Herminio Bolaextra regresa al teatro

Superman, Makinavaja, Batman, Historias de la puta mili, Spawn,... Son ya muchas las obras y personajes de c¨®mic que han sido arrancados de su entorno natural para ser plasmadas sus aventuras en cine, televisi¨®n o teatro. A la lista se sum¨® hace ya cuatro a?os Herminio Bolaextra, periodista sin escr¨²pulos y desvergonzado creado por la imaginaci¨®n y el l¨¢piz del dibujante vasco Mauro Entrialgo. Y lo hizo de la mano de la compa?¨ªa teatral Sobradun que, desde hoy y hasta el pr¨®ximo domingo, representa Herminio y Miguelito en la sala Bilborock de la capital vizca¨ªna. Se da la circunstancia de que esta obra no es la m¨¢s reciente de la compa?¨ªa alavesa, sino la primera que abord¨®. Tras ella lleg¨® 30 millones de gilipollas, pero su exitoso periplo peninsular se vio truncado por el tr¨¢gico accidente que seg¨® la vida de un miembro del equipo. Mientras ultima su tercera creaci¨®n, No hay huevos -"una especie de comedia de situaci¨®n que ninguna televisi¨®n se atrever¨ªa a emitir", advierten-, Sobradun ha reestrenado su opera prima movida por el deseo de no abandonar la actividad y caer en cierto olvido. Su sinopsis la aborda a continuaci¨®n Eloy Beato, el director: "Herminio es un periodista bastante cabr¨®n que pr¨¢cticamente no ejerce su profesi¨®n. Est¨¢ acompa?ado por otro periodista que se llama Miguelito, es amigo suyo y quiz¨¢ un poco m¨¢s trabajador que ¨¦l. La acci¨®n se desarrolla en la redacci¨®n de un peri¨®dico, El Caos, durante una noche en la que ambos tienen que acabar urgentemente un art¨ªculo que va a entrar en el dominical de esa semana. Lo que les sucede a los dos personajes para acabar el art¨ªculo en un determinado tiempo es lo que ocurre en la obra". Interpretadas con admirable desparpajo y enfocadas como "una gamberrada cultural, un sainetillo de serie B", cada representaci¨®n es una exhibici¨®n de humor acre con el sempiterno prop¨®sito de entretener. Sin m¨¢s. "Queremos hacer un teatro moderno, joven, sin muchas pretensiones. Basado, sobre todo, en el texto y apostando por ese humor ¨¢cido que, no s¨¦ por qu¨¦ narices, ya no se estila. Generalmente, el humor hoy son chistes sobre gays, sobre Lepe, sobre Froil¨¢n... Nosotros apostamos por el humor m¨¢s ¨¢cido, m¨¢s cr¨ªtico", describe Beato. Seguidamente, el ¨¢nimo provocador de Sobradun queda perfectamente reflejado en la breve relaci¨®n de intenciones que expone el propio director: "Nuestro primer objetivo es que la gente no se aburra, que se lo pase bien. Si luego, a parte, piensa que somos unos cabrones, nos quedamos m¨¢s satisfechos". En el cartel que anuncia la comedia, ilustrado por el propio Entrialgo, destacan dos advertencias que desaconsejan la asistencia a quienes tienen propensi¨®n a escandalizarse y a aquellos amantes del teatro cl¨¢sico. As¨ª, la audiencia a quien va dirigida la funci¨®n se concreta en "ese tipo de p¨²blico joven que va a los conciertos y no se mete al teatro porque piensa que es aburrido, porque no lo entiende", afirma Gorka Aguinagalde, actor que da vida a Herminio bajo los focos. "Para esta obra cogimos como base decir las cosas tal y como son. No damos rodeos", concluye el mismo int¨¦rprete. Respecto al personaje que interpreta, Aguinagalde no oculta su opini¨®n y lo retrata sin ambages. "Herminio no es un personaje simp¨¢tico. Ser¨ªa el ¨²ltimo amigo que quisi¨¦ramos todos. Te puede dejar en evidencia en cualquier lugar. Lo bueno que tiene es que no se mete gratuitamente con la gente o con las cosas que pasan, siempre da su versi¨®n o su visi¨®n, muy particular y muy peculiar, de por qu¨¦ dice esas barbaridades".