F¨²tbol y barbarie

Quisiera expresar y compartir la enorme indignaci¨®n y verg¨¹enza que el pasado d¨ªa 8 sent¨ª al conocer el cobarde, brutal y odioso apu?alamiento de Aitor Zabaleta. Esta barbaridad ha sido la gota que ha colmado mi paciencia y ha hecho que pierda el inter¨¦s que a¨²n ten¨ªa (a pesar de todo) por el f¨²tbol y por el Atl¨¦tico de Madrid. Cuando encend¨ª el televisor para ver el partido y me enter¨¦ de la terrible noticia se me quitaron por completo las ganas que hab¨ªa tenido de asistir a un partido potencialmente emocionante y bello. A pesar de mi asco, decid¨ª ver los primeros minutos con la esperanza no de ver un buen partido (ya eso era imposible), sino de asistir, al menos, a una reacci¨®n digna, ya de sea de los espectadores (por ejemplo, abandonando el estadio) o de los jugadores (neg¨¢ndose a celebrar los goles). Tras el primer gol del partido, al comprobar que todo parec¨ªa seguir como si nada, sent¨ª una profunda tristeza y la necesidad de apagar el televisor.Entiendo que s¨®lo se le puedan pedir responsabilidades directas de la barbaridad cometida al asesino que la cometi¨® f¨ªsicamente, pero tambi¨¦n es cierto que a Aitor Zabaleta no se le hubiera asesinado si ¨¦l o su novia no fueran aficionados de la Real Sociedad y si no se fomentara la locura colectiva, a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n, por aquellos que se benefician econ¨®micamente de las pasiones generadas. Ser¨ªa indigno y repugnante que el mundo del f¨²tbol decidiera simplemente lamentar el hecho y pasar p¨¢gina. A no ser que se produzca una reacci¨®n espectacular y sin precedentes de dirigentes, aficionados, periodistas, etc¨¦tera (similar en estilo y esp¨ªritu a la reacci¨®n producida tras el asesinato de Miguel ?ngel Blanco), no pienso volver a interesarme en absoluto por el f¨²tbol. Animo a todos los que lean esta carta (aunque les duela porque les guste el buen f¨²tbol) a que hagan lo mismo. El f¨²tbol o es un deporte o no es nada de nada. ?Basta ya de barbarie!-