Un sacerdote italiano ayud¨® a abortar a varias prostitutas

Andrea Gallo, un sacerdote de 70 a?os que atiende el centro de acogida de toxic¨®manos de San Benedetto al Porto, en G¨¦nova, no coincide con la posici¨®n oficial de la Iglesia cat¨®lica en el aborto. El padre Gallo reconoci¨® el domingo, sin pesta?ear, que ha ayudado a numerosas prostitutas extranjeras, muchas de ellas albanesas, a abortar, d¨¢ndoles la direcci¨®n de un m¨¦dico amigo. Estas declaraciones han desatado una inmediata pol¨¦mica en la que no ha entrado todav¨ªa el cardenal de G¨¦nova, Dionigi Tettamanzi."Cuando una de estas muchachas viene y me dice: "?Ay¨²deme o, si no, mi chulo me har¨¢ abortar a patadas!", ?qu¨¦ puedo hacer? Si no quiere tener el ni?o no puedo hacer otra cosa que respetar su decisi¨®n", ha declarado Gallo.

La situaci¨®n de las prostitutas extranjeras en Italia es dram¨¢tica. La mitad de esas 50.000 mujeres son j¨®venes provenientes de Nigeria y Albania y, en menor medida, de la antigua Yugoslavia, pa¨ªses sudamericanos y del Norte de ?frica. En el boyante mercado del sexo italiano que genera unos 2,5 billones de pesetas al a?o, hay sitio para todas, pero no en todos los casos las prostitutas han escogido libremente la profesi¨®n. La prensa italiana ha denunciado m¨¢s de una vez la existencia de aut¨¦nticas mafias que secuestran a las j¨®venes en la vecina Albania someti¨¦ndolas a una penosa esclavitud.

El obispo de Loreto, Angelo Comastri, criticaba ayer d¨²ramente, atrincherado en la posici¨®n oficial de la Iglesia, la conducta de Andrea Gallo. "El aborto es una tragedia. No se debe practicar jam¨¢s. Si, adem¨¢s, el que lo aconseja es un sacerdote, la tragedia se multiplica".