªficas art¨ªculos y opiniones reclamando una prudencia extrema ante lo que se prev¨¦ como el inminente inicio de ensayos cl¨ªnicos en humanos. Entre ellos, el llamamiento p¨²blico efectuado por prestigiosos cient¨ªficos en la revista Nature Medicine reclamando una moratoria para este tipo de ensayos hasta que no se haya aclarado si es posible que los ¨®rganos trasplantados act¨²en como vectores en la transmisi¨®n de enfermedades desconocidas.?Si realmente se demuestra que el trasplante de ¨®rganos de cerdo funciona en modelos experimentales con primates, las posibilidades de ¨¦xito del xenotrasplante en humanos ser¨¢n muy altas. El beneficio que podr¨¢ obtenerse entonces ser¨¢ muy superior al riesgo?, asegura Rafael M¨¢?ez, director del programa de xenotrasplante del Hospital Juan Canalejo de A Coru?a. ?Pero ahora no se est¨¢ en esa fase?, matiza inmediatamente.
Hoy por hoy, coinciden los especialistas, el riesgo supera al beneficio. Los resultados actuales, debido a problemas derivados del control del rechazo del ¨®rgano trasplantado y del manejo de los f¨¢rmacos inmunosupresores administrados, no permiten pensar que los ¨®rganos de cerdo puedan sobrevivir indefinidamente en las personas. En el mejor de los casos, y siempre en modelos experimentales con primates, se alcanzan 90 d¨ªas de supervivencia. Entonces, el ¨®rgano fracasa o bien el animal muere debido a complicaciones infecciosas que multiplican su intensidad por la potencia de una inmunosupresi¨®n que reduce al m¨¢ximo la capacidad de defensa del organismo.
Supervivencia
M¨¢?ez, que dirige el ¨²nico programa de estas caracter¨ªsticas en Espa?a, considera ineludible alcanzar supervivencias rutinarias superiores a los 120 d¨ªas antes de dar el siguiente paso, el ensayo con humanos. En estos momentos, afirma, se est¨¢ todav¨ªa lejos de esa posibilidad.El programa que desarrolla M¨¢?ez en A Coru?a tiene como objetivo principal poner a punto t¨¦cnicas de inmunosupresi¨®n que hagan compatible la prevenci¨®n al rechazo de los ¨®rganos y la defensa del organismo en xenotrasplante. Hasta la fecha, las t¨¦cnicas ensayadas han dado frutos positivos, por lo que M¨¢?ez iniciar¨¢ en las pr¨®ximas semanas los primeros xenotrasplantes de ¨®rganos de cerdo transg¨¦nicos a babuinos. El uso de cerdos transg¨¦nicos ha permitido superar el llamado rechazo hiperagudo, que destruye el ¨®rgano implantado en apenas unos minutos y que se manifiesta con gran virulencia cuanto m¨¢s alejadas est¨¢n entre s¨ª dos especies en la linea evolutiva. ?Hasta hace poco?, explica el experto, ?cre¨ªamos que el rechazo hiperagudo iba a representar el principal obst¨¢culo?. Sin la inmunosupresi¨®n adecuada, no obstante, aparecen otras formas de rechazo a los pocos d¨ªas.
Las t¨¦cnicas de inmunosupresi¨®n actuales permiten supervivencias prolongadas pero a¨²n insuficientes. El reto, se?ala M¨¢?ez, es hallar el punto de equilibrio. ?Podr¨ªamos aumentar la potencia de los f¨¢rmacos?, asegura, ?pero entonces abrir¨ªamos la puerta a infecciones oportunistas? que podr¨ªan afectar a los animales o incluso a sus cuidadores. Por esta raz¨®n, se est¨¢n tomando las m¨¢ximas precauciones en lo que refiere a condiciones de higiene y seguridad, de acuerdo con las normas dictadas por el Consejo de Europa y el Home Office brit¨¢nico. ?Los animales reciben un trato equivalente al de cualquier persona?, asevera Ma?ez. ?Cualquier atisbo de sufrimiento es suficiente para frenar la experimentaci¨®n?.
M¨¢?ez coincide en que dejar la puerta abierta a la entrada de infecciones podr¨ªa suponer un freno a este tipo de trasplantes aunque, matiza, debe valorarse si ¨¦stas son individualizadas o, por el contrario, pueden extenderse al resto de la poblaci¨®n. En el caso de los alotrasplantes (trasplantes de ¨®rganos entre humanos), recuerda, la causa principal de mortalidad a largo plazo no es el rechazo de los ¨®rganos sino las complicaciones infecciosas.
Los temores de los firmantes de la petici¨®n de moratoria apuntan en la direcci¨®n de que virus desconocidos puedan saltar la barrera de las especies, adaptarse a su nuevo hu¨¦sped e iniciar el camino de lo que podr¨ªa llegar a ser una pandemia mundial.
La soluci¨®n pasa por asegurar que esta v¨ªa es, como mucho, un riesgo individual. Para ello, se est¨¢ investigando en la actualidad si entre los receptores de tejidos o c¨¦lulas de animales existen indicios de retrovirus u otros agentes infecciosos. El control, llevado a cabo desde el Center for Disease Control de Atlanta, incluye a unos 200 enfermos a los que se injertaron islotes pancre¨¢ticos (enfermos de diabetes), c¨¦lulas fetales (Parkinson) o v¨¢lvulas card¨ªacas.
Mientras tanto, M¨¢?ez, al igual que otros colegas, reclama que pueda demostrarse si el xenotrasplante puede ser o no viable en condiciones de seguridad, dado que el beneficio potencial ?es muy superior al riesgo de transmisi¨®n de enfermedades. Hay que ver la capacidad de infecci¨®n en condiciones reales, qu¨¦ enfermedades induce y si existir¨¢n luego v¨ªas de transmisi¨®n espont¨¢nea?. Los primeros trasplantados, concluye, deber¨¢n someterse a un extraordinario control.
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