Pepe y Pepa

DE PASADAHay estampas vacacionales para todos los gustos. Quien se va a Sarajevo (Ezequiel Mart¨ªnez, director del programa de Canal Sur televisi¨®n Tierra y Mar); quien no se mueve de Coria. En vacaciones se hacen cosas distintas. Benito Peinado, anta?o l¨ªder del grupo Dulce Venganza -promotor de la movida sevillana con temas como Quiero matar a una chica o Un hipop¨®tamo en mi ba?era- se ha hecho solista pero ahora tiene complicado componer nuevos temas: se ha roto un brazo mientras usaba la fregona para echarle una mano a su madre. Los veranos de Mar¨ªa de los ?ngeles Infante siempre tienen un poso de tristeza, como quien pierde a un ser querido en Navidades. Sucedi¨® en verano y todos los veranos se recuerda. La hija del notario de Casares se durmi¨® viendo en la tele Guerra y paz. Luis Rull, ex decano de F¨ªsicas, est¨¢ como dios en los Ca?os de la Meca. Termin¨® de leer La Cartuja de Parma de Sthendal oyendo un Concierto de viol¨ªn de Vivaldi. Cultura comunitaria, s¨ª se?or. Sthendal bautiz¨® la m¨¢s hermosa y tonta de las enfermedades, el s¨ªndrome que lleva su nombre y que afecta a los que mueren por culpa de la belleza, esa bestia. La estampa del verano es una foto que ya viaja en un sobre a su destino. En ella se ve a Jos¨¦ Manuel Caballero Bonald sentado junto a la piscina de su casa de Montijo, entre Sanl¨²car de Barrameda y Chipiona. A partir de una frase de Ernesto S¨¢bato, dice el escritor jerezano que "la felicidad no es una buena compa?era para la creaci¨®n literaria, pero yo no podr¨ªa escribir si fuera infeliz del todo". La piscina es como un poema de piedra y agua que Caballero Bonald le dedic¨® a Pepa, su mujer. Mar¨ªa Josefa Ramis Cabot, mallorquina, con la que se cas¨® en 1960, en el coraz¨®n del segundo volumen de unas memorias que son como una despedida de soltero. La conoci¨® en tierras baleares mientras era secretario de la revista Papeles de Son Armandans que dirig¨ªa Cela. C¨®ctel explosivo. Iria Flavia y Bajo Gu¨ªa. El problema es que la piscina de Pepe -sus amigos le llaman as¨ª al ¨²nico espa?ol que no es acad¨¦mico porque no quiere- se le queda muy peque?a a Pepa. Un charquito. Ella prefiere la playa, que en ese promontorio todav¨ªa es salvaje e inmaculada. Pepa es la culpable de que Pepe no sea "infeliz del todo". Y fue campeona de Mallorca de 100 metros espalda. Se?ora de Caballero.