Sally Potter filma la pasi¨®n ¨ªntima del tango

La cineasta y bailarina inglesa Sally Potter empez¨® a tomar lecciones de tango para olvidar la obsesi¨®n que le produc¨ªa escribir el gui¨®n de una nueva pel¨ªcula. "Poco a poco, la pasi¨®n de ese baile arrabalero y tierno conquist¨® mi alma". Potter acab¨® tirando a la basura su gui¨®n anterior para escribir otro, La lecci¨®n de tango, en el que narra su experiencia ¨ªntima como bailarina de tango en una "peligrosa mezcla de realidad y ficci¨®n". Tanto que Potter, que nunca hab¨ªa actuado en cine, se interpreta a ella misma en el filme que se estrena el viernes en Espa?a.

"Bueno, no s¨¦ si soy yo la que aparece en la pel¨ªcula", dice Potter por tel¨¦fono desde Londres. "M¨¢s bien me parece que soy una extra?a versi¨®n de m¨ª misma. Cuando me miro, me parece que no soy yo, pero es curioso, porque mucha gente dice que todo parece verdad completamente. Eso es un gran cumplido, porque la pel¨ªcula trata de contar una historia con la mayor naturalidad posible, as¨ª que quiere decir que logr¨¦ el objetivo. Pero, por otro lado, es inc¨®modo sentir eso, porque plantea una duda. ?Qu¨¦ es m¨¢s verdad, la vida real o la ficci¨®n? Yo creo que la ficci¨®n es la mejor manera de contar la vida. Un documental hubiera sido m¨¢s aburrido y menos verdadero".La lecci¨®n de tango narra la historia de una cineasta que, en el trance de la escritura de su nueva pel¨ªcula, empieza a tomar clases de tango con un profesor llamado Pablo Ver¨®n -¨¦l mismo en la vida real-. De esas clases surge poco a poco un romance intenso, complejo, hecho de esfuerzo, placer e insinuaci¨®n... "La historia habla de la atracci¨®n entre los opuestos", explica Potter. "Entre las culturas latinoamericana y sajona, entre lo masculino y lo femenino, entre el observador y el que es observado, entre el que ama y el que es amado, entre el que manda y obedece".

Vida y baile

Potter y Ver¨®n (una estrella tan c¨¦lebre en los salones bonaerenses como en el Folies Berg¨¨res de Par¨ªs) bailan sin parar a lo largo de la pel¨ªcula: en las calles, en el metro, en el estudio, incluso en un escenario, delante de p¨²blico. Y, mientras ella aprende y trata de comprender todos los matices del tango, tan contradictorios -humor y honor, desgarro y ternura, serenidad y sensualidad...-, la relaci¨®n con su profesor se va convirtiendo en met¨¢fora: las lecciones de baile son a la vez lecciones de vida y de pasi¨®n para esa mujer en apariencia fr¨ªa, pero realmente borracha de tango. "S¨®lo sab¨ªa que ten¨ªa que contar la historia desde dentro. Porque lo que empez¨® como un proceso de integraci¨®n de mis distintas trayectorias como int¨¦rprete, bailarina, directora y escritora se convirti¨® enseguida en un equilibrio muy fr¨¢gil, que se manten¨ªa en tensi¨®n por la complicada relaci¨®n entre los hechos reales y la ficci¨®n. Notaba que ten¨ªa que sentir la historia, y que por eso estaba obligada a interpretarme a m¨ª misma, aunque nunca hab¨ªa querido ponerme ante una c¨¢mara por timidez, porque la inspiraci¨®n de la que surg¨ªa la pel¨ªcula era mi deseo personal de bailar. Sin la fuerza de ese deseo, me hubiera sentido perdida, y la pel¨ªcula tambi¨¦n habr¨ªa perdido la inspiraci¨®n que le daba sentido". Potter no explica si el romance con Ver¨®n, con el que acab¨® bailando en pareja de forma profesional, se produjo tambi¨¦n en la vida real, pero dice que, cuando le vio, pens¨® en ¨¦l como el actor, el bailar¨ªn y el core¨®grafo de su pel¨ªcula. "El gui¨®n requer¨ªa contar esa relaci¨®n con simplicidad y brillantez al mismo tiempo, y eso no se da a menudo en la vida real. Las pel¨ªculas deben ser una destilaci¨®n de la vida. Si hubiera querido contar todos los peque?os detalles cotidianos, las crisis y las angustias, la pel¨ªcula durar¨ªa dos a?os; as¨ª que tuve que renunciar a incluir cosas, algunas incluso m¨¢s dram¨¢ticas que las que aparecen. Aunque la verdad es que mi vida se parece bastante a la que se ve en el filme: bailar, vivir, re¨ªr, sufrir, tener crisis de creaci¨®n...".

?xito en Argentina

Potter no ha visto todav¨ªa ("lo estoy deseando") Tango, la aproximaci¨®n de Carlos Saura al mundo interior de un baile del que Borges escribi¨®: "Esa r¨¢faga, el tango, esa diablura, los atareados a?os desaf¨ªa...". Pero la directora inglesa duerme con la tranquilidad de que su pel¨ªcula, estrenada en Venecia hace dos a?os, ha sido todo un ¨¦xito en Argentina. "Ten¨ªa mucho miedo a la reacci¨®n del p¨²blico all¨ª, pero la acogida fue estupenda. A veces, las cosas muy propias, las expresiones art¨ªsticas muy locales, necesitan que alguien de fuera las aprecie y redescubra". "Pero los argentinos saben mucho de tango", contin¨²a. "Y mis amigos de Buenos Aires sab¨ªan que yo me hab¨ªa rendido al tango, que no me hab¨ªa acercado a su misterio pretendiendo ser argentina, sino como una simple bailarina inglesa que se quer¨ªa dejar atrapar por esa m¨²sica. Todo el baile es universal, pero, para conocer cada baile de verdad, hay que dejarse seducir por ellos". Potter tom¨® lecciones con los grandes maestros de Buenos Aires, fue a los clubes... "Hice amigos en muchos de ellos, me met¨ª en esa cultura local desde el amor, la curiosidad y el respeto. Me parece que no hay otra f¨®rmula para acercarse que no sea ¨¦sa".