Pasar consulta en el desierto

La Asociaci¨®n Amigos del S¨¢hara naci¨® hace m¨¢s de 10 a?os en Vitoria. El detonante de su formaci¨®n fue la visita que los ni?os saharauis realizan a diferentes ciudades espa?olas durante el verano. Un grupo de m¨¦dicos y enfermeras de ¨¦sta ciudad viaja al menos dos veces al a?o hasta el S¨¢hara para tratar los casos m¨¢s urgentes. Sin embargo, la Asociaci¨®n cuenta detr¨¢s con un grupo humano comprometido, que promueve diferentes actividades, que van desde exposiciones divulgativas sobre el S¨¢hara, hasta env¨ªos masivos de alimentos a los campamentos de Tinduf. Fue un grupo de m¨¦dicos vitorianos dirigidos por el doctor Chema Anda, el que empez¨® en el a?o 1984 a interesarse por los problemas de salud de los ni?os saharauis que visitaban Vitoria. las deficiencias nutricionales y m¨¦dicas de los ni?os eran tan grandes que un verano en Vitoria no pod¨ªa garantizarles la total curaci¨®n. Fue as¨ª como este equipo de m¨¦dicos decidi¨® trasladarse hasta el S¨¢hara para continuar sobre el terreno sus tratamientos. Lo que all¨ª se encontraron desbord¨® sus expectativas y dio un nuevo significado a su compromiso con los saharauis. Llegar a los campamentos y operar no les pareci¨® suficiente y se plantearon poner en marcha un plan integral de salud que pudiera ser gestionado en el futuro por los propios saharauis. El elegido era, quiz¨¢s, el camino m¨¢s dif¨ªcil y complicado, pero el ¨²nico que se considera aceptable para una problem¨¢tica de salud como la que padecen los campamentos saharauis. Uno de los padecimientos m¨¢s frecuentes en el S¨¢hara es el relacionado con la garganta y los o¨ªdos. Las particulares condiciones clim¨¢ticas, con mucho viento y polvo y arena en suspensi¨®n, hacen que la labor de los otorrinos sea imprescindible en los campamentos. La sordera afecta tambi¨¦n a un n¨²mero importante de la poblaci¨®n, incluidos los ni?os. En estos ¨²ltimos, los catarros, cr¨®nicos al no disponer de antibi¨®ticos para su tratamiento, suelen transformarse en infecciones que arrastran secuelas para el o¨ªdo. Proceso largo La sordera es, precisamente uno de los tratamientos m¨¢s dif¨ªciles en el desierto. Recuperar la audici¨®n es un proceso a largo plazo que exige paciencia y determinaci¨®n en los enfermos. Por el contrario, tratar a los ancianos de cataratas es una de las operaciones m¨¢s agradecidas. Ciegos en ocasiones desde muchos a?os atr¨¢s, la recuperaci¨®n repentina de la vista les sume en una alegr¨ªa dif¨ªcil de explicar. Llantos, gritos y abrazos son reacciones frecuentes. No es de extra?ar por tanto, la tremenda popularidad de la que goza en el S¨¢hara el equipo de m¨¦dicos vitoriano coordinado por el doctor Chema Anda. Aunque crear el clima de confianza entre m¨¦dicos y saharauis no cost¨® mucho, en los comienzos no se ve¨ªan grandes colas de refugiados a la entrada de los dispensarios. Con el paso de los a?os, la humanidad y simpat¨ªa por un lado y sobre todo la profesionalidad de sus intervenciones les granjearon el reconocimiento de los saharauis. Hoy, y en un periodo de tiempo no superior a las dos semanas, las intervenciones quir¨²rgicas no bajan de 150. Si a esto se a?aden las consultas a las que hay que desplazarse en jeep a los diferentes campamentos, se ve claramente la fren¨¦tica actividad que se desarrolla en 15 d¨ªas. La medicina no es, adem¨¢s, el ¨²nico campo de actuaci¨®n de los m¨¦dicos pertenecientes a la Asociaci¨®n de Amigos del S¨¢hara. Ser mitad electricista, mitad fontanero, grandes dosis de imaginaci¨®n y una gran capacidad de trabajo en equipo son requisitos imprescindibles para el ejercicio de la medicina en los campamentos de refugiados. A los situados en las proximidades de Tinduf llegan diferentes ONGs. Las hay que tienen detr¨¢s organizaciones religiosas, partidos pol¨ªticos o simplemente grupos humanos sensibilizados. Proyecto a largo plazo Hay ONGs que son verdaderas multinacionales de la cooperaci¨®n y otras mucho m¨¢s modestas que suelen concentrarse en un problema espec¨ªfico y que tienen un margen de maniobra mucho mayor. Detr¨¢s de las grandes ONGs siempre se mueven grupos de presi¨®n de uno y otro signo, que impiden en ocasiones, una visi¨®n globalizadora del problema. Tampoco el ejercicio de la medicina en los campamentos se parece a la aventura, ni mucho menos a la improvisaci¨®n. En palabras de Chema Anda: "No nos interesan m¨¦dicos que vengan a diagnosticar u operar s¨®lo una vez al S¨¢hara. Venir aqu¨ª una vez es una aventura, venir siete a?os seguidos es un co?azo. Lo que interesa es gente con un proyecto claro a largo plazo, con capacidad de integraci¨®n y trabajo en equipo. Se trata de formar al personal m¨¦dico saharaui y a los enfermos. Es el camino m¨¢s lento y tortuoso, pero el ¨²nico que permite resultados a largo plazo".