Rold¨¢n y el ex jefe de la Polic¨ªa de Pamplona se contradicen sobre si Marey pas¨® por Dantzarinea

El ex director de la Guardia Civil, Luis Rold¨¢n, y el ex jefe superior de Polic¨ªa de Pamplona, Eduardo Couto Dato, emitieron ayer dos testimonios radicalmente diferentes sobre la presencia de Segundo Marey en el puesto fronterizo navarro de Dantzarinea. Couto testific¨® que ¨¦l jam¨¢s habl¨® a Rold¨¢n de Segundo Marey porque ignoraba que ¨¦ste estuviese en la frontera, y asegur¨® que aunque el juez Garz¨®n lo recogi¨® as¨ª en un acta de careo, tal diligencia nunca lleg¨® a celebrarse. Rold¨¢n declar¨® que Couto le hab¨ªa dicho que en la frontera ten¨ªan a Segundo Marey y as¨ª se lo notific¨® a Vera.

El testimonio del jefe superior de Polic¨ªa de Pamplona la noche del secuestro de Marey fue tan sorprendente que se lo hicieron repetir tres veces, ya que en la diferencia de versiones radica que Rafael Vera pudiese haber sido informado o no por Rold¨¢n de la presencia de Marey en la frontera.A preguntas del fiscal, Couto afirm¨® que esa noche no supo nada de la existencia de Segundo Marey en la frontera navarra: "Me llam¨® el inspector jefe de Dantzarinea diciendo que ten¨ªa detenido a un marroqu¨ª que ten¨ªa tel¨¦fonos de la Jefatura Superior de Polic¨ªa de Bilbao. Ante la sospecha de que pudiera tratarse de un preludio de atentado llam¨¦ al delegado del Gobierno, que entonces era Luis Rold¨¢n. Me dijo que esperara un momento, que iba a hacer una gesti¨®n. Quince o veinte minutos m¨¢s tarde me llam¨® y me dijo que no me metiera en nada, que era un asunto de Bilbao. Pero esa noche nadie me habl¨® del secuestro de Segundo Marey".

El defensor de Rafael Vera, Manuel Cobo del Rosal, hizo notar que en un careo que mantuvo con Rold¨¢n en la fase sumarial, Couto se hab¨ªa mostrado de acuerdo en haber hablado de Segundo Marey. El ex jefe policial de Pamplona respondi¨®: "Es que no hubo ning¨²n careo. Cuando llegu¨¦ al juzgado, el magistrado se?or Garz¨®n me dijo que iba a tener que esperar, porque le estaba tomando declaraci¨®n a Rold¨¢n. Al cabo de un par de horas me encontr¨¦ con Rold¨¢n en el pasillo, y le salud¨¦. Yo entonces no me acordaba del nombre de Mohand Talbi, que es al que hab¨ªan visto en Dantzarinea. Cuando entr¨¦ en su despacho, el juez me dijo: "Bueno, est¨¢n ustedes de acuerdo porque Rold¨¢n se acuerda del nombre del moro". As¨ª que firm¨¦ y adi¨®s. Entiendo que el careo es si hubiera habido controversia, pero no nos careamos".

El defensor hizo leer el acta de careo en la que consta que Rold¨¢n se ratifica en que Couto le habl¨® de Marey y el ex jefe superior de Pamplona conviene. "Es que hay un error tremendo", salt¨® Couto, "porque ah¨ª yo no sab¨ªa nada de Segundo Marey. Modifico totalmente eso porque eso no es cierto. No pude dar el nombre de Marey porque lo desconoc¨ªa totalmente". "Y tengo la mala costumbre de firmar sin leer", agreg¨®, provocando una carcajada general en la sala.Couto insisti¨® en que firm¨® porque el juez le hab¨ªa dicho que no hab¨ªa problema y precis¨®: "Donde pon¨ªa Segundo Marey deb¨ªa poner Mohand Talbi porque si no yo ser¨ªa conocedor del asunto y a m¨ª nadie me dijo nada".

El testimonio de Couto coincidi¨® con los que el martes emitieron el jefe de puesto de Dantzarinea, Jes¨²s Rodr¨ªguez Velasco, y un agente del puesto, que aseguraron haber identificado al franc¨¦s de origen argelino Talbi y haber notificado que ¨¦ste pregunt¨® por un alto jefe policial de Bilbao, pero que nunca vieron a Marey y que ¨¦ste debi¨® ser introducido en Espa?a por alguno de los ocho o nueve puentes sin vigilancia que hay en la zona.

Luis Rold¨¢n capt¨® toda la atenci¨®n al entrar a declarar despu¨¦s de Couto. Con aspecto avejentado, custodiado por dos fornidos polic¨ªas, hizo adem¨¢n de sentarse, pero el presidente le ataj¨®: "No se siente todav¨ªa". A las preguntas de rigor Rold¨¢n jur¨® "decir la verdad". En la sala de juicio nadie se alter¨®, pero en la sala de prensa los informadores rompieron en una carcajada general.

El presidente Jos¨¦ Jim¨¦nez Villarejo le mantuvo en pie mientras Rold¨¢n declaraba tener "amistad" con Sancrist¨®bal, "intereses contrapuestos" con Vera y estar condenado a 28 a?os de c¨¢rcel por malversaci¨®n, cohecho, estafa y otros delitos.

Rold¨¢n respondi¨® en tono apagado e impersonal, desprovisto del br¨ªo y los registros de mando de otros tiempos. Dijo que en 1983, a?o del secuestro de Marey, ten¨ªa "excelentes relaciones" con Barrionuevo y "correctas con Vera". Despu¨¦s ratific¨® su versi¨®n de que Couto le hab¨ªa dicho que en la frontera estaba detenido "un franc¨¦s que quer¨ªa hablar con la jefatura de Bilbao y ten¨ªa a Segundo Marey", y as¨ª se lo transmiti¨® ¨¦l a Rafael Vera.

Rold¨¢n declar¨® que en Interior no preocupaba el tema de los GAL, y apostill¨®: "A m¨ª tampoco, vamos". Sobre el secuestro de Marey dijo que habl¨® de ello con Barrionuevo: "Aunque el ministro no dijo que lo orden¨®, para m¨ª qued¨® claro que hab¨ªa sido un acto del ministerio".