Confusi¨®n en la farmacia
En los mostradores de las farmacias, entre las cajas registradoras, las juanolas y los caramelos para la tos, ayer se instal¨® un accesorio que se ha revelado imprescindible con gran rapidez debido a la confusi¨®n existente: la lista de medicamentos excluidos encuadernada, editada y repartida por el Colegio de Farmac¨¦uticos a sus miembros.En la farmacia madrile?a Cea, situada en la calle de Preciados y fundada en 1887 a pocos metros de la Puerta del Sol, ya hab¨ªan roto alguna p¨¢gina a media ma?ana: apenas llevaba cuatro horas en vigor el medicamentazo y el continuo uso de la lista se hac¨ªa evidente. ?Por qu¨¦? "La gente no sabe lo que se le quita: vienen con la receta y tienes que mirar la lista para ver si el medicamento est¨¢", explica el farmac¨¦utico, Carlos S¨¢nchez.
El desconcierto aumenta cuando un s¨ªmbolo acompa?a al nombre del medicamento excluido: "Significa que est¨¢ sujeto a excepciones relacionadas con la enfermedad y la edad del paciente".
Una jubilada que ayer compraba colirios y pomada para las varices en una farmacia pr¨®xima a la madrile?a Plaza de Santa B¨¢rbara no tiene reparos en reconocer su desconocimiento del contenido de la lista: "?Que cu¨¢ndo me enterar¨¦? Pues seg¨²n vaya necesitando los f¨¢rmacos". Y describe su pr¨®xima visita a la doctora: "Llevar¨¦ una lista de medicinas y ella ya me dir¨¢ las que cubre la Seguridad Social". De momento ya ha pagado 350 pesetas por un colirio que anteayer no le costaba nada.
Su farmac¨¦utica, Mercedes Ferrer, reconoce que en su gremio tambi¨¦n emplean la duda como m¨¦todo: "Ni siquiera los farmac¨¦uticos estamos informados". Sin embargo, el director del ?rea Sanitaria del Servicio Catal¨¢n de Salud, Carles Constante, y el presidente del Colegio de Farmac¨¦uticos de Barcelona, Joan Dur¨¢n, negaron ayer, a su vez, que la informaci¨®n proporcionada a los farmac¨¦uticos sea insuficiente, informa Europa Press. Pero la industria no est¨¢ tan segura: los f¨¢rmacos excluidos llevar¨¢n una etiqueta diferenciadora.
As¨ª tambi¨¦n lo tendr¨¢ m¨¢s claro un cliente de Mercedes Ferrer: se enter¨® el lunes de que era el ¨²ltimo d¨ªa que la Seguridad Social cubr¨ªa su laxante. El paciente, un enfermo grave tratado con morfina, quiz¨¢ recurra al consejo que le regal¨® ayer la jubilada: "Como las ciruelas no hay nada".
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