El PA estudia las razones de la falta de respaldo de los granadinos

El Partido Andalucista ha decidido encargar un estudio que analice cu¨¢les son las causas de que en las ¨²ltimas tres elecciones municipales la formaci¨®n no haya conseguido ni un s¨®lo concejal en el Ayuntamiento de Granada, seg¨²n anunci¨® ayer el secretario general del partido, Antonio Ortega. "Queremos saber las razones de este desencuentro tan largo", dijo, "porque el PA necesita de Granada y Granada necesita del PA". La formaci¨®n pol¨ªtica que lidera Ortega fue la m¨¢s votada entre los partidos progresistas en las primeras elecciones municipales, en 1979. El entonces PSA obtuvo seis concejales en la corporaci¨®n municipal. Desde aquella ocasi¨®n, jam¨¢s ha vuelto a haber uno en el Ayuntamiento granadino. En ese mismo a?o se produjo una gran escisi¨®n en el partido y el abandono masivo de militantes del PSA, liderado en aquella ¨¦poca por Alejandro Rojas-Marcos. Para las primeras elecciones municipales, los partidos de izquierda hab¨ªan llegado a un pacto que establec¨ªa que la formaci¨®n que fuese m¨¢s votaba obtendr¨ªa el apoyo de los progresistas. En Granada el PSA fue esa fuerza. Sin embargo, el inter¨¦s por gobernar en el Ayuntamiento de Sevilla provoc¨® un canje de alcald¨ªas, por el que el PSOE se hizo con la de Granada y el PSA con la de Sevilla. Los militantes abandonaron en masa el partido. "Si en algo nos hemos equivocado, creo que ha llegado ya la hora de la reconciliaci¨®n", dijo Antonio Ortega. "Hemos encargado un estudio sobre las causas que han hecho que Granada no vote al PA. El desencuentro dura ya demasiado". Ortega, que no quiso revelar qu¨¦ empresa ser¨¢ la encargada de realizar el an¨¢lisis, y de la que s¨®lo dijo que es "privada, de solvencia y reconocido prestigio", anunci¨® que, a partir de ahora, Granada ser¨¢ un objetivo preferente para el partido. Por otro lado, el secretario general de los andalucistas reclam¨® que las obras que deban realizarse para la reparaci¨®n de tramos en la autov¨ªa A-92 sean adjudicadas a empresas de la comunidad, y no a otras que tienen su raz¨®n social en otras autonom¨ªas.