Una puesta en escena frustrada

La puesta en escena del caso Argentia bis sufri¨® el pasado lunes 13 de julio, en el juzgado de instrucci¨®n n¨²mero 16 de Madrid, un cambio inesperado. Todo estaba previsto para adoptar, por parte del juez Jos¨¦ Emilio Coronado, una medida cautelar, a petici¨®n de la defensa de Mario Conde, contra Antonio Naval¨®n. Sin embargo, la oposici¨®n frontal del fiscal, Antonio Romeral, a cualquier medida produjo modificaciones en el escenario (ver EL PA?S, martes 14 de julio), frustrando la adopci¨®n de la prisi¨®n incondicional o la prisi¨®n con fianza.Mario Conde, a trav¨¦s de su esposa, acus¨® a sus ex asesores Naval¨®n y Diego Selva de falso testimonio y otros delitos (cohecho, prevaricaci¨®n y tr¨¢fico de influencias). M¨¢s tarde, Conde sustituy¨® a su esposa y se person¨® en dicha causa abierta por el juez Coronado hace un a?o. El juez no dio traslado de la denuncia a los denunciados porque, seg¨²n explic¨®, esperaba ver el resultado de una comisi¨®n rogatoria enviada a Zurich ( Suiza). Dicha comisi¨®n pretende conocer el nombre de los beneficiarios del pago de 600 millones de pesetas, operaci¨®n que orden¨® Conde en 1990, y que le ha costado una condena de 4 a?os y 2 meses.

El fiscal le solicit¨® tomar declaraci¨®n a Antonio Naval¨®n. El juez deneg¨®, a primeros de junio, esa petici¨®n. Hay que esperar la comisi¨®n rogatoria, dijo. Esta actitud del juez cambi¨® a primeros de julio pasado. El 2 de julio pasado declar¨® Conde. El 3 de julio, su abogado Juan Carlos Lara pidi¨® la declaraci¨®n de Naval¨®n, y el 7, el juez la concedi¨®, sin referirse en su providencia a su posici¨®n de que primero, antes de citar a Naval¨®n, deb¨ªa llegar a Espa?a la comisi¨®n rogatoria, que a¨²n se tramita.

El pasado lunes 13, tras las preguntas del juez y del fiscal lleg¨® el turno del defensor de Conde. Lara, antes de interrogar, dijo que "como cuesti¨®n previa" solicitaba la realizaci¨®n de la vista para la propuesta de prisi¨®n provisional de Naval¨®n. A petici¨®n de una de las partes, el juez debe convocar la llamada vistilla con presencia de todas las partes.

Luego, el abogado present¨® una a una sus preguntas. Hacia las 14.00 horas, hubo un receso. El juez consider¨® que quiz¨¢ la medida de prisi¨®n provisional incondicional era demasiado, ya que no hab¨ªa novedades. La comisi¨®n rogatoria sigue tramit¨¢ndose. Sin embargo, Coronado vio adecuada la fijaci¨®n de una fianza. Esto es, un auto de prisi¨®n provisional eludible mediante el pago de una fianza.

Tras el receso, continu¨® la declaraci¨®n de Naval¨®n. Al finalizar, el juez inici¨® la vistilla. El abogado de Conde pidi¨® la prisi¨®n o, en su defecto, la prisi¨®n eludible mediante fianza de 100 millones. El fiscal, que ya intu¨ªa la inclinaci¨®n del juez por esta segunda f¨®rmula, se opuso frontalmente. Ante la situaci¨®n, el juez dio un paso atr¨¢s. En todo caso, dijo, hay que esperar la comisi¨®n rogatoria. Pero para este viaje no se necesitaba tantas alforjas.

Conde quer¨ªa un golpe de efecto. Pero no lo logr¨®.

Con todo, habr¨¢ m¨¢s ensayos, careos y declaraciones.