Pozos de Sax
EL PA?S se ha hecho eco del transcurso del primer siglo desde la explotaci¨®n de los pozos de Sax para suministro de Alicante. Y lo que para esta ciudad fue alegr¨ªa en aquel momento, para otras muchas, y para una de las comarcas m¨¢s deprimidas de la Comunidad, supuso el comienzo de un proceso de agotamiento y sobreexplotaci¨®n del agua. A Sax le siguieron todas las localidades del Alto Vinalop¨®, que a lo largo de este siglo han visto proliferar las prospecciones subterr¨¢neas. Una concepci¨®n iusprivatista de las aguas subterr¨¢neas hizo posible que un bien de todos quedara en las manos exclusivas de unos pocos. Y tras las aguas de Sax, vinieron las conducciones del Canal de la Huerta de Alicante, de la Comunidad de Aguas de Novelda, de las comunidades de regantes de Elda... etc¨¦tera. La muerte y la desolaci¨®n llegan a unas tierras que hasta entonces disfrutaban de sus aguas. Y las cosas no eran nuevas, no; con varios siglos de anterioridad los vecinos de Elche pugnaban por las aguas de esta zona. Este siglo ha visto agotarse, sin remisi¨®n, multitud de manantiales del Alto Vinalop¨®. Por supuesto, las fuentes p¨²blicas de Villena se agotaron r¨¢pidamente; otras, cuyo caudal era descomunal, no pudieron aguantar la competencia de los sondeos subterr¨¢neos. Los sistemas acu¨ªferos del Alto Vinalop¨® est¨¢n hoy todos en r¨¦gimen de sobreexplotaci¨®n por una implacable gesti¨®n abusiva, y por la tradicional inoperancia de los organismos p¨²blicos, que contemplan, impasibles, este expolio. Todo el corredor alicantino que acompa?a a la autov¨ªa entre Villena y Alicante se surte hoy de aguas de la zona. El "canal de la muerte", llam¨® la prensa villenense de principios de siglo al que construy¨® la sociedad del canal de la huerta de Alicante. La expresi¨®n result¨® prof¨¦tica para el Alto Vinalop¨®, sujeto desde hace un siglo a pagar un precio muy alto (el irreversible agotamiento de un recurso de todos), sin recibir nada a cambio. Esperemos que el ansiado trasvase J¨²car-Vinalop¨® pueda remediar esta injusticia hist¨®rica y aliviar la tr¨¢gica situaci¨®n del m¨¢s preciado de los recursos: el agua.- . .
Financiar la universidad
Los vicerrectores econ¨®micos de las universidades valencianas andan estos d¨ªas a vueltas con la falta de presupuesto. El planteamiento del asunto ante la Administraci¨®n auton¨®mica dista mucho de ser el adecuado, pues han ignorado la psicolog¨ªa del personaje rector de los destinos de nuestra comunidad. En primer lugar, yerran al reunirse para exigir sus leg¨ªtimas reivindicaciones, en zona hostil, la Universidad de Alicante. El segundo error es de log¨ªstica o planteamiento. La universidad necesita 10.000 millones del Consell, pues es muy sencillo: se presentan 10 proyectos de 1.000 millones cada uno, y, por ejemplo, se propone el cambio de cerraduras de todas las puertas de las universidades. Se presenta el proyecto en un acto acad¨¦mico festivo, se invita a una figura nacional adicta como presentador / a, y al Honorable President para que ponga el primer tornillo, corra la cortinilla de la placa conmemorativa y eso s¨ª, que no falte la televisi¨®n. Caso de ser necesario, se puede repetir el acto tantas veces sea preciso e incluso idear eventos como la colocaci¨®n del primer ladrillo de cualquier tabique que se pretenda levantar. Condici¨®n sine quanon, que hayan c¨¢maras de televisi¨®n. Con ello, se consiguen varias cosas: cubrir el presupuesto de las universidades, tener entretenido al personal (pol¨ªtico) para que no piense en otras cosas, que ser¨ªan peores y que los amigos (del honorable) de la televisi¨®n valenciana salven su cuota diaria de peloteo presidencial.- .
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