El Ayuntamiento reabre O"Donnell al tr¨¢fico tras un mes de obras

El Gabinete de Tr¨¢fico del Ayuntamiento advirti¨® el embrollo y llam¨® a la Polic¨ªa a fin de que indicara a los automovilistas que tomaran la v¨ªa nueva, m¨¢s r¨¢pida y c¨®moda. Al final, la Polic¨ªa cort¨® la conexi¨®n entre las v¨ªas de servicio entre Moratalaz y Ventas y los carriles centrales a fin de que los automovilistas tomaran, obligatoriamente, las primeras.Por arriba, el nuevo puente de Ventas acelera sus trabajos para cumplir los plazos previstos. Ahora, los trabajadores se afanan en ultimar el tablero central y los pasos de peatones. Los veh¨ªculos que quieren pasar por encima de la M-30 utilizan los laterales de la nueva estructura, bien para ir por la calle de Alcal¨¢ o bien para conectar con la autov¨ªa.

Cuando la obra se termine, los carriles que discurrir¨¢n por el centro del puente servir¨¢n exclusivamente para unir la calle de Alcal¨¢. Los carriles laterales se utilizar¨¢n s¨®lo para acceder a la M-30. Los trabajos, seg¨²n ha asegurado el alcalde, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano, del PP, se acabar¨¢n del todo a finales de septiembre. El nuevo puente de Ventas empez¨® a construirse en junio del a?o pasado. Costar¨¢ 2.200 millones de pesetas. El Ayuntamiento aporta el 36%, unos 792 millones; el resto llega de las arcas del Ministerio de Fomento.

A las quejas de vecinos y conductores, los responsables de Obras del municipio han respondido siempre que ha sido t¨¦cnicamente muy dif¨ªcil tirar el puente antiguo y construir uno nuevo sin que el tr¨¢fico se resienta. El proyecto no s¨®lo prev¨¦ mejorar el nudo de conexiones entre la calle de Alcal¨¢ y la M-30. Tambi¨¦n mejorar¨¢ el paso de peatones. Con el viejo puente, los viandantes ten¨ªan que cruzar la M-30 mediante unos t¨²neles sombr¨ªos que amedrentaban a m¨¢s de uno. Ahora, los vecinos contar¨¢n con una franja cubierta en buena parte construida al efecto.

La reforma del puente de Ventas es una obra municipal con mucha historia: arranc¨® (en plano) en 1988, cuando se cre¨® el Plan de Accesos de Madrid. A pesar de la tardanza en la ejecuci¨®n efectiva, la construcci¨®n se consideraba necesaria por dos razones: primero, porque la estructura del viejo puente convert¨ªa la M-30, a su paso por la calle de Alcal¨¢, en un embudo ya que perd¨ªa cuatro carriles (los cuatro carriles que ha recuperado con la nueva estructura y que fueron abiertos al tr¨¢fico ayer), y segundo, porque los giros del puente estaban confeccionados de una manera extra?a, "contra natura", seg¨²n los t¨¦cnicos municipales, y fomentaban el error y la confusi¨®n.

Adem¨¢s de estas grandes obras municipales, en las calles de la ciudad se agolpan vallas en otros puntos. Por ejemplo, la calle Mayor cuenta s¨®lo con un carril en el tramo desde la calle de Bail¨¦n a la Cava de San Miguel debido a una reforma que tiene por objeto, entre otras cosas, ensanchar las aceras. ?sta es una obra que repercute en gran manera en la circulaci¨®n, ya que atasca parte de la calle de Bail¨¦n.

Otro punto clave, y fuente de pol¨¦micas durante este verano, ha sido la construcci¨®n por la Comunidad de Madrid del intercambiador de transportes de la avenida de Am¨¦rica. Los plazos previstos apuntan a que las obras en superficie (lo que de verdad molesta a los conductores) terminar¨¢n el 6 de septiembre. Anoche, sobre las 00.15 una veintena de vecinos se concentraron junto a las perforadoras y llamaron a la Polic¨ªa Municipal con el objeto de parar el ruido nocturno que, dijeron, "volv¨ªan a producir las m¨¢quinas".