AN?LISIS DE LA "CUOTA DE PANTALLA" DE LOS POL?TICOS Los informativos de Canal 9 y la libertad de expresi¨®n JOS? GIN?S

l periodismo actual, sujeto a la globalizaci¨®n del inter¨¦s informativo, compone un universo complejo en el que los criterios de selecci¨®n, en otro tiempo tangenciales -no hab¨ªa tanto donde escoger-, se presentan, cada vez, como m¨¢s trascendentales. Por otra parte, en un medio audiovisual las noticias envejecen a tal velocidad que el inter¨¦s informativo que las cruza se deja ver con m¨¢s exactitud en las constantes que traducen un periodo de continuidad, que en el tratamiento espec¨ªfico que se aplica a cada una de ellas. Y por ¨²ltimo, como la tecnolog¨ªa audiovisual, al contrario que el papel, no se puede retener -en todo caso, reproducir-, escogido el canal, el seguimiento continuado del mismo sobre un tema y un periodo acotado permite analizar, con m¨¢s rigor, los intereses territoriales que son predominantes. El seguimiento se ha centrado en el periodo comprendido entre el 17 y 25 de junio. Y se han escogido los informativos Not¨ªcies 9 en sus ediciones y el informativo Metropolit¨¤, de car¨¢cter m¨¢s local, que se emite por el segundo canal (Not¨ªcies 9). En total, se ha secuenciado el conjunto informativo de 25 programas y se han contabilizado 416 noticias. En cuanto a la medici¨®n de tiempos -no siempre criterio determinante, como se cree, por la estrecha relaci¨®n que vincula la duraci¨®n de una noticia a su impacto social- se ha limitado principalmente a los cortes de intervenci¨®n de pol¨ªticos con alto cargo institucional y de pol¨ªticos que, en condiciones de oposici¨®n, no se benefician de la natural repercusi¨®n informativa del poder ejecutivo. Con esta medici¨®n no se ha querido establecer la l¨®gica supremac¨ªa de los que gobiernan con los que tan solo legislan, sino que, tomando como punto de mira las primarias socialistas -una actividad pol¨ªtica que protagoniza la oposici¨®n y cuya repercusi¨®n social, la elecci¨®n de unos l¨ªderes, incorpora un valor a?adido a los criterios period¨ªsticos de selecci¨®n informativa-, comparar la relaci¨®n de unos y de otros, no ya en sus picos sino en sus proporciones. As¨ª, entre los trece pol¨ªticos seleccionados -que han ocupado tiempo en pantalla- no sorprende que la mayor¨ªa pertenezca al PP y al UV -por este orden-, ni que el presidente de la Generalitat, en raz¨®n o no de su cargo institucional, represente ¨¦l s¨®lo el 43,9%, sino que los representantes de la oposici¨®n y del PSPV en particular, cuyos l¨ªderes pol¨ªticos, embarcados en las primarias, despliegan, en el periodo estudiado, un evidente abanico de actividades sociales, ocupen, por su tiempo en pantalla 2,3%. Por ello, m¨¢s que los tiempos, se presenta como un material mucho m¨¢s significativo el gui¨®n que traduce la composici¨®n (la edici¨®n) de cada programa. Y aunque el trabajo debe ser extensivo, basta centrarse s¨®lo en la composici¨®n de los sumarios que, en tanto que selecci¨®n ¨²ltima, conducen hacia s¨ª al resto de las noticias que componen los informativos. En l¨ªneas generales, las noticias surgidas de los juzgados y de la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico -sucesos y accidentes- dominan la informaci¨®n. Le siguen las condicionadas por las fiestas populares que, como las de San Juan en Alicante -coincidente con el periodo estudiado-, revierten al espectador no tanto como informaci¨®n sino como espejo de identidad. Y queda sobradamente cubierto el bloque de noticias institucionales. As¨ª, de las 118 noticias que componen al conjunto de los sumarios, 29 corresponden al ¨¢rea de los sucesos; 20, a la de fiestas populares; 17, a las noticias de car¨¢cter institucional; igual n¨²mero para las referentes a la pol¨ªtica; 15, a los deportes; la misma cantidad, a la habitual secci¨®n de sociedad; 3, al mundo de la cultura; y, por ¨²ltimo, 2, a las t¨ªpicas noticias del magazine y que son siempre de dif¨ªcil adscripci¨®n. De estos datos, cabe destacar el car¨¢cter abiertamente amarillista y sensacionalista que domina mayoritariamente a la l¨ªnea editorial. El n¨²mero relacionado con las fiestas populares -siendo que en el periodo estudiado conclu¨ªa la fiesta patronal alicantina- puede considerarse como normal -tal vez con un tratamiento excesivo, puesto que ha consumido m¨¢s de la tercera parte del tiempo de los informativos, sobre todo a partir del viernes 19 de junio en que las fiestas se inauguraban oficialmente-. En el mismo sentido hay que enmarcar las 15 noticias destinadas a deportes con el mundial de f¨²tbol de por medio. E igualmente normal hay que considerar las noticias de car¨¢cter institucional, puesto que la televisi¨®n auton¨®mica tiene como prioridad l¨®gica informar a la ciudadan¨ªa de los recursos p¨²blicos destinados al bienestar social en todas sus facetas. Los n¨²meros comienzan a revelarse como contradictorios en el bloque de noticias referentes a los acontecimientos pol¨ªticos. En principio, su cantidad es escasa, puesto que incluye a la pol¨ªtica auton¨®mica, a la nacional y a la internacional. Pero lo que sobresale, por su ausencia, una vez comprobado el contenido de esas 17 noticias, es el hecho de que ninguna de ellas haga referencia a las primarias de los socialistas valencianos, siendo que, como ocurre con el mundial de f¨²tbol y las hogueras de Alicante, las primarias conllevan, por su repercusi¨®n social (no se olvide que se trata de la actividad pol¨ªtica m¨¢s importante del primer partido de la oposici¨®n) un evidente valor a?adido como criterio de selecci¨®n period¨ªstica que se debe a la actualidad. No es exagerado decir que el hecho de que el tema de las primarias socialistas no aparezca en ninguno de los sumarios (los titulares que comandan al resto de la informaci¨®n) representa un trato discriminatorio que s¨®lo puede entenderse desde una aplicaci¨®n censora que monopoliza s¨®lo para el poder gobernante una responsabilidad institucional que tambi¨¦n debe atender -para no alinearse con el sectarismo- a las informaciones que generan las actividades pol¨ªticas de otros grupos parlamentarios de las Cortes. Por otra parte, la negaci¨®n informativa se hace m¨¢s evidente cuando entre las noticias pol¨ªticas seleccionadas para el sumario -enti¨¦ndase bien, para el sumario, no para el informativo en su conjunto- se escoge una en la que el Presidente Zaplana (domingo 21 de junio) recibe en Granada un galard¨®n por su apoyo a la econom¨ªa tur¨ªstica otorgado por una revista corporativa del PP, un acto exclusivo de su partido, de reconocimiento personal, pero de indudable menor trascendencia social y period¨ªstica que las primarias del PSPV. Se constata, adem¨¢s, en el desarrollo posterior de esta misma informaci¨®n, que Eduardo Zaplana dispone de dos cortes de 25 y 35 segundos para una noticia que alcanza una duraci¨®n total de 1 minuto y 50 segundos. Si se tiene en cuenta que el tiempo total otorgado al acontecimiento de las primarias, en todo el periodo estudiado, es de 2 minutos y 15 segundos (sobre un c¨®mputo global de 21 horas), la sola diferencia de 25 segundos entre un hecho estrictamente puntual -el premio del PP- y otro generativo -un proceso electoral en continuidad- evidencia todav¨ªa m¨¢s dicho car¨¢cter discriminatorio. Vemos, por una parte, que el sensacionalismo (cr¨ªmenes, accidentes y cat¨¢strofes) representa el criterio period¨ªstico predominante: all¨¢ d¨®nde se desplazan siempre las unidades m¨®viles, all¨¢ d¨®nde el c¨¢mara, vulnerando la intimidad personal -la c¨¢mara fotogr¨¢fica no es igual a la c¨¢mara televisiva, en una domina siempre la presencia pl¨¢stica, en la otra, la proyecci¨®n morbosa- saca el rostro y el cuerpo ensangrentado de un camionero tambaleante (accidentes en Barracas, mi¨¦rcoles, 24 de junio, Noticies 9 de las 14 horas) o donde la coincidente muerte de dos labradores en dos plantaciones de tomates (mi¨¦rcoles 17 de junio) se magn¨ªfica como noticia para reciclarla repetidamente en otras ediciones, sin a?adir informaci¨®n relevante alguna y zahiriendo, con su insistencia, a la familia de las v¨ªctimas (hasta el metalenguaje se cuela -mirarse el ombligo- cuando se hace del sensacionalismo bandera de la informaci¨®n; y es as¨ª como un ufano presentador -Llu¨ªs Motes, director de la segunda edici¨®n del Not¨ªcies 9- se siente orgulloso de rese?ar que la todopoderosa cadena norteamericana, CNN, ha abierto sus informativos de la ma?ana con el secuestro del avi¨®n en Manises -martes, 23 de junio-. Bien est¨¢, pero aquel d¨ªa, en plena fiesta alicantina y haciendo del h¨¦roe de la jornada al secuestrador del avi¨®n, el n¨²mero de noticias en Canal 9 se redujo a tan s¨®lo 26 y declaraciones como las de Felipe Gonz¨¢lez en el caso del juicio que se sigue en torno al secuestro de Segundo Marey -portada de primera al d¨ªa siguiente en toda la prensa-, se concentraron en cortos titulares que apenas ocuparon dos minutos en el conjunto de los tres informativos del d¨ªa). Se puede afirmar que la libertad de expresi¨®n, despu¨¦s del trato dado a las primarias socialistas, no queda muy bien amparada en la televisi¨®n p¨²blica valenciana. Ser¨ªa absurdo pensar que la informaci¨®n carece de filtros, pero esta peligrosa presencia de la tijera en un medio p¨²blico representa a medio plazo un bumer¨¢n para el poder -es tan descarada que no se puede ocultar-, pero tambi¨¦n un foco constante de tensi¨®n con la oposici¨®n que ir¨¢ a m¨¢s seg¨²n se vayan acercando -por otra parte, ya pr¨®ximas- las elecciones locales y auton¨®micas. La Constituci¨®n garantiza la libertad de expresi¨®n, pero ¨¦sta, a las puertas ya del siglo XXI, con la red de canales y sat¨¦lites que interconectan al planeta, s¨®lo surge a trav¨¦s de la pluralidad. Todo esto no es nuevo, reconocer abiertamente que el periodismo no puede ser objetivo o sin¨®nimo de verdad absoluta. Lo nuevo es la extensi¨®n de esta percepci¨®n, no ya a los iniciados, sino al conjunto de muchos ciudadanos que advierten, por efecto de la pluralidad misma, los distintos enfoques con los que los diferentes medios escogen y seleccionan un mismo hecho noticiable. La deontolog¨ªa period¨ªstica radica hoy en el contraste de la informaci¨®n y en el equilibrio de la selecci¨®n, pero sobre todo en un ejercicio de humildad que no abuse del poder que confiere la edici¨®n (o eliminaci¨®n) de las noticias, sabedores de que ¨¦stas, impresas o emitidas, seleccionadas (o anuladas), adquieren as¨ª el carnet de identidad para su reconocimiento social.