Varios corredores del Casino, detenidos en una comisar¨ªa de Ly¨®n
Seis ciclistas del Casino franc¨¦s, seg¨²n algunas fuentes, y siete, seg¨²n otras, permanec¨ªan detenidos ayer desde el lunes en la misma comisar¨ªa de Ly¨®n en que el pasado julio fueron interrogados los corredores del Festina y por orden de la misma persona, el juez de Lille Patrick Keil, que investiga el esc¨¢ndalo de dopaje que sacudi¨® el ¨²ltimo Tour. La conexi¨®n Casino se activ¨® por las declaraciones del corredor Gilles Bouvard, que en 1997 milit¨® en el Festina.
Las informaciones procedentes de Ly¨®n eran confusas y escasas, un s¨ªntoma del secretismo que ha instalado el juez Keil en sus pesquisas y en la instrucci¨®n del sumario. S¨®lo por filtraciones de fuentes oficiosas se sabe de la detenci¨®n de los ciclistas, pero no se conocen ni el motivo ni la identidad de los detenidos, ni si est¨¢n siendo sometidos a an¨¢lisis de alg¨²n tipo. Tampoco se sabe cu¨¢ndo ser¨¢n puestos en libertad ni si acudieron a declarar voluntariamente o bajo detenci¨®n previa.El juez Keil, que mantuvo varias semanas en prisi¨®n a tres dirigentes del Festina y que orden¨® durante el Tour el registro de varios equipos, como el ONCE y La Fran?aise des Jeux, contin¨²a tirando del hilo descubierto cuando en julio fue detenido el masajista del Festina Willy Voet con un coche cargado de EPO. El Casino ya fue protagonista en los ¨²ltimos d¨ªas del Tour. Su corredor Rodolfo Massi fue detenido y apartado de la competici¨®n cuando portaba el maillot de l¨ªder de la monta?a. El juez le proces¨® acus¨¢ndole de ser un camello de productos prohibidos. Sin embargo, Keil no encontr¨® pruebas que incriminaran al resto de corredores del equipo sorpresa de 1998. De todas maneras, bajo la ley penal francesa contra el dopaje, los corredores no podr¨¢n ser perseguidos a menos que el instructor tenga pruebas de que se lucraron personalmente del dopaje.
A ra¨ªz de las investigaciones, Casino, una gran empresa de distribuci¨®n comercial (hipermercados y centros comerciales), radicada en Saint Etienne, cerca de Ly¨®n, decidi¨® que 1999 ser¨ªa su ¨²ltimo a?o en el pelot¨®n y redujo el presupuesto del conjunto, de unos 700 millones de pesetas, a la mitad. Vincent Lavenu, m¨¢nager y director del equipo, tuvo que dejar en libertad a parte de los corredores que lograron que el Casino, en el pelot¨®n desde 1996 bajo el nombre de Petit Casino, se convirtiera en 1998 en el equipo con m¨¢s victorias de la temporada y segundo en el r¨¢nking de la UCI.
El conjunto franc¨¦s consigui¨® 66 victorias en la temporada, cinco m¨¢s que el Mapei, considerado el dream team, y 29 m¨¢s que el Banesto, el mejor equipo espa?ol. Su sprinter estonio Jan Kirsipuu, con 16 triunfos individuales, fue el corredor n¨²mero uno de la temporada. Voet no cree a Virenque Mientras tanto, Richard Virenque, el l¨ªder del Festina, sigue acaparando los titulares. Ayer opin¨® sobre su anuncio de retirada Willy Voet, su masajista de confianza en los ocho a?os en que ha permanecido en el profesionalismo. "Para m¨ª, ese anuncio es un bluff", declar¨® en el diario suizo Le Temps, Voet, quien no se ha cansado de acusar a Virenque de tomar parte en las pr¨¢cticas de dopaje organizadas por el Festina. "Curiosamente, Richard anuncia su retirada, pero al mismo tiempo sigue entren¨¢ndose. No lo entiendo".
La amistad entre Voet y Virenque se rompi¨® s¨²bitamente cuando el masajista decidi¨® confesar de plano al juez Keil para salir de la c¨¢rcel. "Es una jugada de p¨®ker", a?adi¨® Voet. "En todo caso, espero por el bien suyo que no sea m¨¢s que una llamada de socorro. Richard est¨¢ mal aconsejado. S¨®lo ha sabido negar todos los cargos, no ha pensado m¨¢s que en s¨ª mismo".
Ning¨²n equipo del mundo se ha mostrado dispuesto a fichar a Virenque, de 29 a?os, por miedo a la publicidad negativa que conllevar¨ªa su presencia y a la incertidumbre que rodea su futuro en el deporte.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.