"Los empresarios de X¨¤tiva sufrimos presiones para entrar en Cierval"
En apenas un lustro, Mariano L¨®pez (X¨¤tiva, 1954), empresario y fundador de la patronal de la capital de La Costera, Adexa, ha conseguido dinamizar la vida empresarial de la ciudad, a trav¨¦s de numerosas actividades de promoci¨®n, y ha propiciado que el colectivo que preside se convierta en un objeto de deseo para las patronales auton¨®micas Cierval y L"Empresarial. De car¨¢cter reservado, L¨®pez pasaba desapercibido en X¨¤tiva como gestor de una empresa familiar dedicada a las artes gr¨¢ficas, pero su labor al frente de Adexa, resaltada de forma casi un¨¢nime en la ciudad, le ha transformado en un personaje de influencia y un fichaje apetecible para varios grupos pol¨ªticos de cara a las pr¨®ximas elecciones. Pese a ser un hombre de talante moderado y poco amigo de dar titulares, las presiones pol¨ªticas para integrar Adexa en la Cierval han acabado con su generosa paciencia. Pregunta. Usted ha dicho que Adexa no se integrar¨¢ ni en Cierval ni en L"Empresarial mientras no terminen los enfrentamientos. Pero me imagino que no debe ser tan sencillo. Respuesta. No descubro nada si digo que estas organizaciones llevan a?os luchando por establecer qui¨¦n tiene mayor representatividad entre los empresarios. Se trata de un tema de ellos y yo no voy a entrar. Creo que esas organizaciones no nos representan porque las sociedades comarcales deben tener mayor representatividad. Y lo que digo, si llegara el caso, lo ratificar¨ªan todos los empresarios, que no se sienten representados por estas macroorganizaciones que ni sabemos para qu¨¦ sirven ni cu¨¢les son sus fines. Te¨®ricamente, la finalidad es ayudar al empresario, pero nunca ha habido ning¨²n proyecto sobre la comarca de La Costera de ning¨²n tipo. Se han limitado [la Cierval] a colocar una oficina de informaci¨®n en X¨¤tiva pero que, en realidad, est¨¢ financiada por la Generalitat. Eso, sin tener ning¨²n contacto con las organizaciones de la comarca. Considero extra?a esta actitud. Por otra parte, estamos sufriendo una serie de presiones para que nos integremos en Cierval. Me parece mezquino que se utilice a personas ajenas a Cierval para esto y que no vengan ellos y lo propongan directamente. P. ?Puede ser m¨¢s expl¨ªcito? R. S¨ª, desde luego. El alcalde, Alfonso Rus, tuvo una reuni¨®n con el secretario general de Cierval, que estuvo aqu¨ª. No se puso en contacto con nosotros, cuando lo m¨¢s sencillo ser¨ªa explicarnos por qu¨¦ debemos integrarnos. Nos ir¨¢ mejor o peor como estamos, pero no le debemos nada a nadie. No s¨¦ qu¨¦ oscuros intereses se mueven, cuando lo m¨¢s f¨¢cil ser¨ªa acudir a nosotros con unas intenciones transparentes, que no tienen. Tambi¨¦n me consta que ha habido contactos con Generalitat para tratar de integrarnos, cuando lo m¨¢s f¨¢cil habr¨ªa sido acudir a nosotros. Hubo un contacto anterior, cuando estaba Pilar Briones de secretaria general, pero se produjo el cambio y ya no supimos absolutamente nada. No tengo nada en contra de Cierval, pero no s¨¦ lo que tendr¨¢n ellos en contra nuestra. Cuando nosotros presentamos proyectos a organismos como Forcem, ellos intentan boicotearlos. Simplemente, porque desde su punto de vista, una asociacioncita de comarcas se atreve a presentar un proyecto. P. Usted ha despertado un extra?o consenso en X¨¤tiva sobre su gesti¨®n al frente de Adexa y tiene fama de llevarse bien con todo el mundo. Quiz¨¢ deber¨ªa dedicarse a dar clases. R. Vamos a ver. En efecto, me llevo bien con todo el mundo, pero es que no soy una persona que haya utilizado Adexa para sobresalir sobre otros empresarios o como plataforma profesional o pol¨ªtica. Los empresarios nunca me han considerado el presidente, sino Mariano, uno m¨¢s. Lo ¨²nico que he hecho es cumplir el compromiso de crear Adexa y desarrollarla. De hecho, yo he presentado mi dimisi¨®n, aunque no la quieren aceptar. Al final, de todas formas, me ir¨¦, porque habr¨¦ cumplido lo que ten¨ªa que hacer y es bueno que entre savia nueva. Me apetece descansar y ayudar desde otro puesto. P. Me consta que hay partidos que querr¨ªan incluirle en sus listas. Cuando eso pasa, ?la primera reacci¨®n es echar a correr o decir que ya hablaremos? R. No voy a negar que he tenido propuestas de varios partidos. A unos les he dicho que no y otros ni siquiera me han dejado decir que no. Ahora bien, tambi¨¦n es verdad que ha habido empresarios dentro de Adexa que quieren que me presente. Y si lo que quiero es dejar la asociaci¨®n para descansar, no tiene sentido meterme en pol¨ªtica porque eso me obligar¨ªa a trabajar incluso m¨¢s. Y otra cosa: es probable que durara muy poco en cualquier partido. En los a?os que llevo en esto he observado que priman los intereses de partido sobre los de la persona. Ah¨ª chocar¨ªamos. Pero como empresarios necesitamos la colaboraci¨®n de los pol¨ªticos y hemos tenido suerte, porque hay sinton¨ªa tanto a nivel municipal como auton¨®mico. P. ?Quiere decir que tienen una buena relaci¨®n con Rus? R. S¨ª, pero el alcalde, adem¨¢s de empresario es pol¨ªtico y a veces act¨²a de una manera... Aunque ¨¦l dice que no es pol¨ªtico, se ha hecho m¨¢s pol¨ªtico y hay cosas en las que tenemos diferencias. Yo soy amigo de lavar la ropa sucia dentro de casa. Y tal vez porque no soy pol¨ªtico, no entra en mi mentalidad vender la piel del oso antes de cazarla. P. El consejero de Industria, Diego Such, dec¨ªa que todos los empresarios son amigos del PP. R. Es una aseveraci¨®n un poco aventurada. Te¨®ricamente, el PP est¨¢ con el empresario. Pero a veces, con la excusa de hacer algo por el empresariado, se nos utiliza. Es verdad que existe una mayor sinton¨ªa y protecci¨®n hacia el empresario que en legislaturas anteriores y, por eso, quiz¨¢ se atreve a lanzar una afirmaci¨®n as¨ª. Pero todos los empresarios ser¨¢n amigos del PP si se gestiona bien. Si no, no lo ser¨¢n. No es cuesti¨®n de color, sino de gesti¨®n. P. Seg¨²n una encuesta, la mitad de los empresarios no est¨¢n de acuerdo con la idea de contratar a Julio Iglesias. R. La idea inicial me parece bastante interesante. Me explico: es muy positivo contratar a Julio Iglesias porque puede proyectar fuera la Comunidad. Es una persona que est¨¢ siempre en el candelero y los medios de comunicaci¨®n, donde vaya, estar¨¢n encima de ¨¦l. Ahora bien, ?por qu¨¦ se cuestiona esto? El resultado final, ?beneficia de verdad al empresario o a la imagen pol¨ªtica de un determinado Gobierno? Creo que a partes iguales. P. ?Es ¨²til gastarse 400 millones en un velero para participar en una regata como la Copa Am¨¦rica? R. Estoy en contra del gasto desmesurado y de que se haga una inversi¨®n en promoci¨®n cuando, por ejemplo, no hay ayudas reales para el peque?o empresario. Por ejemplo, me parece correcto gastar 400 millones en una regata siempre y cuando un se?or que necesita una fresadora de medio mill¨®n de pesetas la tenga y le ayuden, y no es as¨ª. P. ?Cu¨¢ntas veces ha tenido que escuchar proposiciones indecentes de los pol¨ªticos? R. Alguna vez que otra. P. Las patronales de Alcoy y Gandia han acogido con bastante entusiasmo el proyeto de las comarcas centrales. ?C¨®mo se ve el tema desde X¨¤tiva? R. Creo que va a existir un mayor empuje al proyecto por parte de los empresarios que de los pol¨ªticos. De hecho, ya vamos por delante de ellos. Desde La Costera el tema no est¨¢ maduro. Tal vez por mi idiosincracia. Me gusta exponer las cosas cuando tienen forma y, hasta ahora, no se pod¨ªa tocar, medir ni pesar. Ya se puede hablar de algo concreto y estoy seguro de que el empresariado de la comarca va a responder, porque es muy positivo. P. El problema de un proyecto as¨ª puede ser el no herir susceptibilidades entre ciudades. R. A nadie se le escapa que vivimos en una sociedad competitiva donde compiten incluso ciudades entre s¨ª. Pero aqu¨ª hemos de cambiar el chip. Has de defender tu territorio, entre comillas, pero de una manera conjunta. Hay puntos comunes que benefician a todas las comarcas y poblaciones. El ¨¦xito o el fracaso de esto es ir todos juntos. Se ha consensuado un modelo que parece correcto y va a existir una revoluci¨®n. El proyecto de las comarcas centrales va a provocar que se cambien estatutos en las patronales de Valencia, porque se debe llegar a la conclusi¨®n de que las comarcas deben tener mayor representatividad. No queremos una confederaci¨®n paralela, pero o las patronales se ponen a nuestro nivel, o desaparecer¨¢n tal y como las conocemos. P. Hay quien cree que el futuro de X¨¤tiva como centro tur¨ªstico reside en pasear el cuadro invertido de Felipe V. R. Por favor. Eso ser¨ªa un elemento m¨¢s dentro de un proyecto tur¨ªstico, si existiera, que no es el caso. El problema es que los intentos son aislados. P. ?X¨¤tiva va bien? R. Esa pregunta ya me la han hecho. X¨¤tiva va bien, con matices. La ciudad va mejor que antes, pero no va completamente bien. Todo se puede mejorar y quedan muchos temas en el tintero. Desde mi competencia, quedan cuestiones como la mejora de los pol¨ªgonos industriales, centros de formaci¨®n de empresarios... Una serie de temas que, por lo que sea, est¨¢n en el aire y no se abordan. Quiz¨¢ existan otras prioridades. P. La oposici¨®n socialista en X¨¤tiva tiene la visi¨®n de que la futura extensi¨®n universitaria es un parche. R. En este momento, existe una guerra entre universidades. Basta que la titulaci¨®n proceda de Alicante o de Valencia para que se suscite la pol¨¦mica. Pero yo no quiero entrar en estos temas. Aqu¨ª se ha conseguido un logro, mayor o menor. Tengo claro que no es ni como se nos presenta desde el Ayuntamiento ni un parche, como cree la oposici¨®n. Simplemente, es algo de lo que carec¨ªa la comarca. P. Desde un punto de vista empresarial, ?no es mucho m¨¢s ¨²til compartir lengua con otros territorios? R. No entro en el enfrentamiento sobre la unidad de la lengua y los problemas que pueda causar. Pero a nadie se le escapa que, comercialmente, queremos hablar el mismo idioma.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.