Los diestros coinciden en la dificultad de los toros
Los tres matadores que actuaron en la corrida parecen haberse puesto de acuerdo a la hora de enjuiciar las condiciones de las reses que se lidiaron. Todos se muestran conformes en que no resulta normal que, en un corrida, salgan al ruedo seis toros con tantas dificultades. ?Creo que hace mucho tiempo que no se ha visto en una plaza de toros uno tan complicado en el primer tercio como el cuarto de la tarde? dice Pep¨ªn Jim¨¦nez. Y considera, ir¨®nicamente, que si en la faena de muleta pudo pararse y sacarle pases ?fue porque el toro se equivoc¨®?.?Ese toro de Los Millares lleg¨® reserv¨®n a la muleta? dice el diestro de Lorca. ?Al tomar el enga?o pegaba el arre¨®n y amagaba la cornada. Por eso se produc¨ªan los enganchones. Despu¨¦s, seguramente por equivocaci¨®n, sac¨® algo de nobleza y pude arrancarle algunos muletazos?. En cambio, con el primer toro no hubo manera de conseguir nada. ?Era un bicho imposible, que no pasaba. Se quedaba debajo con peligro y tuve que cortar la faena la seguda vez que se me col¨®?.
?No he visto en mi vida toros tan grandes ni tan malos como los de esta tarde? dice con un deje de guasa Morante de la Puebla. Y a?ade que no entiende que en una plaza como la de Las Ventas y con un lleno total en los tendidos se hayan tra¨ªdo animales de esas trazas y comportamiento. ?As¨ª no se puede divertir el p¨²blico?, dice. ?Mi primer toro era muy peligroso, sobre todo por el pit¨®n izquierdo. Y el segundo se me colaba en el capote. Menos mal que hemos salido vivos?, concluye con un deje de amarga ironia.
Satisfecho
S¨®lo Canales Rivera, a¨²n reconociendo los problemas de sus enemigos, est¨¢ satisfecho y contento con su labor. ?No he seguido las corridas anteriores de esta feria, pero estoy seguro de que no ha salido en ninguna lo que ha salido en esta?. Pero a pesar de la dureza del ganado, indica que el primero de su lote era un toro ?para jugarse la vida?. Por eso insisti¨® en darle la larga cambiada en la puerta de toriles. ?Aunque lo pas¨¦ muy mal, creo que el p¨²blico ha podido darse cuenta de la importancia de lo que he hecho. He pasado un trago, pero me parece qzue ha merecido la pena?.Los toreros hablan tambi¨¦n de las infames condiciones climat¨®logicas de la tarde. ?Nosotros quer¨ªamos torear y as¨ª se hizo constar en el acta. Luego, el presidente decidi¨® que ten¨ªa que retrasarse el comienzo del festejo?. Esta circunstancia puso nervioso a Canales Rivera. ?Lo que da miedo es ir a la guerra?, dice. ?Despu¨¦s, cuando ya estas en ella, nada te importa?. Pero a Pep¨ªn Jim¨¦nez lo que le puso nervioso ?es no saber si ¨ªbamos a torear o no, por las dudas del presidente?. Tampoco parece importarles la lluvia. ?Es peor el viento?, manifiestan los tres.
Babelia
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