X Bienal: El d¨¦cimo que siempre toca

Esta letra volver¨¢ el domingo a las quinielas. Met¨¢fora de la igualdad; el que gana (1) es m¨¢s libre; el que pierde (2), siempre invoca la fraternidad. Una limosna, hermano; pero el que empata (X), acaricia el sue?o ut¨®pico de esa igualdad que en realidad iguala por abajo con la Liga de los tres puntos. Antepen¨²ltima letra del alfabeto, representa la inc¨®gnita y lo desconocido: terreno abonado para las hip¨®tesis, el se?or X, el tercer hombre; letra imprescindible en las matem¨¢ticas, donde casi todo es igual a equis. Una de esas letras raras y extravagantes a las que se refiere Leopoldo de Trazegnies Granda, peruano de ascendencia belga afincado en Montequinto, en un libro artesanal y muy estimable titulado Conjeturas y otras cojudeces de un sudaca. La X preside todos los carteles en rojo y negro que anuncian la d¨¦cima edici¨®n de la Bienal de Flamenco. La Paquera de Jerez por la Cartuja de Parma. Hay quiniela, pero tambi¨¦n este d¨¦cimo que siempre toca, siempre baila, siempre canta. Busquemos ejemplos al azar de esta m¨¢gica trilog¨ªa: Paco de Luc¨ªa, Mario Maya, Rancapino; Tomatito, Sara Baras, Fosforito; Manolo Sanl¨²car, Aurora Vargas, Chano Lobato; Jos¨¦ Mar¨ªa Gallardo, Pepa Montes, Jos¨¦ el de la Tomasa; Gualberto, Israel Galv¨¢n, Carmen Linares. El mapa de Andaluc¨ªa reconstruido con todos los palos. La dinast¨ªa de los Maya con el m¨¢s azteca de los bailaores. La Bienal que se invent¨® Jos¨¦ Luis Ortiz Nuevo, antes director y ahora dirigido por Pepa Gamboa en las Mil y una historias de Peric¨®n de C¨¢diz. Se abre la Bienal con un toro uno en la Maestranza, en la Carmen de Salvador T¨¢vora que censur¨® la Generalitat. Est¨¢ Lorca en la locura de brisa y trino, hay un crucero de C¨¢diz a La Habana, ida y vuelta, y la Obertura de Silverio Fraconetti, paisano del torero Mazzantini. La ¨²ltima Bienal del milenio en la que se puede aprender guitarra de acompa?amiento o doctorarse en Sole¨¢ y Alegr¨ªas. Que cantando la pena, la pena se olvida.