Estados Unidos pide respeto a la posici¨®n que mantiene el Gobierno chileno
En la declaraci¨®n m¨¢s rotunda hasta el momento, el portavoz del Departamento de Estado norteamericano, James Rubin, afirm¨® ayer que EEUU respeta los argumentos chilenos en contra de la extradici¨®n de Pinochet. Es la primera vez que el Gobierno expresa una postura tan firme desde que el general fue detenido. "Creemos que si, como en el caso de Chile, los ciudadanos de un Estado democr¨¢tico est¨¢n luchando con la necesidad de equilibrar las exigencias de la justicia con los requerimientos de la reconciliaci¨®n, se deber¨ªa respetar de manera significativasus conclusiones".
"Estados Unidos conden¨® firmemente los abusos del r¨¦gimen de Pinochet" dijo Rubin, "pero al mismo tiempo est¨¢ comprometido firmemente con la democracia y el imperio de la ley en Chile". El portavoz a?adi¨® que estos comentarios no significan que EEUU est¨¦ "prejuzgando" el resultado del proceso legal brit¨¢nico o que est¨¦ intentando influir en la decisi¨®n final de las autoridades brit¨¢nicas sobre el proceso de extradici¨®n. "No estamos empujando el Gobierno brit¨¢nico en una direcci¨®n u otra" dijo.El portavoz tambi¨¦n aprovech¨® la oportunidad para subrayar el compromiso norteamericano con los principios de justicia internacional, representado por su apoyo a los tribunales penales internacionales creados en los casos de Ruanda y la antigua Yugoslavia, y record¨® que estos tribunales rechazan el concepto de inmunidad en los casos de cr¨ªmenes contra la humanidad. A pesar de ello, no cree que la decisi¨®n de la C¨¢mara de los Lores represente un precedente para este tipo de legislaci¨®n La Administraci¨®n norteamericana neg¨® ayer las informaciones de algunos diarios brit¨¢nicos seg¨²n las cuales est¨¢ presionando a Londres para que libere a Pinochet. La prensa local chilena especulaba ayer que la nueva estrategia del Gobierno de Eduardo Frei es apoyarse en Estados Unidos para incrementar la presi¨®n sobre Londres.
EEUU no oculta su preocupaci¨®n por la posibilidad de la detenci¨®n de Pinochet termine da?ando lo que, el pasado abril, Bill Clinton calific¨® de "brillante ejemplo" de democracia durante su visita a Chile. Otro elemento que pesa a favor del mantenimiento de la actual ambig¨¹edad norteamericana es el apoyo que el Gobierno de Richard Nixon prest¨® al sangriento golpe de Estado de Pinochet. Washington no est¨¢ todav¨ªa preparado para el ejercicio de exorcismo del pasado que demandan congresistas dem¨®cratas y grupos de derechos humanos.
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