Olano recupera la estabilidad
El guipuzcoano toma el liderato tras la contrarreloj, mientras Z¨¹lle fracasa
No hubo sorpresa. El libreto del Banesto se cumpli¨®. Jose Mar¨ªa Jimenez cedi¨® el jersey amarillo a su jefe Abraham Olano. El guipuzcoano termin¨® con los dos a?os de su situaci¨®n personal mal¨¦fica en la Vuelta. Termin¨® con la incertidumbre que pesaba sobre el corredor en su empe?o por querer demostrar a la afici¨®n que ten¨ªa nivel de ciclista de primer orden y que extra?as circunstancias le negaban. Y lo hizo en su terreno, la contrarreloj. Su decreto. Olano cumpli¨® con las expectativas y se coloco l¨ªder tras el ejercicio en solitario de Alc¨²dia. No s¨®lo gan¨® la etapa sino que fue el ¨²nico corredor con capacidad de pedalear durante los 40 kil¨®metros a 50 por hora -concretamente, a 50,291-. Un promedio de altos vuelos. S¨®lo para los elegidos. Olano recuper¨® la estabilidad.No dej¨® Olano el debate de la Vuelta cerrado, aunque puso orden en la general. De entrada, elimin¨® a Alex Z¨¹lle, el te¨®rico gran adversario. El suizo no complaci¨® a la galer¨ªa. Las dudas del reciente pasado de Z¨¹lle todav¨ªa persisten. El bicampe¨®n de la Vuelta hizo el mismo tiempo que Fernando Escart¨ªn, un puro escalador, que anoche durmi¨® feliz por la extraordinaria contrarreloj que desarroll¨®. Lo mismo le ocurri¨® a Daniel Clavero, otro monta?ero. Mala se?al para Z¨¹lle. Olano afronta la monta?a con casi dos minutos y medio sobre el corredor del Festina.
Laurent Jalabert se benefici¨® de los 24 segundos que ha estado pescando en las bonificaciones de las metas volantes durante la semana para no acabar en el coche escoba. El campe¨®n franc¨¦s fue cuarto, por detr¨¢s de Melcior Mauri, segundo, y Uwe Peschel, tercero.
Olano puede leer la general con especial satisfacci¨®n. Puede ser generoso, incluso, acordar un tregua con Z¨¹lle y Jalabert ante el acoso de la monta?a que comienza ma?ana. La estaci¨®n de esqu¨ª andorrana, Pal, puede se el punto de inflexi¨®n de la carrera en beneficio de los escaladores. El acoso de Escart¨ªn y sus escuderos Roberto Heras -la progresi¨®n del chaval es dichosa-, Joselu Rubiera y Marcos Serrano ser¨¢ evidente. Olano, sin embargo, cuenta con una protecci¨®n de lujo para defenderse, con Jim¨¦nez y Bertr¨¢n, como sus principales aliados para atajar las embestidas de los Kelme.
?Y Melcior Mauri? El catal¨¢n revivio su condici¨®n de especialista contra el cron¨®metro. Mauri record¨® a la concurrencia que es el ¨²ltimo espa?ol en ganar la Vuelta, pese a los siete a?os transcurridos. Acab¨® a 41 segundos del ganador de la etapa, pero tuvo en vilo a Olano durante los primeros tramos de la prueba. Hasta que sali¨® Olano. Las referencias de Mauri le fueron de perlas al guipuzcoano. Olano comenz¨® a toda pastilla y acab¨® como un torpedo. Se puso l¨ªder en el kil¨®metro 22 al restar los 24 segundos de desventaja con respecto a Jalabert. A diferencia de Z¨¹lle o el propio Jalabert, Olano sigui¨® a rajatabla la regla de oro de la contrarreloj: comenzar a tope, acelerar a mitad de recorrido y esprintar al final. Mauri fue el ¨²nico capaz de imitar al ganador.
La Vuelta ya tiene a un l¨ªder con una bella carrocer¨ªa y un gran motor. Un favorito de los que se tienen en cuenta. Y un espa?ol, por cierto.
A Olano se le ve fino. Est¨¢ en su sitio, donde le situaban los pron¨®sticos a estas alturas de la Vuelta. Pero es s¨®lo el primer paso: la primera semana. Y quedan dos, que son las que dictan las leyes de las grandes vueltas. Olano lleva dos a?os luchando contra la sombra de Indur¨¢in y en el esfuerzo ha perdido alg¨²n cr¨¦dito. El maillot amarillo le va a servir de recompensa moral, pero queda lo peor para ¨¦l, la monta?a. Olano tiene una cita consigo mismo, y de ello depende que el ciclismo espa?ol encuentre el l¨ªder que anda buscando. Ahora toca a los dem¨¢s moverse. Solo cabe reeditar el gui¨®n en la monta?a. "Si el equipo trabaja bien, no vamos a tener problemas en mantener el liderato en las dos llegadas en alto", se?al¨® Olano. "Es importante no regalar segundos. Ir vestido de amarillo es un aliciente m¨¢s. Se trataba de estar bien, sentirse a gusto en la contrarreloj y para los d¨ªas venideros". Los primeros s¨ªntomas son buenos. Pero queda carrera.
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