Ficheros gen¨¦ticos

EL GOBIERNO prepara un proyecto de ley para regular en Espa?a la utilizaci¨®n de los an¨¢lisis de ADN (¨¢cido desoxirribonucleico) en la investigaci¨®n criminal como prueba para la persecuci¨®n de delitos sexuales y de sangre. Aunque inicialmente despert¨® grandes recelos, la creaci¨®n de ficheros gen¨¦ticos con fines de investigaci¨®n criminal se ha ido abriendo paso en los distintos pa¨ªses y ahora son ya numerosos los que han regulado su uso. La obtenci¨®n de material gen¨¦tico -que puede encontrarse en una gota de sangre, de saliva, de semen o en un simple pedacito de pelo- no deber¨ªa ser objeto de rechazo frontal. Si admitimos que se puedan tomar, a efectos de prueba, las huellas dactilares de una persona sospechosa de un crimen y luego guardarlas en unos ficheros, no hay raz¨®n para no admitir que se puedan tomar tambi¨¦n huellas gen¨¦ticas para los mismos fines. De hecho, la prueba de ADN representa para la investigaci¨®n criminal una revoluci¨®n tan importante como en su momento lo fueron las huellas dactilares, con la ventaja de que la alt¨ªsima fiabilidad del an¨¢lisis gen¨¦tico redundar¨¢ adem¨¢s en una mayor seguridad jur¨ªdica.El problema radica en que en una gota de sangre hay mucha m¨¢s informaci¨®n que la necesaria para una identificaci¨®n segura. Y que la ciencia avanza en estos momentos a una velocidad tan vertiginosa que ni siquiera podemos llegar a imaginar qu¨¦ se podr¨¢ saber o hacer en el futuro con una simple gota de nuestra sangre. Por eso, la regulaci¨®n de la prueba gen¨¦tica debe ser extremadamente rigurosa. Parece razonable que se pueda exigir en determinados casos sin el consentimiento del afectado, pero la decisi¨®n de tomar o no muestras de sangre no deber¨ªa quedar en manos de la polic¨ªa. Deber¨ªa mediar siempre un mandato judicial y no debiera recurrirse a la prueba gen¨¦tica por meros indicios indagatorios, sino por la existencia acreditada de fundamentos suficientes.

Parece l¨®gico, adem¨¢s, que se garantice la destrucci¨®n de las muestras de las personas que resulten inocentes. Tambi¨¦n deber¨ªa establecerse la exacta finalidad de los datos contenidos en el registro de huellas gen¨¦ticas, qui¨¦n puede acceder al mismo y en qu¨¦ condiciones. En definitiva, una ley tan delicada como ¨¦sta no deber¨ªa dejar ning¨²n detalle al albur de interpretaciones.