"No comparto mis dones con corruptos"
Al frente de un potente septeto, Carlos Santana presenta por Espa?a la ¨²ltima versi¨®n de Santana. El grupo, que inici¨® ayer su gira en Madrid con una actuaci¨®n en el Cuartel de Conde Duque, toca hoy en M¨¢laga y tiene previstas paradas tambi¨¦n en Valencia (1 de julio), Barcelona (2), Vigo (4) y Gij¨®n (5). Coincide esta visita con la reedici¨®n de sus poderosos primeros discos -Santana, Abraxas y Santana III-, trabajos que facilitaron la entrada de los ritmos afrocubanos en el rock. Actualmente, Carlos Santana considera que su m¨²sica tiene una funci¨®n espiritual: "Las religiones organizadas se han convertido en negocios que se basan en sembrar la culpabilidad y el miedo en la mente de la gente; Bob Marley o yo mismo queremos hacerles ver la realidad".
Nuevas canciones
A Carlos Santana le esperaba en su hotel madrile?o un bosquejo de lo que podr¨ªa ser la portada para su nuevo disco, Mumbo Jumbo. Ser¨¢ su deb¨² para Arista, compa?¨ªa que dirige Clive Davis, el ejecutivo que le fich¨® para CBS en 1969: "Queremos que en la radio suenen las nuevas canciones de Santana, no los viejos temas de siempre.Clive relanz¨® la carrera de Aretha Franklin, y nosotros tenemos una m¨²sica igualmente vital y honesta".
Cuando Santana habla en plural se refiere a s¨ª mismo y a su esposa, Deborah, implicada en la direcci¨®n de su carrera, pero tambi¨¦n en actividades filantr¨®picas, como las de la Fundaci¨®n Milagro: "Ayudamos a mujeres solteras de Tijuana que se quedan embarazadas y son rechazadas por sus novios y sus familias. Para evitar que vendan drogas o sus cuerpos, les proporcionamos clases de inform¨¢tica. Se trata de devolver algo de lo que nos ha dado el p¨²blico: personalmente no me interesa tener m¨¢s carros, m¨¢s televisores, m¨¢s casas".
Carlos Santana, de 50 a?os, asegura que no es una estrella de rock al uso: "En mis paredes no encontrar¨¢s discos de platino ni premios; todo est¨¢ empaquetado en mi garaje. ?Sabes que tienes que pagar para que te pongan una estrella con tu nombre en Hollywood? Prefiero el reconocimiento de mis hermanos m¨²sicos, que me telefoneen Paco de Luc¨ªa o Wayne Shorter cuando pasan por San Francisco". ?sos son los verdaderos honores, insiste el m¨²sico, no el actuar en actos supuestamente prestigiosos. "He rechazado tocar ante tres presidentes estadounidenses", dice Santana. "La ¨²ltima vez, Clinton quer¨ªa que animara el final de la cumbre de los dirigentes latinoamericanos, pero no quiero compartir mis dones con gente corrupta que tiene mucha sangre sobre su conciencia. Tampoco acept¨¦ actuar ante el presidente de M¨¦xico, y todav¨ªa no me lo han perdonado".
Su relaci¨®n con los poderes de su pa¨ªs natal es problem¨¢tica: "En los ochenta di una rueda de prensa en el Distrito Federal y mis compatriotas me recriminaron que no tocara g¨¦neros mexicanos, "como el huapango", perd¨®n, le respond¨ª, la m¨²sica veracruzana viene de ?frica por v¨ªa de Cuba; la ¨²nica m¨²sica verdaderamente aut¨®ctona es la de los zapotecas, los toltecas, los tarahumaras y dem¨¢s pueblos ind¨ªgenas. Se enfadaron mucho".
En su pa¨ªs actual, Santana lleva con orgullo su car¨¢cter de chicano, aunque su castellano sea dubitativo: "Lo que nos ocurre a los latinos de Estados Unidos es que no diferenciamos entre ser nobles y ser pendejos. ?Se aprovechan de nosotros! California dejar¨ªa de funcionar si los hispanos se pusieran en huelga. Las leyes esas del english first son est¨²pidas, ya que los estadounidenses ni siquiera hablamos buen ingl¨¦s. Todos nos necesitamos y es absurdo crear enfrentamientos entre comunidades".
Mundo chicano
Su car¨¢cter de personaje emblem¨¢tico del mundo chicano le ha supuesto algunos problemas: "Me arrestaron en el aeropuerto de Houston por llevar un cigarrillo de marihuana no mayor que un mondadientes, y sali¨® en todos los peri¨®dicos. Creo que la cultura occidental no es capaz de distinguir entre medicinas y drogas", asegura el m¨²sico. En su opini¨®n, la mescalina, el peyote, la marihuana, son productos de la tierra que tienen funciones medicinales, ya que "nos ayudan a mirar hacia nuestro interior. Son como un espejo que te revela qui¨¦n eres. Tu madre insiste en que cumplas como cristiano, tu padre cree que debes ser muy macho, tus profesores dicen que seas un ciudadano respetuoso con las leyes... Muchas personas terminan por no saber qui¨¦nes son en realidad. Esas medicinas permiten que cambies el pellejo, como las serpientes, y contemples lo que hay de esencia divina dentro de ti. Las drogas son creaciones humanas que no te liberan, sino que te aprisionan. Hay mucha hipocres¨ªa en esto: cuando localizan un laboratorio de coca¨ªna en Colombia, ves que los narcos usan productos made in USA", aclara.El guitarrista contempla con satisfacci¨®n el hecho de que se aplauda la reedici¨®n de los tres primeros LP de Santana: "Son discos excitantes, aunque mi mejor m¨²sica est¨¢ en Caravanserai o Welcome. Fue entonces cuando encontr¨¦ una voz propia como instrumentista. El rock es una peque?a alberca mientras que el jazz es un gran oc¨¦ano; digamos que yo estoy en medio, que nado en un lago. Ning¨²n m¨²sico debe limitarse: yo le digo a mi hermano Javier Vargas que no acepte que le llamen "el mejor guitarrista espa?ol de blues". ?l debe tomar mi antorcha y crear algo propio". Para Santana, los espa?oles contamos con la ventaja del poso del islam, y eso explica que la m¨²sica espa?ola tenga tanto sabor. "Pas¨¦ mis primeros a?os de ciudad en ciudad y llegu¨¦ a San Francisco sin una identidad cultural clara; fue all¨ª donde descubr¨ª a un guitarrista h¨²ngaro llamado Gabor Szabo, que me sac¨® de mi obsesi¨®n por B.B. King. Era un m¨²sico de jazz, pero en sus dedos estaba el arte de los gitanos. Para desarrollar algo nuevo debes tener hambre, fuego espiritual y limpieza de alma. Por eso los brasile?os tocan tan buena m¨²sica y juegan tan buen f¨²tbol".
Babelia
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