El juez Guzm¨¢n espera interrogar cara a cara al ex dictador en Chile

El futuro de la acci¨®n judicial contra Augusto Pinochet, si finalmente regresa a Chile, estar¨¢ en manos de Juan Guzm¨¢n Tapia, el juez que instruye las 11 querellas que se han presentado hasta la fecha contra el ex dictador. Con una larga experiencia en la judicatura, este magistrado de 59 a?os, hijo de poeta, est¨¢ dispuesto a interrogar al hombre m¨¢s poderoso y temible de Chile durante las ¨²ltimas d¨¦cadas. "Por mucho poder que haya tenido el se?or Pinochet, nosotros tenemos la jurisdicci¨®n y la competencia que nos da la ley. Como viejo juez que soy, no me intimida. Todo lo contrario". El juez Guzm¨¢n tiene a punto la citaci¨®n para no m¨¢s tarde de diciembre.En virtud de la vieja legislaci¨®n chilena, que se remonta a 1927, a Juan Guzm¨¢n le corresponder¨¢ algo m¨¢s que interrogar a Pinochet e instruir las causas en su contra. En primera instancia el juez ejerce la funci¨®n de fiscal, de tal manera que en esta fase "instruye, juzga y dicta sentencia, es decir, se pronuncia sobre su propia acusaci¨®n". Es un sistema que no puede considerarse muy ajustado a derecho, pero as¨ª es en Chile. Para procesar a Pinochet, el juez tiene que encontrar el delito del que se le acusa, y en segundo lugar su participaci¨®n como autor c¨®mplice o encubridor, tras lo cual tendr¨¢ que levantarle la inmunidad que le otorga el cargo de senador vitalicio. Esta decisi¨®n estar¨ªa en manos de los 25 miembros del pleno de la Corte de Apelaciones de Santiago.

La causa que instruye el juez Guzm¨¢n comenz¨® en enero pasado. "Este proceso tiene m¨¢s de 1.500 hojas. En ellas hay ejecutores, personas que han dado ¨®rdenes de fusilamiento, personas que han torturado. Creo que he interrogado a unos 30 inculpados, muchos de ellos militares y varios autores materiales de delitos". Todos ellos negaron su participaci¨®n en los hechos, a pesar de las evidencias. Es un trabajo lento, dice el juez, porque se trata de una investigaci¨®n "de m¨¢s de 3.000 delitos, casi todos incluidos en el informe Rettig". Hasta ahora no ha recibido amenazas ni presiones directas.

?C¨®mo le explicar¨ªa al mundo que no hay motivos para desconfiar de que en Chile se har¨¢ justicia con Pinochet? "En Chile la Justicia es muy buena. La situaci¨®n del se?or Pinochet es similar a la de cualquier otra persona", responde. Pero hay una ley de amnist¨ªa, que ampara los delitos cometidos entre el 11 de septiembre de 1973 al 10 de marzo de 1978, el periodo de mayores excesos represivos bajo el r¨¦gimen militar.

El juez considera que a pesar de la ley de amnist¨ªa, "ciertos hechos prevalecen y est¨¢n a¨²n pendientes". Por ejemplo, los detenidos desaparecidos de los que nada se sabe. "Se tratar¨ªa de un delito permanente que no ha prescrito ni est¨¢ cubierto por la amnist¨ªa. Por ello la acci¨®n penal contra estos delitos estar¨ªa plenamente vigente. En mi opini¨®n, la ley de amnist¨ªa no me impide investigar". El juez Guzm¨¢n investiga los 72 fusilamientos perpetrados en la denominada caravana de la muerte (octubre de 1973) a pesar de ser un caso amparado por la ley de amnist¨ªa.