S¨®lidos y convincentes

Undershakers, La Habitaci¨®n Roja y Los Fresones Rebeldes Parque de San Onofre. Quart de Poblet (Valencia). 11 de septiembre de 1998.El quinteto asturiano Undershakers aprovecha cualquier oportunidad para recalcar que el pop sigue siendo un mundo machista (es cierto, todav¨ªa se escuchan algunos improcedentes comentarios, referidos al sexo de las componentes del grupo, durante sus actuaciones) y, de paso, intentar convencer a sus aficionados de que el lazo que las manten¨ªa atadas al rock de garage y el revivalismo sesentero se rompi¨® el d¨ªa que comenzaron a registrar su segundo ¨¢lbum, Vud¨². El movimiento, sin embargo, se demuestra andando y Undershakers, en cambio, siempre parecen encontrarse en el mismo punto. O casi: avanzan dos pasos para, acto seguido, dar otro en el sentido contrario. As¨ª, aunque en el estudio de grabaci¨®n logran acortar las distancias que inicialmente les alejaban del pop (¨¦se es, al fin y al cabo, su principal objetivo), cuando suben a un escenario vuelven a reencontrarse con sus influencias originales y, tan a gusto se encuentran con ellas, que acaban olvidando todo lo dem¨¢s. No es un reproche (est¨¢n en su derecho de practicar la m¨²sica que m¨¢s les divierta), sino la constataci¨®n de un hecho. Undershakers est¨¢n m¨¢s cerca del rock de lo que, quiz¨¢, les gustar¨ªa y, por eso, resulta imposible no acordarse de las deliciosas Pandoras y ese imponente giro estil¨ªstico con el que un d¨ªa decidieron despistar a sus fans. Por lo dem¨¢s, todo perfecto: se desenvuelven con una garra y soltura de la que muchos otros podr¨ªan aprender y la voz de Sandra Tocino cada vez suena mejor. Eso s¨ª, a¨²n dependen demasiado del repertorio ajeno (Steppin" stone de The Monkees o I tell no lies de The Scapates) y la escasa presencia del castellano en sus textos, con el que se anotan muchos puntos a su favor, sigue siendo una cuesti¨®n pendiente que no deber¨ªan descuidar. Los valencianos La Habitaci¨®n Roja no han dejado de girar en todo el verano y as¨ª seguir¨¢n hasta, por lo menos, finales de a?o. Tras su meritoria actuaci¨®n en el Festival de Benic¨¤ssim, su cita en el BAM de Barcelona, dentro de dos semanas, podr¨ªa ser el empuj¨®n para hacerse un hueco en la escena independiente nacional. No deben preocuparse: ya est¨¢n preparados para el salto. Su directo es s¨®lido y muy convincente (el cantante y guitarrista Jorge Mart¨ª est¨¢ a un paso de ganarle la partida a sus nervios) y, encima, andan sobrados de canciones sublimes (Mi habitaci¨®n, ?Y? o Jueves) fraguadas en las calderas del pop m¨¢s valioso. Los Fresones Rebeldes, por su parte, ofrecieron un concierto id¨¦ntico al del pasado d¨ªa 5 de septiembre en el Festival Rock de Alaqu¨¤s; es decir, tan divertido como falto de pretensiones. Pop ingenuo y nuevaolero interpretado con m¨¢s pasi¨®n que habilidad y, posiblemente por eso, a ratos resplandeciente.