Los negocios de un alcalde bajo sospecha

El alcalde de Benalm¨¢dena, el independiente Enrique Bol¨ªn, vuelve a estar bajo sospecha. Nueve a?os despu¨¦s de su detenci¨®n en Gibraltar con 28 gramos de coca¨ªna y varios v¨ªdeos pornogr¨¢ficos, que le cost¨® una condena de cuatro meses de c¨¢rcel, su esca?o de senador y la expulsi¨®n del Partido Popular (PP), sus ex correligionarios han presentado a la fiscal¨ªa anticorrupci¨®n un "informe-denuncia" sobre supuestas irregularidades que podr¨ªan ser motivo de delito. La principal sospecha para el Grupo Popular de Benalm¨¢dena es la de c¨®mo Bol¨ªn ha conseguido saldar en tres a?os de alcalde, con su sueldo embargado, una deuda de 1.347 millones de pesetas. Recurren para ello a datos del Registro de Aceptaciones Impagadas (RAI), en el que figuraban reclamaciones de distintos proveedores por esta cantidad en mayo de 1995, en v¨ªsperas de ser de nuevo elegido alcalde de Benalm¨¢dena. El PP ha acompa?ado en su denuncia una copia de este listado y otra actual en la que ya no figura ninguna deuda. Pero los datos no est¨¢n nada claros. Bol¨ªn asegura que en mayo de 1995 ya no ten¨ªa ninguna deuda porque hab¨ªa perdido todo su patrimonio, la mayor¨ªa en ejecuciones de p¨®lizas y pr¨¦stamos hipotecarios y embargos. Uno de sus m¨¢ximos colaboradores, M.M., recuerda que la misma tarde en la que Bol¨ªn fue detenido en Gibraltar, el 28 de agosto de 1989, representantes de distintas entidades bancarias se presentaron en las oficinas del entonces senador para ejecutar estos pr¨¦stamos. Bol¨ªn era hasta entonces un prestigioso empresario de la Costa del Sol con un patrimonio estimado de unos 5.000 millones de pesetas. Hab¨ªa sido alcalde de Benalm¨¢dena desde 1966 y gan¨® las primeras elecciones municipales democr¨¢ticas en 1979, en las que encabez¨® un grupo independiente. En 1985, ingres¨® en Alianza Popular y en las municipales de 1987 perdi¨® la alcald¨ªa pero pact¨® con el independiente Ram¨®n Rico repartirse el cargo, que cada uno ocupar¨ªa dos a?os. Su detenci¨®n en Gibraltar lo impidi¨® y trunc¨® su carrera pol¨ªtica.

Promotor inmobiliario

Bol¨ªn fue uno de los principales impulsores del desarrollo de Benalm¨¢dena, con la promotora Obra Andaluc¨ªa construy¨® los complejos de apartamentos Diorama y Carola, fue propietario de varios locales de Puerto Marina -uno de sus principales proyecto como alcalde-, de una lavander¨ªa industrial y de la galer¨ªa comercial Etesio, entre otros. Pero todas ten¨ªan cargas. ?nicamente el hotel La Roca, construido por su padre, estaba libre y fue vendido en 1990 para hacer frente a la carrera de pagos. El episodio de Gibraltar supuso el comienzo de la ruina de Bol¨ªn, que perdi¨® todas sus propiedades, incluida su vivienda particular, aunque su actual due?o, que se la adjudic¨® en subasta p¨²blica, le tiene concedido un usufructo. Bol¨ªn y sus colaboradores sostienen que los datos del RAI esgrimidos por el PP son "falsos", y ponen en entredicho la fiabilidad de la fuente, puesto que aseveran que los datos de este registro "s¨®lo son borrados a petici¨®n de parte". Bol¨ªn lo tiene claro: "Lo perd¨ª todo. Que me investiguen y as¨ª se podr¨¢ aclarar que todo es una calumnia". El alcalde incluso asevera que las deudas a las que tuvo que hacer frente eran muy superiores, hasta 3.000 millones de pesetas, y que todas quedaron saldadas en embargos "mucho antes de 1995". Aquel a?o, Bol¨ªn decidi¨® volver a la pol¨ªtica y mont¨® la candidatura del Grupo Independiente de Benalm¨¢dena (GIB), apoyada por varios empresarios de la localidad. Consigui¨® ocho de los 21 concejales, por seis del PP, cuatro del PSOE y tres de IU. Las dos formaciones de izquierda ofrecieron la alcald¨ªa al PP, pero ¨¦ste rechaz¨® el pacto. Durante un a?o, el PP particip¨® con Bol¨ªn en el Gobierno municipal, pero las discrepancias fueron profundas. Un incremento salarial del 30% para los concejales fue la excusa con la que en septiembre de 1997 qued¨® roto el acuerdo de Gobierno, pero cuatro concejales del PP se rebelaron contra su formaci¨®n y mantienen su colaboraci¨®n con Bol¨ªn, a costa de ser expulsados del partido.

En la denuncia del PP se apuntan presuntas irregularidades en la gesti¨®n municipal. Principalmente, el trato privilegiado a una serie de empresas de personas vinculadas a Bol¨ªn, que estar¨ªan benefici¨¢ndose de las contratas de servicios y de recalificaciones de suelo y modificaciones al Plan General de Ordenaci¨®n Urbana. El informe del PP, sin embargo, no es profuso en datos. Al rev¨¦s, apunta una serie de "arbitrariedades" y sospechas que ahora el fiscal deber¨¢ decidir si son suficientes para iniciar una investigaci¨®n. La principal trama descrita en la denuncia es la relaci¨®n entre Bol¨ªn y el empresario Sebasti¨¢n Carretero, propietario de un conocido restaurante de Puerto Marina y de la vivienda de Bol¨ªn. En la denuncia se asegura que la sociedad Cardib¨¦n, cuyo titular es Sebasti¨¢n Carretero, factur¨® el pasado a?o 1.274 millones de pesetas al puerto deportivo, regido por una sociedad municipal presidida por Bol¨ªn y de la que Carretero es miembro del consejo de administraci¨®n. Otra sociedad participada por ¨¦ste y por el secretario del Ayuntamiento, Beocal, es propietaria del veh¨ªculo de la marca Jaguar que utiliza Bol¨ªn.

"Saneando su econom¨ªa"

El PP concluye que el alcalde est¨¢ "saneando su econom¨ªa" a trav¨¦s de esta red de sociedades "amigas" que por un lado reciben un trato de favor del Ayuntamiento y por otro son soporte econ¨®mico para Bol¨ªn a trav¨¦s de "sociedades superpuestas". Respecto a las modificaciones del PGOU, la denuncia destaca la permisividad con la empresa Frifor, promotora de las viviendas de Puerto Marina, a la que se ha permitido realizar obras "con una densidad notoriamente superior a la legal". Bol¨ªn asevera que se ha autorizado una planta de aparcamientos para paliar la carencia de estos que tiene el puerto.

El escrito se completa con alusiones a tres casos, denunciados en distintos juzgados. Uno de ellos se refiere a la orden que dio Bol¨ªn para retirar distintos enseres del negocio de la esposa de un empresario que licit¨® por una concesi¨®n de hamacas en la playa y que recurri¨® judicialmente su exclusi¨®n. Un segundo caso de un propietario de un bar que asegura que el Ayuntamiento le pidi¨® dos millones de pesetas para poder obtener la licencia, y, por ¨²ltimo, la retirada de una licencia de obras a un constructor que critic¨® un proyecto municipal en la emisora Costavisi¨®n.