La designaci¨®n de Arenas como secretario general del PP obliga a Aznar a reajustar el Gobierno

El nombramiento del ministro de Trabajo, Javier Arenas, como candidato a la secretar¨ªa general del PP ha originado el primer reajuste de Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, quien ha tratado de limitarlo en lo posible, sin alterar la l¨ªnea pol¨ªtica de su Gabinete y con el prop¨®sito de evitar agravios gratuitos entre sus colaboradores. La compensaci¨®n de Aznar al coordinador general del PP, ?ngel Acebes, que entrar¨¢ en el Ejecutivo al frente de la cartera de Administraciones P¨²blicas, ha originado movimientos adicionales. Su titular, Mariano Rajoy, ser¨¢ ministro de Educaci¨®n y Cultura y Esperanza Aguirre presidir¨¢ el Senado. Aguirre cubrir¨¢, a su vez, el hueco de otro nombramiento del partido, el de Juan Ignacio Barrero como candidato a la Junta de Extremadura. El c¨ªrculo se cerrar¨¢ con el nombramiento de Manuel Pimentel, n¨²mero dos de Arenas, como ministro de Trabajo.En definitiva, han salido dos ministros -Arenas y Aguirre-, han entrado dos -Acebes y Pimentel- y se ha movido uno -Rajoy-. Un cambio m¨ªnimo, motivado por razones de partido ajenas al funcionamiento del Gobierno. El portavoz del Ejecutivo, Josep Piqu¨¦, puso ¨¦nfasis ayer, en la declaraci¨®n gubernamental que ley¨® en La Moncloa, en que los cambios del Gabinete son consecuencia de la cobertura de vacantes motivadas por nombramientos en el partido.

La sustituci¨®n de Francisco ?lvarez Cascos al frente de la secretar¨ªa general del PP ha llevado a Aznar a optar por una crisis de m¨ªnimas dimensiones. El presidente no ha querido aprovechar los cambios a que le obligaba el XIII Congreso Nacional del PP para realizar un lavado de la imagen de su Gobierno, en paralelo a su pretensi¨®n de "centrar" el partido, con la salida de los ministros m¨¢s pol¨¦micos y desgastados de su Gabinete, como el titular de Fomento, Rafael Arias-Salgado; la de Justicia, Margarita Mariscal de Gante, y la de Medio Ambiente, Isabel Tocino. Todos ellos, incluido el vicepresidente primero, Francisco ?lvarez Cascos, siguen en sus puestos. Ayer, desde las instancias del Ejecutivo y del partido, se negaban a calificar el cambio de Gabinete como una "crisis" y trataban de acu?ar el t¨¦rmino de "simple reajuste".

La principal clave de la primera remodelaci¨®n de Gobierno de Aznar reside en la necesidad del presidente de potenciar el partido al hilo de su XIII Congreso y de la proximidad de la cadena de elecciones municipales, catalanas y generales con un nuevo secretario general con voz y peso. Ha optado por el ministro de Trabajo, Javier Arenas, un hombre originario de la Uni¨®n del Centro Democr¨¢tico (UCD) que se ha ganado una imagen centrista en la gesti¨®n de su cartera, en la que ha alcanzado pactos con los sindicatos. Aznar quiere al frente del partido, en estos momentos, a un pol¨ªtico con imagen potente, de centro, con capacidad de pol¨¦mica, al que le corresponder¨¢ dar respuesta al PSOE y a su candidato, Jos¨¦ Borrell, para as¨ª dejar las manos m¨¢s libres al Ejecutivo.

Siguiendo la l¨ªnea de los cambios m¨ªnimos, Aznar ha sustituido a Arenas por su n¨²mero dos, Manuel Pimentel, andaluz como ¨¦ste y hasta ahora secretario general de Empleo.

Pero Aznar tampoco ha querido crearse agravios innecesarios entre sus colaboradores y ha optado por que todos los cambios sean compensados, con la ¨²nica excepci¨®n del presidente del Senado, Juan Ignacio Barrero. As¨ª, al coordinador general del PP, ?ngel Acebes, que con el nombramiento de Arenas como secretario general pod¨ªa sentirse postergado, le ha designado ministro de Administraciones P¨²blicas. Acebes fue nombrado coordinador general del partido en mayo de 1996 al pasar ?lvarez Cascos a la vicepresidencia primera del Gobierno.

El ascenso de Acebes, compensado con un ministerio, ha originado el traslado de un ministro de peso, como Mariano Rajoy, de Administraciones P¨²blicas (MAP) a Educaci¨®n y Cultura. Tiene su l¨®gica. Rajoy hab¨ªa culminado pr¨¢cticamente su gesti¨®n al frente del MAP. Todos sus proyectos de reforma, con la excepci¨®n de la Ley de la Funci¨®n P¨²blica, estancada por la ausencia de acuerdo con el PSOE, ya estaban cumplidos. Sin embargo, desde el Ministerio de Educaci¨®n y Cultura, otro organismo pol¨ªtico, le corresponder¨¢ gestionar los traspasos educativos a las comunidades aut¨®nomas, que culminan este a?o. El c¨ªrculo lo completa el nombramiento de la ministra de Educaci¨®n y Cultura, Esperanza Aguirre, como presidenta del Senado, la cuarta instituci¨®n del Estado. Aguirre sustituye a Juan Ignacio Barrero, designado como candidato por el PP a la presidencia de la Junta de Extremadura para competir con el presidente socialista, Juan Carlos Rodr¨ªguez Ibarra, en las elecciones auton¨®micas de junio.

Barrero, un hombre muy pr¨®ximo a ?lvarez Cascos, no quer¨ªa abandonar la presidencia del Senado, pero, desde su nombramiento en mayo de 1996, ya le hab¨ªa advertido Aznar de que su cargo era una plataforma de lanzamiento para competir, en 1999, por la presidencia de Extremadura.

Los nombramientos se publicar¨¢n hoy en el Bolet¨ªn Oficial del Estado (BOE) y los nuevos ministros tomar¨¢n posesi¨®n de sus cargos ma?ana, mi¨¦rcoles.