Bienestar Social subvencion¨® la empresa de cunicultura de dos cargos de la consejer¨ªa
La Consejer¨ªa de Bienestar Social subvencion¨® en 1997 con m¨¢s de cinco millones de pesetas a la Sociedad Agr¨ªcola de Transformaci¨®n (SAT) Encoll¨¤, una empresa de cunicultura ubicada en Chiva que es propiedad de Fernando P¨¦rez Campos, jefe de programas de la Direcci¨®n Territorial de Asuntos Sociales y presidente del PP de Benaguasil; Manuel Puig, director del Centro de recepci¨®n de menores de Godella, y un tercer socio, ex trabajador de ese centro. Las ayudas se concedieron para favorecer la integracion de j¨®venes procedentes de entornos marginales.
La SAT Encoll¨¢ fue registrada en febrero de 1989 en la Direcci¨®n General de Desarrollo del Ministerio de Agricultura, constituida con un capital social de 1.750.000 pesetas desembolsado por cuatro socios: P¨¦rez Campos, Puig, el ex trabajador de la consejer¨ªa y actual encargado de la granja, Fernando Mascarell, y otro accionista, ya retirado de la sociedad. El objetivo de la empresa, que figura como tal en los archivos de la C¨¢mara de Comercio y en el Registro Mercantil de Valencia, era la explotaci¨®n comunitaria de ganado, y sus expectativas econ¨®micas pasaban por obtener un beneficio anual superior a los cinco millones de pesetas gracias a la producci¨®n de 98.000 kilogramos de carne de conejo. El car¨¢cter mercantil de la firma no fue nunca obst¨¢culo para que la SAT percibiera subvenciones de la Consejer¨ªa de Bienestar Social -en sus diferentes denominaciones- desde principios de la d¨¦cada de los 90, con la Generalitat a¨²n gobernada por el PSOE. Durante 1997, la Consejer¨ªa de Bienestar Social, m¨¢s concretamente la Direcci¨®n General de Servicios Sociales, concedi¨® una ayuda de 5.800.000 pesetas a la empresa, ubicada en media hect¨¢rea de terreno de una partida rural de Chiva. La concesi¨®n de la ayuda ten¨ªa, seg¨²n la consejer¨ªa, una clara finalidad: "Potenciar la integraci¨®n sociolaboral de determinados colectivos con problemas de marginaci¨®n social mediante el apoyo terap¨¦utico y la formaci¨®n prelaboral". Ocho j¨®venes, procedentes del mismo Centro de Recepci¨®n de Menores de Godella o enviados por algunos ayuntamientos trabajaron con esa te¨®rica finalidad durante todo el a?o, en horario de ma?ana y bajo la ¨²nica supervisi¨®n de Mascarell, responsable de una SAT dedicada a la cr¨ªa de conejos cuya carne, obviamente, es comercializada. Esta sociedad es la ¨²nica empresa que aparece en la relaci¨®n de entidades favorecidas con este tipo de ayudas, copadas en su casi totalidad por sociedades sin ¨¢nimo de lucro y colectivos religiosos. De hecho, la ¨²nica entidad mercantil receptora de ayudas que figura en el listado de beneficiados de la consejer¨ªa es la SAT Encoll¨¢, presentada como tal y en ning¨²n caso como escuela de trabajo, iniciativa social o entidad ben¨¦fica. El gabinete de prensa de Bienestar Social no facilit¨® ayer ni el listado de las 30 entidades beneficiadas ni las cantidades que percibieron. Este diario tampoco pudo hablar ayer con Mar¨ªa Luisa Garc¨ªa Merita, directora general de Servicios Sociales, el departamento de la Consejer¨ªa de Bienestar Social encargado de conceder las ayudas recibidas por P¨¦rez Campos -que fue ascendido a jefe de programas de su anterior puesto de Coordinador T¨¦cnico en Godella-, Puig y Mascarell. Posible incompatibilidad Varios juristas consultados por EL PA?S aseguraron ayer que la concesi¨®n de ayudas por parte de una administraci¨®n p¨²blica a algunos de sus empleados -en este caso dos trabajadores con cargos de responsabilidad y libre designaci¨®n, uno de ellos, afiliado y presidente de una agupaci¨®n del partido en el poder- viola la Ley de Incompatibilidades a la que est¨¢n sometidos los funcionarios y, posiblemente, la Ley de Contratos del Estado. Estas supuestas irregularidades se ver¨ªan agravadas por la utilizaci¨®n de j¨®venes de entre 16 y 18 a?os, todos ellos muchachos crecidos en un entorno marginal, procedentes de familias desestructuradas y en algunos casos con problemas de drogadicci¨®n, en una actividad creada con el l¨ªcito objetivo de obtener beneficios econ¨®micos. A pesar de ello, la cuenta de resultados presentada por la SAT Encoll¨¢ en 1996 deja traslucir p¨¦rdidas -bien es cierto que m¨ªnimas- de 51.065 pesetas.
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