El 'caso Aznalc¨®llar' costar¨¢ 40.000 millones y durar¨¢ como el de Tous

La retirada de los lodos vertidos por la rotura de la balsa en Aznalc¨®llar se da por concluida. El Guadiamar apenas arrastrar¨¢ residuos cuando las lluvias conviertan su liviano caudal en un flujo de m¨¢s de 1.000 metros c¨²bicos por segundo. "Siempre quedar¨¢ algo, como la porquer¨ªa que recoge un algod¨®n en un ba?o reci¨¦n fregado", dice un t¨¦cnico. Ahora la atenci¨®n se centra en el largo proceso judicial para reclamar los 40.000 millones de p¨¦rdidas.

El caso Aznalc¨®llar inicia un recorrido judicial cuyo final se vislumbra m¨¢s all¨¢ de una d¨¦cada, seg¨²n un abogado de las partes damnificadas: "Esto puede ser tan largo como la rotura del embalse de Tous en Valencia o el envenenamiento por la colza; diez a?os, quince... cualquiera sabe cu¨¢nto puede durar". En favor de esta tesis abunda la acumulaci¨®n de colectivos que se van personando en la causa; organizaciones ecologistas, ayuntamientos... "Algunos lo hacen para ganar imagen, otros para no dar la sensaci¨®n ante sus electores o la opini¨®n p¨²blica de que muestran escaso inter¨¦s, cuando no se dan cuenta que con estas personaciones lo que hacen es complicar la instrucci¨®n y dilatarla. Hay muchos precedentes. Sin ir m¨¢s lejos en el caso de Tous un fallo procesal de comunicaci¨®n oblig¨® a reiniciar el caso despu¨¦s de dictada la sentencia. Es muy f¨¢cil que entre tantas partes implicadas se olvide enviar una citaci¨®n o se pierda. Y si ocurre hay que rehacer todo el procedimiento".

"Levantar el velo"

No menos incierta se presenta la asunci¨®n de responsabilidades a la hora de resarcir las indemnizaciones que podr¨ªan acercarse a los 40.000 millones si se suman la limpieza de los vertidos, la restauraci¨®n del cauce del Guadiamar, indemnizaciones a los agricultores afectados, expropiaciones, la habilitaci¨®n de un corredor verde y las propias p¨¦rdidas de Boliden por el cese de negocio durante el paro de la mina. "En casos como ¨¦ste, donde la responsabilidad civil y su legislaci¨®n aparece difusa - no hay testigos pero s¨ª 21 imputados- la justicia tiende a culpar a un funcionario porque detr¨¢s est¨¢ el Estado, ¨²nico garante de hacer efectivas las cuantiosas indemnizaciones que dictan los tribunales", asegura un portavoz del Ministerio de Medio Ambiente.

A este departamento ha llegado recientemente un especialista en el levantamiento del velo, una t¨¦cnica jur¨ªdica desarrollada al hilo de las llamadas ingenier¨ªas financieras, cuyos m¨¢ximos adalides en Espa?a son Mario Conde o Javier de la Rosa. Mientras estos ingenieros se dedican a montar sociedades instrumentales para evadir al fisco, los especialistas en levantamiento de velo se dedican a destapar v¨ªnculos de esas sociedades fantasmas, casi siempre insolventes, hasta dar con la matriz que posee los activos para hincarle el diente fiscal.

Fuentes jur¨ªdicas pr¨®ximas al caso creen que esta tarea llevar¨¢ tiempo en el caso de Boliden. Nada m¨¢s producirse el desastre de la balsa, la p¨¢gina web en internet de esta sociedad sueco-canadiense estaba plagada de informaci¨®n sobre la empresa matriz y la filial que explota la mina de Aznalc¨®llar. La mayor parte de esos datos han desaparecido.

Seg¨²n las mismas fuentes, si la filial espa?ola no dispone de patrimonio para hacer frente a las indemnizaciones, los damnificados tendr¨¢n que pedir asesoramiento a la embajada en Canad¨¢ o buscar el concurso de un despacho local para documentar los v¨ªnculos de Boliden-Apirsa con su matriz. Nada m¨¢s producirse la cat¨¢strofe, las acciones de Boliden cayeron en picado en la bolsa de Toronto y, desde que ocurri¨® el percance, las auditor¨ªas han obligado a la sociedad a provisionar 6.000 millones de pesetas para afrontar posibles indemnizaciones. "Las incidencias de la cotizaci¨®n demuestran que el mercado ha percibido ese v¨ªnculo. Negarlo se considerar¨ªa un abuso del derecho con ¨¢nimo de defraudar o eludir responsabilidades", dice un abogado del Estado.