Aclaraci¨®n

En EL PA?S del 30 de septiembre se insertan unas declaraciones de mi amigo Pasqual Maragall en las que, hablando del reciente encuentro de Lisboa sobre la transici¨®n espa?ola, tras calificar de "expresi¨®n infeliz" la alusi¨®n al conflicto de los Balcanes hecha por Felipe Gonz¨¢lez en relaci¨®n con las diferencias de los nacionalistas vascos y catalanes, se a?ade: "No fue el ¨²nico desacierto que hubo... porque, por ejemplo, Santiago Carrillo sostuvo que le parece que vamos a una Rep¨²blica federal".No acabo de entender por qu¨¦ Maragall me atribuye palabras que no dije en ning¨²n momento, creo que no estaba en la sala cuando habl¨¦ y que le transmitieron err¨®neamente mis palabras, porque en un momento yo dije algo cuyo sentido era ¨¦ste: "Alguien que presenciara la disputa entre nacionalistas de un lado y otro, al tiempo que algunos hablan de Rep¨²blica federal y los obispos condenan violentamente el aborto, podr¨ªa imaginar que estamos en los a?os treinta. Pero la Espa?a de hoy es otra muy distinta".

Y al tiempo a?ad¨ªa que hay que esforzarse por que la tregua de ETA abra el camino de la paz y que las diferencias con los nacionalismos perif¨¦ricos hay que abordarlas con esp¨ªritu de di¨¢logo y consenso.

No suelo hacer rectificaciones cuando se me atribuyen opiniones que desfiguran alguna declaraci¨®n m¨ªa. Pero en este caso, por tratarse de Pasqual Maragall, cuya buena fe es indudable, me ha parecido necesario aclararle a ¨¦l y a quienes hayan le¨ªdo su declaraci¨®n, que se trata de un error que yo no he cometido. Nicol¨¢s Redondo, que estuvo presente en Lisboa y que escuch¨® mis palabras, me alertaba ayer para que rectificase la err¨®nea informaci¨®n.- . .