La escotilla de la colmena

Al final de la franja acantilada que separa Almer¨ªa de Aguadulce y que a su vez constri?e a la capital en su avance hacia el poniente, emerge el puerto deportivo de esta pedan¨ªa de Roquetas de Mar como la mejor carta de presentaci¨®n de un pueblo tan veraniego como masificado. Torres de edificios hiperrentabilizados, hileras infinitas de d¨²plex, tr¨ªplex o apartamentos escalonados a primera l¨ªnea de playa sirven de tel¨®n de fondo de un puerto que, incluso antes de estar terminado, en 1990, ya era punto de atraque de embarcaciones deportivas. Sus siete hect¨¢reas de agua en calma y casi otras ocho m¨¢s de servicios en tierra forman parte de todo un complejo a disposici¨®n de veraneantes ¨¢vidos de sol y comodidades. La amplitud y holgura de sus instalaciones, en claro contraste con la abigarrada urbanizaci¨®n del pueblo, ofrecen en su contradique de 230 metros una retah¨ªla de pubs y cafeter¨ªas presididas por la torre de control, que focalizan el ambiente nocturno del puerto. Orientada a poniente, la bocana permite el paso de embarcaciones de hasta 25 metros de eslora que disponen en cada pantal¨¢n de agua y electricidad; adem¨¢s hay servicio de tel¨¦fono y televisi¨®n para los veleros de grandes dimensiones. Casi la totalidad de los 764 puntos de atraque de los que dispone se encuentran en uso por estas fechas. La clientela se reparte entre un 80% de paisanos y un 20% de turistas europeos que no dudan en dejar su embarcaci¨®n en el amarradero durante todo el a?o. El servicio de carenaje, reparaci¨®n y almacenamiento de barcos, adem¨¢s de un elevador con capacidad para 50 toneladas y carretilla para manipulaci¨®n de barcos de hasta 10.000 kilos explican que durante el invierno el ¨¢rea de marina seca est¨¦ siempre al m¨¢ximo de su capacidad. Los salones sociales, la bodeguilla, el gimnasio, las pistas de squash y la escuela de vela ofrecidos por el club n¨¢utico dentro del mismo recinto hacen las delicias del batiburrillo de gustos resultante de la amalgama de turistas que cada a?o acuden, sin falta, a su cita marina en Aguadulce. La entrada directa desde carretera nacional, en pleno acantilado, otorga al embarcadero un f¨¢cil acceso a la vez que lo orienta a la ciudad de Almer¨ªa, desde la que cada verano miles de ciudadanos se desplazan para vivir durante dos meses a tan s¨®lo diez minutos de sus residencias en la ciudad.

Datos de inter¨¦s

Direcci¨®n Ctra. N. 340 Km. 103 s/n. Aguadulce, Roquetas de Mar (Almer¨ªa) Situaci¨®n 36? 49" 6"" N 2? 33" 10"" W Atraques 764 Tel¨¦fono 950 34 15 02