Gunilla, reci¨¦n llegada de M¨®naco
A Gunilla -oficialmente reside en M¨®naco, pero habitualmente para en Marbella-, la von Bismarck de pelo espeluznante y labios tan cruelmente rojos como el culo de las hembras de mandril en la ¨¦poca de celo, podemos contemplarla en el Hola y el Diez Minutos y el Lecturas y el Semana y El Maki Navaja asistiendo a la gala pro desdentados de las Islas Kuriles (20 horas p.m.), casi al mismo tiempo que cena a beneficio de las santeras violadas de Camag¨¹ey (20 horas y 5 minutos p.m.), bebe una copa de champagne -es cava, pero no hay que joder- a la salud de los damnificados por la ola de erotismo en Albolote (20 horas y 10 minutos p.m.) y abre con un billete de doscientas pesetas -prestadas por un veterano gigol¨® de Puerto Ban¨²s, que todav¨ªa las debe en varios locales de la costa- la cuestaci¨®n anual en favor de las torcaces abatidas en Medina del Campo. Todo desde M¨®naco y en el Marbella Club, todo sea por los seres menesterosos del mundo y a la hora que sea, pero siempre desde M¨®naco y en Marbella. Porque Gunilla vive, oficialmente y a efectos de escaquearse de la hacienda p¨²blica espa?ola, en M¨®naco; por eso va y viene, d¨ªa s¨ª y d¨ªa tambi¨¦n, entre Marbella y M¨®naco y viceversa. O sea que todas las ma?anas (7 horas a.m.) embarca en el vuelo de Iberia que hace la l¨ªnea M¨®naco-Marbella, para volver (23 horas y 30 minutos p.m.) en el Marbella-M¨®naco de la noche. En ocasiones, no obstante, vuela varias veces en el mismo d¨ªa. Resulta agotadora tanta ternura para con el pr¨®jimo. Gunilla es entrevistada en la tele municipal de Marbella -F¨¦lix Bay¨®n, desde su columna de los viernes, le dedicaba a este medio (y quisiera yo tambi¨¦n subrayar lo de medio) el homenaje de su cari?o carcajeante- por uno de los actores de desecho recogidos en Telegil para gloria del periodismo teledirigido. Pregunta: ?Cu¨¢l es su opini¨®n, Gunilla, Gunilla Sevilla, del por qu¨¦ se ha detenido a nuestro alcalde, don Jes¨²s Gil? (Luis Ortiz -El Pesca¨ªlla de Gunilla- yace junto a esta Lola albina, los ojos inyectados en Larios, impecablemente despeinado a lo I?aki Anasagasti). Respuesta: Pegrro bueno, qu¨¦ tonterr¨ªa. Si yo soy Gunilla Sevilla, ?qui¨¦n serr¨¢ Carrmen von Bismarck? Estoy rre?iente llegada de M¨®naco, pogrrque vengo a acopagnarr a Jes¨²s, siemprre con Jes¨²s parra lo que sea prre?iso. Y por precisar, dicen tanto en M¨®naco como en Marbella que, reci¨¦n comenzado el mandato de Gil, la nieta de Otto von Bismarck (aquel se?or con bigote a lo Pancho Villa, casco con pincho y Canciller de Hierro del Reich) necesit¨® la recalificaci¨®n municipal de ciertos terrenos que esta ciudadana monegasca, y habitual de Marbella, pose¨ªa en el municipio giloso y que le urg¨ªa vender. Ni morena ni perezosa, Gunilla pidi¨® el favor al alcalde y sus terrenos fueron recalificados. A la par que la alcald¨ªa de Marbella, Gunilla fue objeto en carne propia de otra recalificaci¨®n: la de la hacienda espa?ola -somos todos-, que se la montaba bas¨¢ndose en la ausencia de declaraciones de la renta por parte de la recalificada. Gunilla esgrim¨ªa su condici¨®n de residente monegasca pero habitual de Marbella, y Hacienda que nones. Incluso se revisaron las agendas de los veterinarios marbell¨ªes para averiguar con cu¨¢nta frecuencia acud¨ªan a sus consultas los perros de Gunilla, pesquisa que tampoco pudo demostrar, a efectos fiscales, el marbellismo residencial de la nieta del Canciller del Reich, que, como es sabido, pernocta en M¨®naco y desayuna en Marbella, justo cuando el avi¨®n de todos los d¨ªas la deja, a la hora de los churros y el Cola-Cao, en la puerta de su casa del rebalaje marbell¨ª. Ahora, con el jefe empitonado por la justicia, tengo frente a mis ojos una foto de Gunilla, reci¨¦n llegada de M¨®naco, encabezando una manifestaci¨®n de apoyo a Jes¨²s Gil (mil personas, contando a los improvisados periodistas-galanes subvencionados del Telegil) frente a la c¨¢rcel de Alhaur¨ªn. Junto a ella, y sosteniendo la misma pancarta, aparece un tipo disfrazado de s¨ª mismo, Jorge Cabezas, que fuera gobernador civil puesto por el PP en M¨¢laga -aquel negrero que drogaba a los inmigrantes para meterlos en un avi¨®n y desparramarlos por ?frica- y que pudiera ser el candidato del GIL a la alcald¨ªa malague?a en las pr¨®ximas municipales (del mismo modo que Dud¨² -el esp¨ªa doble que termin¨® cant¨¢ndole la gallina a Hassan II- ir¨¢ por las listas del GIL en Melilla). Un poco m¨¢s all¨¢, est¨¢ la figura destartalada de un conocido vejete con pinta de s¨¢tiro y de padrino -jo, tengo una memoria para el hampa- que sonr¨ªe fum¨¢ndose un puro. Gunilla, insisto, acaba de llegar precipitadamente de M¨®naco para esta manifestaci¨®n justiciera. Se le nota en la foto, porque est¨¢ desmaquillada, cubierta por una bufanda-skijama y con Luis Ortiz -bru?ido en Larios, como siempre- apalancado a su espalda, guard¨¢ndole la grupa (caballero espa?ol viendo la Semana Santa). Cuentan que Iberia, en estos d¨ªas de c¨¢rcel, hospital y pre infarto, ha multiplicado por cuatro sus vuelos M¨®naco-Marbella y viceversa. Despu¨¦s de todo, residir oficialmente en M¨®naco, vivir en Marbella, escaquearse de Hacienda, salir en el Hola durante la cena y el carajillo de cava y ser entrevistada por M¨¢ximo Valverde para la televisi¨®n de Gil, s¨®lo puede hacerlo Gunilla von Bismarck. ?Perder¨¢ con tanto traj¨ªn los restos de antigua fealdad que a¨²n conserva en perfecto estado de momificaci¨®n? Ya veremos. JUVENAL SOTO
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