Georges Lavaudant afirma que la vitalidad esc¨¦nica en Barcelona sorprende en el extranjero
Georges Lavaudant, actual director del Th¨¦?tre Od¨¦on-Th¨¦?tre de l"Europe de Par¨ªs, ha estado en Barcelona para apoyar y acompa?ar a Dom¨¨nec Reixach en su relevo de Josep Maria Flotats al frente del Teatre Nacional de Catalunya (TNC) y en la presentaci¨®n de su primera temporada, en la que el director teatral franc¨¦s estrenar¨¢, con actores catalanes, Els gegants de la muntanya, de Pirandello. Georges Lavaudant manifest¨® en una entrevista con este diario la "extra?eza que produce fuera de Espa?a la vitalidad esc¨¦nica de Barcelona".
Lavaudant se muestra cauto a la hora de hablar del teatro catal¨¢n y se?ala que conoce poco la situaci¨®n como para poder opinar sobre ella. Pero s¨ª manifiesta, en cambio, la extra?eza que produce desde el exterior la inesperada vitalidad esc¨¦nica de Barcelona. Una vitalidad que no se explica y que ¨¦l trata de entender en la historia reciente de Catalu?a, en el fin de la dictadura, la recuperaci¨®n de la lengua, el empuje del teatro independiente, con el que Lavaudant, de 50 a?os y fundador en 1968 del Th¨¦?tre Partisan, tiene afinidades generacionales. Lavaudant, a quien Reixach ofreci¨® la posibilidad de llevar a escena diversos textos (entre ellos, Cuento de invierno, de Shakespeare), dirigir¨¢ en el TNC un antiguo proyecto largamente acariciado. Su montaje, de 1981, de Los gigantes de la monta?a, est¨¢ considerado entre los mejores de la historia del teatro franc¨¦s. "Yo siempre he dicho que querr¨ªa volver a montar la pieza de Pirandello, pero que no pod¨ªa hacerlo en Francia, donde no ten¨ªa sentido, porque all¨ª ya hab¨ªa hecho un montaje logrado. Inevitablemente he de partir de aquella puesta en escena, pero ser¨¢ diferente", afirma Lavaudant. Sobre la obra, el director a?ade: "Siempre me han gustado las ¨²ltimas piezas de los autores, como La tempestad, de Shakespeare. Adem¨¢s, Pirandello nunca acaba Los gigantes de la monta?a, y ah¨ª est¨¢ concentrada toda la sabidur¨ªa del autor, es la suma del sistema pirandelliano. Dentro de su concepci¨®n del teatro, el hecho de que nunca la terminara me parece simb¨®lico. En Seis personajes en busca de autor lo casual est¨¢ perfectamente fijado por escrito. En cambio, que esta pieza sea inacabada significa que realmente no acaba nunca; Pirandello tard¨® 10 a?os en no acabarla. Es una obra abierta con la que se pueden decir muchas cosas. Nunca se podr¨¢ saber qui¨¦nes son los gigantes de la monta?a. Cada ¨¦poca debe decidir qui¨¦nes son". En la aventura teatral lo acompa?an, entre otros, Francesc Albiol, Imma Colomer, Leonor de Castro, Pau Dur¨¤, Ll¨¤tzer Escarceller, Marisa Gerardi, Olvido Lanza, Carles Mart¨ªnez, Francesc Orella, Doctor Soler, ?ngels Poch y Emma Vilarasau. "Individualmente, a los actores les he pedido que acepten estar perdidos y, al mismo tiempo, trabajar en conjunto. Esta contradicci¨®n es la que me interesa. Antes de empezar los ensayos, todav¨ªa no s¨¦ nada". Seg¨²n Lavaudant, en Catalu?a hay "excelentes actores, pero trabajan demasiado. Tienen todos demasiados compromisos, especialmente con la televisi¨®n. Es necesario que se concentren m¨¢s en su trabajo", puntualiza. A juicio del director de teatral franc¨¦s, el TNC es "un teatro monumental, magn¨ªfico, un poco exagerado. La sala grande inquieta por la dificultad de establecer una relaci¨®n fluida entre el escenario y el p¨²blico. El Od¨¦on, por ejemplo, tiene una medida m¨¢s humana", asegura. Reixach ha planteado una relaci¨®n continuada con el Th¨¦?tre Od¨¦on. "De momento hay proyectos" se?ala Lavaudant, "como ¨¦ste sobre Pirandello, que luego ir¨¢ a Par¨ªs en catal¨¢n, o, en la temporada siguiente, presentar aqu¨ª el montaje que casi con certeza inaugurar¨¢ el Festival de Avi?¨®n. Prefiero ir plante¨¢ndolo temporada a temporada". Lavaudant cree que Francia es probablemente el pa¨ªs que m¨¢s ha acogido el teatro europeo y de una forma m¨¢s estructurada. "El riesgo que le veo", dice, "es que acabemos fabricando espect¨¢culos europeos en vez de crear espect¨¢culos de artistas. Puede acabar siendo un teatro sin contradicciones. Personalmente no creo en un arte europeo".
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