El analfabetismo, el sida y las agresiones marcan la prostituci¨®n en M¨¢laga

,Todas dicen tener el firme prop¨®sito de abandonar la prostituci¨®n "alg¨²n d¨ªa". Las que buscan clientes por las esquinas son las m¨¢s castigadas por la droga, la c¨¢rcel, el sida, el analfabetismo e incluso por sus clientes. Las que trabajan en clubes tienen una mejor situaci¨®n: mayor nivel educativo, menos agresiones y escasa dependencia de los estupefacientes. Para aliviar la situaci¨®n de la prostituci¨®n, el Ayuntamiento de M¨¢laga ha inaugurado una casa de acogida.

La mitad de las prostitutas malague?as son analfabetas, el 35% sufre agresiones y casi el 20% se inici¨® siendo menor de edad. Las conclusiones corresponden a la investigaci¨®n sobre la prostituci¨®n en la ciudad de M¨¢laga realizada durante 1997 por la asociaci¨®n Mujer Emancipada con el apoyo del Ayuntamiento. Los datos han motivado que la Concejal¨ªa de Asuntos Sociales ponga en marcha actuaciones como la casa de acogida que acaba de inaugurar y que dar¨¢ atenci¨®n a unas 60 mujeres al a?o. Entre los datos m¨¢s llamativos destaca el alto ¨ªndice de analfabetismo del colectivo, situado en torno al 50%. Pero esta media esconde situaciones bien dispares porque la falta de estudios es m¨¢s fuerte entre las mujeres que se prostituyen en la zona del Muro de San Juli¨¢n (83%) y en la calle (41%), que entre las que trabajan en clubes de alterne (19%). El informe revela tambi¨¦n que el 7% tiene, aunque incompletos, estudios universitarios. La investigaci¨®n confirma que las prostitutas forman un colectivo especialmente castigado y no s¨®lo en t¨¦rminos sociales, sino f¨ªsicos. Casi el 35% sufre agresiones, generalmente de sus clientes, aunque la situaci¨®n es bien distinta seg¨²n ejerzan la profesi¨®n en la calle (60%), en el Muro (26%) o en clubes (11%). Su condici¨®n de v¨ªctimas viene de lejos. El 10% ha sido objeto de abusos sexuales en la infancia, porcentaje que se duplica en el caso de las que ejercen la prostituci¨®n callejera (19%). Casi la quinta parte de las prostitutas (18%) se inicia antes de haber alcanzado la mayor¨ªa de edad. Tambi¨¦n en este apartado el lugar donde se ejerce la actividad marca diferencias. De las que trabajan en el Muro, empezaron siendo menores el 26%. La cifra baja al 16% en el caso de las que se dedican a la prostituci¨®n callejera y al 11% en los recintos cerrados. Cerca del 40% consume estupefacientes. Pero esta media puede llevar a enga?o porque la drogodependencia va del 80%, entre las mujeres que trabajan en la calle, al 3% de las empleadas en clubes. La situaci¨®n de las prostitutas callejeras es sangrante. Trabajan para pagarse la dosis: ganan unas 10.000 pesetas diarias y las gastan casi exclusivamente en hero¨ªna o revuelto. Caen en esta actividad justamente por su drogodependencia y aunque procuran abandonar los narc¨®ticos, el 93% fracasa en su intento. En t¨¦rminos generales, la mayor¨ªa (38%) empieza a consumir drogas a edades bastante precoces (entre los 13 y los 18 a?os), de ah¨ª que la investigaci¨®n incida en la prevenci¨®n como f¨®rmula para evitar la posterior "prostituci¨®n, transeuntismo, desarraigo familiar y de los hijos". Las prostitutas callejeras son tambi¨¦n las que lo tienen m¨¢s crudo a la hora de buscarse un techo. El 65% es semin¨®mada, ya que vive en pensiones, con amigos o deambula por casas semiderruidas de la ciudad. Son adem¨¢s las que registran un ¨ªndice de seropositivas m¨¢s alto (16% frente a niveles casi inexistentes en los clubes) y las que m¨¢s pierden la custodia de los hijos. La concejala de Asuntos Sociales, Avelina Sanguinetti, anunci¨® que la casa de acogida reci¨¦n inaugurada servir¨¢ para que las prostitutas den los primeros pasos de desintoxicaci¨®n de estupefacientes y abandonen su actividad. Un equipo interdisciplinario les abrir¨¢ las puertas para que pasen luego a una comunidad terap¨¦utica donde podr¨¢n completar su desintoxicaci¨®n e incluso se esmerar¨¢ en encontrarles un empleo.