Los expertos en lince ib¨¦rico defienden la creaci¨®n de corredores ecol¨®gicos para la dispersi¨®n de la especie
Investigadores y expertos que participan este fin de semana en Huelva en una jornadas para analizar la situaci¨®n del lince ib¨¦rico en Andaluc¨ªa han defendido la necesidad de crear corredores ecol¨®gicos que vertebren las zonas linceras. Estas zonas facilitar¨¢n la dispersi¨®n del felino m¨¢s amenazado del mundo y garantizar¨¢n as¨ª la supervivencia de la especie. El bi¨®logo de la Estaci¨®n Biol¨®gica de Do?ana (EBD) Francisco Palomares explic¨® que la dispersi¨®n "es un proceso clave para la persistencia del lince ib¨¦rico", que tiene en el entorno del espacio protegido una de sus principales poblaciones, con unos 50 ejemplares. "Sin embargo", a?adi¨®, "uno de los problemas que frena este proceso natural es la fragmentaci¨®n de los h¨¢bitats en los que se desenvuelve la especie, de forma que existen manchas de vegetaci¨®n natural intercaladas con otras de cultivos y ¨¢reas inh¨®spitas para el felino, que suponen barreras infranqueables porque est¨¢n separadas en m¨¢s de cinco kil¨®metros". Esta distancia es la m¨¢xima, seg¨²n los investigadores, que son capaces de recorrer los linces sin la cobertura y la protecci¨®n de vegetaci¨®n. Seg¨²n Palomares, el aumento de las tasas de dispersi¨®n entre las subpoblaciones "aumenta igualmente las probabilidades de superviviencia de la especie", por lo que recomend¨® la creaci¨®n de corredores ecol¨®gicos para conectar estas subpoblaciones. Teniendo en cuenta los puntos negros que amenazan la vida del lince en el entorno de Do?ana que, en definitiva, son todos los que se salen del ¨¢rea protegida, los investigadores proponen abrir estos corredores entre los arroyos de La Rocina y las Madres, y abrir pasillos hacia el arroyo de Pilas y Sierra Morena. Adem¨¢s, el investigador de la Estaci¨®n Biol¨®gica se?al¨® que la supervivencia del lince ib¨¦rico, cuya poblaci¨®n se ha visto reducida en casi un 50% en los ¨²ltimos diez a?os, depende tambi¨¦n de favorecer los h¨¢bitats forestales que tengan manchas densas de matorral y conseguir que la distancia entre ¨¦stos no sea superior a los cinco kil¨®metros, as¨ª como de la construcci¨®n de pasos subterr¨¢neos en las carreteras de tr¨¢fico elevado y adoptar medidas para erradicar la mortalidad no natural del lince durante el proceso de dispersi¨®n. En este sentido, Miguel Delibes, ex director de la Estaci¨®n Biol¨®gica de Do?ana, recalc¨® que la causa de mortalidad m¨¢s habitual es "la salida del espacio protegido" como consecuencia del tr¨¢fico, los cepos y los venenos. "El mayor riesgo, si no se llevan a cabo los corredores ecol¨®gicos, es la p¨¦rdida de variabilidad gen¨¦tica que puede llevar a disminuir la capacidad del sistema inmunol¨®gico de los animales y afectar a las cr¨ªas", a?adi¨®. Respecto a la existencia de focos de tuberculosis en el Parque de Do?ana y a la afecci¨®n de la enfermedad en el lince, que ha causado ya la muerte de un ejemplar y se han detectado anticuerpos en un segundo individuo, Delibes se?al¨® que es un peligro real por tratarse de una poblaci¨®n tan peque?a. En este punto, record¨® la propuesta presentada hace m¨¢s de un mes, reclamando como "imprescindible" la realizaci¨®n de un estudio en profundidad.
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