Boltanski vincula los objetos viejos con los recuerdos, en una instalaci¨®n en Valencia
El artista franc¨¦s pide muebles en desuso a los ciudadanos para su viaje por la memoria
Christian Boltanski se pase¨® en febrero por el centro de Valencia con la intenci¨®n de aproximarse a su pasado e impregnarse de su memoria. A partir de esta idea empez¨® a trabajar en la exposici¨®n que le hab¨ªa encomendado el Consorci de Museus de la Comunitat Valenciana para el edificio de l'Almod¨ª, un antiguo almac¨¦n de grano del siglo XV rehabilitado. El artista franc¨¦s pidi¨® a los ciudadanos muebles y juguetes, al tiempo que grab¨® los recuerdos asociados a estos objetos viejos. As¨ª surgi¨® la instalaci¨®n sonora Compra-venta que ayer se inaugur¨® en Valencia.
A simple vista el aspecto que presenta la sala municial de l"Almod¨ª bien podr¨ªa parecer un almac¨¦n de muebles viejos. Bajo la penunbra, se insin¨²an armarios, mesas, sillas, flexos encendidos, somieres, juguetes, percheros, taburetes y as¨ª hasta casi 200 objetos depositados por medio centenar de personas que respondieron al anuncio de Boltanski publicado en medios de comunicaci¨®n. De la instalaci¨®n, cuyo comisario es el profesor de Arte Jos¨¦ Miguel G. Cort¨¦s, surgen m¨²ltiples voces an¨®nimas que se entrecruzan y explican recuerdos vinculados a los objetos viejos."Los muebles han perdido su funci¨®n y est¨¢n a la espera de que se les d¨¦ una historia", explic¨® ayer el artista nacido en Par¨ªs en 1944. "Son una serie de fantasmas que resucitan del pasado en una especie de paseo por un cementerio", puntualiz¨® Boltanski, quien ha realizado montajes para lugares espec¨ªficos en Venecia, Nueva York, Z¨²rich o Londres, entre otras ciudades.
En 1995 el Centro Galego de Arte Contempor¨¢nea le dedic¨® una retrospectiva, pero Boltanski se refiri¨® ayer a su exposici¨®n en el Reina Sof¨ªa de 1988, en la que trabaj¨® con fotograf¨ªas del peri¨®dico El caso. "Me interesan las peque?as historias de los individuos que no son c¨¦lebres", coment¨® respecto a la materia com¨²n que nutre sus trabajos, siempre vinculados a la memoria mediante la carga simb¨®lica de los objetos. La obsesi¨®n por la muerte tambi¨¦n es uno de sus temas recurrentes.
En el caso de la exposici¨®n Compra-venta se trata de un "proyecto sobre la memoria colectiva e individual de la ciudad", se?al¨® el artista. Fot¨®grafo y tambi¨¦n cineasta, Boltanski subray¨® que los objetos expuestos no tendr¨ªan ning¨²n valor en un Rastro si no tuviesen una historia, como tampoco lo tendr¨ªa la pipa de fumar que extrajo de su chaqueta y que le sirvi¨® para ilustrar sus palabras.
El equipo del comisario de la exposici¨®n se encarg¨® de recoger los testimonios de la gente, reproducidos por decenas de altavoces diseminados en la sala, y de reunir los objetos. Cort¨¦s destac¨® la "participaci¨®n de la ciudadan¨ªa" en el proyecto y calific¨® a Boltanski como uno de los artistas m¨¢s innovadores del arte contempor¨¢neo.
L'Almod¨ª est¨¢ en el centro de Valencia, y tanto su ubicaci¨®n como su antigua funci¨®n de almac¨¦n han sido determinantes en la exposici¨®n de Boltanski, que concluir¨¢ el 8 de septiembre. En esta misma sala, Yoko Ono realiz¨® hace meses una instalaci¨®n ex profeso por encargo tambi¨¦n del Consorcio de Museos que dirige Consuelo Ciscar.
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