Revisi¨®n moderada

LA COMISI?N Europea, en la estela del Fondo Monetario Internacional (FMI), ha rebajado las previsiones de crecimiento en el ¨¢rea del euro en seis d¨¦cimas -desde el 3% al 2,4%- para el ejercicio de 1999, como un reconocimiento expl¨ªcito de los efectos de la crisis financiera sobre la econom¨ªa real. Esta revisi¨®n reconoce que "Europa no est¨¢ aislada de los acontecimientos exteriores" y que le afectan las perturbaciones, como explic¨® el comisario de Asuntos Monetarios. La Comisi¨®n matiza que la crisis llegar¨¢ a Europa, pero que ser¨¢ el ¨¢rea econ¨®mica que la resistir¨¢ mejor. Y es precisamente entre estas dos afirmaciones donde se mueve el ajuste de predicciones que ha efectuado Bruselas: habr¨¢ un impacto negativo en la econom¨ªa de 1999 -este a?o el crecimiento seguir¨¢ siendo fuerte y los Quince mantendr¨¢n una tasa media del 2,9%-, pero ser¨¢ moderado.Todos los reajustes de previsiones que realiza la Comisi¨®n, como semanas antes el FMI, son razonables, aunque muchos creen que se mueven en un nivel de optimismo. Casi todos los expertos se hubieran sentido m¨¢s c¨®modos con una rebaja m¨¢s amplia, pero hay que tener en cuenta que el papel de instituciones como el FMI y la Comisi¨®n consiste tambi¨¦n en evitar la alarma social y en soslayar el riesgo de elaborar profec¨ªas que tienden a autocumplirse. De las cifras de la Comisi¨®n se desprende adem¨¢s que ha optado por el escenario econ¨®mico m¨¢s favorable para el futuro inmediato; el efecto de la crisis se concentrar¨¢ en el a?o 1999, y despu¨¦s se reiniciar¨¢ el crecimiento. La hip¨®tesis es arriesgada, porque a finales de 1998 la convulsi¨®n financiera todav¨ªa no est¨¢ dominada.

En el caso de Espa?a, las revisiones son favorables por m¨ªnimas. La Comisi¨®n rebaja la previsi¨®n de crecimiento del Gobierno en dos d¨¦cimas (al 3,6%) anual, pero afirma que ser¨¢ la econom¨ªa menos afectada entre las europeas. La resistencia mayor de la econom¨ªa espa?ola a las convulsiones de los mercados se debe a que est¨¢ en una fase m¨¢s adelantada del ciclo econ¨®mico y, por tanto, el crecimiento de su demanda interna es m¨¢s fuerte y sostenido. Por esa raz¨®n depende menos en estos momentos de su sector exterior que el resto de las econom¨ªas europeas. Era m¨¢s seguro apostar por un aumento menor de la econom¨ªa espa?ola; dos o tres d¨¦cimas menos de predicci¨®n hubiesen apuntalado con un margen de maniobra mayor el ajuste presupuestario de 1999. Pero quiz¨¢ el consenso que se exige a estas instituciones impidi¨® un reajuste mayor. Por lo menos el mensaje de prudencia est¨¢ lanzado y confirmado.