Egibar y Otegi impusieron en Estella un di¨¢logo ?sin exclusiones?

/ I. C.M, El aspecto que m¨¢s discusi¨®n suscit¨® la Declaraci¨®n de Lizarra entre las fuerzas pol¨ªticas y sociales que la suscribieron fue el que hace referencia al di¨¢logo, en la llamada "fase resolutoria", entre todos los "agentes" del conflicto "sin exclusiones". Algunos partidos quisieron limitar m¨¢s el terreno, haciendo referencia expresa a los representantes "leg¨ªtimos" del pueblo vasco. Pero encontraron la negativa rotunda de Egibar (PNV) y Otegi (HB). Esa terminolog¨ªa mantenida es el gui?o necesario a la militancia de ETA, en la medida que deja abierta una posible intervenci¨®n directa de la organizaci¨®n terrorista en el futuro di¨¢logo. No obstante, esto es algo que sus dirigentes tienen asumido, en principio, que no ocurrir¨¢, porque entrar¨ªa en contradicci¨®n con su renuncia al viejo esquema de negociaci¨®n directa entre ETA y el Gobierno.

Sin embargo, queda una referencia escrita a esa hipot¨¦tica negociaci¨®n con el Estado, que s¨ª se producir¨ªa en la cuesti¨®n de los presos de la organizaci¨®n, en el caso de que eleve a definitiva su tregua. En medios de HB se afirma que, ante la nueva situaci¨®n creada, diversos pa¨ªses europeos se han mostrado abiertos a auspiciar y acoger los contactos que sean necesarios entre ETA y el Gobierno. Entre esos pa¨ªses citan a B¨¦lgica, Alemania, Reino Unido y Dinamarca.

Agenda tras las elecciones

Las prioridades de los firmantes de Estella en este momento pasan, adem¨¢s de por la b¨²squeda de apoyos internos e internacionales al proceso, por preparar, para su contraste despu¨¦s de las elecciones, textos de discusi¨®n que aborden de manera practicable los dos aspectos clave de su enunciado: el reconocimiento de la territorialidad de Euskal Herria y el derecho de autodeterminaci¨®n. La v¨ªa de los derechos hist¨®ricos, amparada en la Disposici¨®n Adicional Primera de Constituci¨®n, que coloca a cada territorio foral (Navarra incluida) en pie de igualdad y soberan¨ªa con respecto a los dem¨¢s, ser¨¢ explorada en todas sus posibilidades. HB y ETA est¨¢n dispuestas a tratar el tema de Navarra desde una cierta autocr¨ªtica de la postura que han mantenido hasta ahora, y reconocen que han pecado de prepotencia. Los firmantes de Estella cuentan para ello con enganchar al proceso al CDN de Juan Cruz Alli, al que mantienen informado, aunque no asiste a las citas del Foro.La separaci¨®n entre paz y negociaci¨®n pol¨ªtica, avanzada por el lehendakari Jos¨¦ Antonio Ardanza, recogida por Joaqu¨ªn Almunia y ratificada por el propio Xabier Arzalluz tras su entrevista con Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar -lo primero es la paz, lo otro puede esperar-, no gusta en HB. La coalici¨®n no oculta su intenci¨®n de pedir explicaciones al PNV por mantener esta postura. Sus dirigentes se remiten a la declaraci¨®n de Estella y recuerdan que la tregua definitiva no llegar¨¢ en tanto no est¨¦ clara "la voluntad y compromiso de abordar las causas del conflicto", tal y como reza la "fase resolutoria".