La N-III va bien
Es de noche. Regreso de vacaciones y voy camino de mi domicilio en Rivas-Vaciamadrid. Salgo de Madrid por la carretera de Valencia, N-III, y, pasado el barrio de Santa Eugenia (¨²ltimo de Madrid por esta carretera), observo una negrura insondable que me espera en la carretera. La iluminaci¨®n en esta importante salida de Madrid s¨®lo alcanza hasta un poco m¨¢s all¨¢ del kil¨®metro10. Estoy muy cansado por el largo viaje y reduzco velocidad. Observo que la se?alizaci¨®n horizontal pr¨¢cticamente ha desaparecido debido al uso y a la falta de mantenimiento de esta carretera internacional E-901, y lo ¨²nico que me gu¨ªa es el sentido de la orientaci¨®n, las d¨¦biles rayas y los pocos y sucios ojos de gato a la derecha de la carretera.De repente, en el kil¨®metro12 la carretera gira a la izquierda, los faros de los autom¨®viles que circulan en sentido contrario me deslumbran, busco la referencia de los ojos de gato de mi derecha y veo que se han separado de mi carril, y es que hay una salida hacia un concesionario de camiones, sin se?alizar y con unos pivotes verdes en el suelo, sucios y renegridos, que me los encuentro casi enfrente de mi veh¨ªculo. Doy un ligero volantazo para esquivarlos, con la mala suerte de que por el carril de la izquierda un autom¨®vil me embiste. Doy varias vueltas de campana. Observo la escena desde arriba, como si estuviera flotando. Han parado varios veh¨ªculos y me veo dentro de mi coche, destrozado, inerte. Suena la sirena de una ambulancia y a la vez un punto luminoso me atrae. Voy hacia ¨¦l, a la vez que escucho una melod¨ªa armoniosa que se va haciendo m¨¢s intensa. Viene de un coro de arc¨¢ngeles que cantan con voz aflautada: "La carretera de Valencia va bien, todo va bien, Espa?a va bien".- .
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.