Cuatro pescadores gallegos muertos y dos desaparecidos en un naufragio en Gran Sol

Cuatro tripulantes del pesquero gallego Pescalanza murieron ayer al naufragar su barco en aguas de los caladeros de Gran Sol, a unas 80 millas -casi 150 kil¨®metros- al suroeste de las costas de Irlanda. Otros dos marineros de la embarcaci¨®n gallega continuaban desaparecidos a primera hora de la noche de ayer. La ayuda de urgencia prestada por otro buque de pabell¨®n franc¨¦s que faenaba en la zona permiti¨® rescatar a seis tripulantes, cinco gallegos y un gal¨¦s, con vida. Las posibilidades de hallar sanos y salvos a los desaparecidos son muy remotas, seg¨²n fuentes de los servicios de salvamento espa?oles y brit¨¢nicos que colaboraban en la b¨²squeda.

"No tenemos idea de cu¨¢l ha podido ser la causa del accidente", declar¨® un portavoz del centro de rescate mar¨ªtimo de Falmouth, en el Reino Unido. "Lo ¨²nico que sabemos es que el pesquero volc¨® muy r¨¢pidamente y termin¨® hundi¨¦ndose", agreg¨® el mismo portavoz brit¨¢nico. En el momento del naufragio del Pescalanza, las 14.35 hora espa?ola, las condiciones meteorol¨®gicas en la zona de Gran Sol eran bastante malas, con visibilidad baja y vientos de fuerza 8 (entre 62 y 74 kil¨®metros por hora).La hip¨®tesis m¨¢s probable es que el pesquero gallego sufriese el impacto fat¨ªdico de un fuerte golpe de mar y se escorase irremediablemente hasta acabar engullido por las aguas embravecidas en pocos minutos.

El Pescalanza, un barco de unos 30 a?os de antig¨¹edad, ten¨ªa su base en el puerto de Mar¨ªn (Pontevedra), de donde hab¨ªa zarpado el pasado 16 de octubre con 12 tripulantes a bordo, la mayor¨ªa de ellos vecinos de las comarcas gallegas de O Morrazo (Pontevedra) y Barbanza (A Coru?a).

El buque, de 32 metros de eslora y tres de calado, faenaba habitualmente en aguas de los caladeros de la zona del Gran Sol, entre Irlanda y Gran Breta?a. Sus campa?as de pesca duraban aproximadamente veinte d¨ªas.

Rescate

La r¨¢pida intervenci¨®n del buque Agorreta, con base en Hendaya y de pabell¨®n franc¨¦s, aunque con parte de su tripulaci¨®n espa?ola, logr¨® evitar que la tragedia fuese mayor. El Agorreta acudi¨® a la llamada de socorro que lanzaron a la desesperada los tripulantes del Pescalanza y logr¨® rescatar con vida a seis de ellos, cinco gallegos y un pescador gal¨¦s. M¨¢s tarde, los propios marineros del buque franc¨¦s fueron quienes recuperaron los cuatro cad¨¢veres de las aguas.Alertados los servicios de rescate en tierra, a la zona se desplazaron dos helic¨®pteros, uno del Reino Unido y otro de Irlanda, adem¨¢s de un avi¨®n de la Armada Brit¨¢nica, para participar en las tareas de rescate de los dos marineros desaparecidos. Al cierre de esta edici¨®n, la b¨²squeda hab¨ªa resultado infructuosa.

La noche se le ech¨® encima a los rastreadores sin que lograsen averiguar el paradero de los dos marineros desaparecidos, a los que se supone muertos. "Es muy dif¨ªcil que hayan podido mantenerse con vida", admiti¨® el portavoz del centro de rescate de Falmouth.

Por su parte, el patr¨®n del Agorreta, Jos¨¦ Manuel Santaclara, se mostr¨® tambi¨¦n muy pesimista en una conversaci¨®n por radio que sostuvo ayer tarde con la redacci¨®n de Radio Nacional de Espa?a en Galicia. "Una vez que la visibilidad ya no nos permita hacer nada m¨¢s", declar¨® Jos¨¦ Manuel Santaclara, "pondremos rumbo a Espa?a. Es posible recuperar los cuerpos si los localizamos r¨¢pido, pero las condiciones meteorol¨®gicas son bastante malas. La posibilidad de encontrarlos con vida es ya muy, muy peque?a".

Al cierre de esta edici¨®n no se hab¨ªa facilitado la identidad de ninguna de las v¨ªctimas del Pescalanza. S¨®lo se sab¨ªa con seguridad que uno de los marineros fallecidos era el maquinista del pesquero gallego, un vecino de Ribeira (A Coru?a).

La Embajada de Espa?a en Dubl¨ªn se encargar¨¢ de repatriar los cad¨¢veres y a los supervivientes, aunque se tem¨ªa que alguno de ¨¦stos tenga que recibir asistencia hospitalaria en Irlanda en lugar de poder regresar a Galicia de forma inmediata.

El pesquero Pescalanza faenaba con pabell¨®n brit¨¢nico, si bien sus propietarios son dos conocidos armadores de las localidades gallegas de Mar¨ªn y Ribeira. Muchas empresas gallegas suelen abanderar sus buques en el Reino Unido como un modo de acceder a las licencias de pesca que la Uni¨®n Europea concede a ese pa¨ªs para faenar en los abundantes caladeros de la zona del Gran Sol, donde abundan especies como la merluza, el rape, el lenguado o la cigala.

A fin de lograr un permiso brit¨¢nico, los armadores gallegos crearon una empresa en el Reino Unido, de nombre Cutlestar, con sede en la localidad de Devon, aunque descargaban habitualmente sus capturas en el puerto de Vigo