Una oportunidad radiof¨®nica
El t¨¦cnico de Canal 7, una emisora malague?a, da la entrada con un gesto y Adolfo Nu?o, un joven de 21 a?os, comienza a locutar tras el cristal. Es uno de los seis estudiantes de Ciencias de la Informaci¨®n de M¨¢laga que ha descubierto la mejor soluci¨®n a la falta de pr¨¢cticas que se ofrecen en los medios de comunicaci¨®n: busc¨¢rselas ellos mismos. No les ha salido mal. Ellos solos se guisan y se comen los servicios informativos de esta radio local desde que hace dos semanas entr¨® la programaci¨®n de oto?o. Al principio se encontraron de bruces con el problema habitual: la falta de experiencia. Presentaron por su cuenta un proyecto para un programa magazine. "Nos dijeron que estaba muy completo pero como no hab¨ªamos trabajado antes en la radio nos propusieron trabajar en producci¨®n para otro programa", dice Charo Crespillo, estudiante de tercero de publicidad. As¨ª lo hicieron y ahora han recogido sus frutos. "Es la primera oportunidad que me dan", asegura esta joven de 20 a?os. "Y me gustar¨ªa poder continuar porque, de alguna forma, tienes acceso al mundillo". Un mundillo que se abre para ellos de 8.00 a 12.00 de la ma?ana y de lunes a viernes. Cada media hora -a y cuarto y a menos cuarto- comienza la tensi¨®n. "Son r¨¢fagas informativas de cinco minutos", explica el Manolo de Vera, el director de esta cadena que tiene un a?o de edad. La labor: redactar los faxes que llegan a la redacci¨®n, llamar a tr¨¢fico, comentar el tiempo o resumir alguna noticia interesante que, a nivel local, ha salido en los peri¨®dicos del d¨ªa. "Ahora hemos empezado a ir a ruedas de prensa", dice Nu?o, que considera que la radio "es el medio m¨¢s creativo que hay". "La informaci¨®n en s¨ª no nos plantea problemas", asegura. Los problemas vienen con la pronunciaci¨®n. "No somos locutores y es l¨®gico". En cualquier caso tampoco le gustar¨ªa parecerse a ning¨²n locutor en especial. "Los que existen, existen ya". Todos coinciden en que la carrera de periodismo est¨¢ enfocada "a los plumillas" y que las clases pr¨¢cticas son las menos. "La formaci¨®n que tenemos en radio es exclusivamente t¨¦cnica, no te dan clases, por ejemplo, de locuci¨®n y cuando emitimos lo hacemos en megafon¨ªa", dice Flor Enjuto, estudiante de tercero. Ella, al igual que el resto, echa de menos tener una aut¨¦ntica emisora en la Facultad, "una de esas que se pueda escuchar en toda la universidad". Se ha hablado muchas veces. "Tambi¨¦n se ha comentado que se iba a crear un peri¨®dico universitario para que los estudiantes pudi¨¦semos practicar". Al final todo qued¨® en agua de borrajas. Pero, en el fondo, ya les da igual. Ya cuentan con la oportunidad radiof¨®nica que buscaron y no encontraron en la universidad. "Al empezar lo hac¨ªamos todo de o¨ªdo", dice Enjuto. Y es que todos se declaran adictos a este medio de comunicaci¨®n. La idea de que fueran estudiantes de Periodismo los encargados de los servicios informativos parti¨® de Luis Carlos Garc¨ªa, el programador de la emisora. "Era una de las formas que ide¨¦ cuando estuve de delegado de Cadena Dial en V¨¦lez. Al final no se hizo porque no ten¨ªamos presupuesto", asegura. Y a?ade: "Todos nos beneficiamos. Ellos suplen la carencia de pr¨¢cticas en la universidad y nosotros podemos ofrecer informaci¨®n sin que nos cueste". Garc¨ªa est¨¢ contento aunque "siempre hay fallos". Es l¨®gico. Acaban de empezar y "se nota la falta de pr¨¢ctica". ?l es el encargado de que la adquieran. "Tienen libertad en lo que se refiere a la informaci¨®n que quieren dar. Yo les doy consejos de tipo pr¨¢ctico como "no vocalices tanto" o "entra antes"". Pero, al menos, no se ha producido el problema que m¨¢s tem¨ªan: que, al no ser pr¨¢cticas remuneradas y tener que estar cuatro horas diarias, los estudiantes pudieran empezar a fallar. Por suerte, no ha sido as¨ª. Cada d¨ªa de la semana acude un alumno y algunos d¨ªas m¨¢s de uno para hacer el informativo a dos voces. Cada jornada cumplen puntualmente con el compromiso que han adquirido con los oyentes del 95.5 FM.
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