La ley que proh¨ªbe traspasar La Rambla
"No conozco ning¨²n pleito de un gitano contra otro en los tribunales ordinarios, mientras que son numerosos los de personas gitanas contra payas y viceversa". Las causas de este curioso fen¨®meno, a juicio del abogado de Barcelona Eduardo Ruiz, cuyo despacho representa a la Uni¨®n Roman¨ª, residen en la estricta aplicaci¨®n de la ley gitana entre ciudadanos de esa etnia. Ruiz acompa?¨® a Juan de Dios Ram¨ªrez Heredia, miembro de la comisi¨®n Racismo y Xenofobia de la Uni¨®n Europea, en una sesi¨®n sobre la ley gitana, analizada como forma de resoluci¨®n alternativa de conflictos en el Colegio de Abogados de Barcelona. La ley gitana tiene su fundamento en el respeto a los criterios arbitrales y mediadores de los "hombres de respeto". Ellos imparten justicia, hacen de mediadores y aconsejan sobre las "ofensas". Ram¨ªrez Heredia asegura que la firmeza de su criterio ejecutivo reside en dos pilares: el prestigio del mediador y "la fuerza de las pistolas y cuchillos que puede tener detr¨¢s". Una de las soluciones impuestas en Barcelona para resolver conflictos entre familias enfrentadas ha sido tradicionalmente la ubicaci¨®n de unas y otras a la derecha y a la izquierda de La Rambla durante un cierto periodo de tiempo. Ram¨ªrez de Heredia afirm¨®: "La Rambla es todav¨ªa el eje tradicional de la separaci¨®n territorial impuesta entre familias. Ellos saben lo que les puede pasar en caso de transgredir esa frontera". La calificaci¨®n jur¨ªdica de las ofensas entre personas gitanas, seg¨²n su costumbre, descansa en la idea de la culpabilidad objetiva, no en la intenci¨®n. En las ofensas menos graves se tiene en cuenta la repercusi¨®n social de lo sucedido. Cuantos m¨¢s miembros del pueblo est¨¢n implicados, mayor gravedad se concede al hecho punible. La fidelidad a la palabra es otro de sus principios jur¨ªdicos consuetudinarios. La idea de venganza y su justificaci¨®n por el pueblo perviven todav¨ªa con gran fuerza. Evoluci¨®n La ley gitana est¨¢ considerada de aplicaci¨®n a unos 12,5 millones de ciudadanos. De ellos, 10 millones residen en Europa. Se trata de un conjunto de normas no escritas, una de las principales manifestaciones culturales de un pueblo con un ¨ªndice de analfabetismo del 50%. El kris es su tribunal de justicia y el krisipen su c¨®digo penal. Ram¨ªrez de Heredia defendi¨® la evoluci¨®n de la ley gitana m¨¢s all¨¢ de fundamentalismos y afirm¨® que es condici¨®n para su aplicaci¨®n que los afectados la acepten previamente. "S¨®lo desde la marginalidad se puede entender la pervivencia de esta ley. El pueblo no conf¨ªa en otras leyes que no conoce y que dimanan de quien consideran sus represores".
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