Saura y los grupos parlamentarios quieren tener la ¨²ltima palabra

VIENE DE LA P?GINA 1 El S¨ªndic de Greuges, Luis Fernando Saura, sostiene que evitar¨¢ susceptibilidades si la Mesa de Peticiones de las Cortes Valencianas propone dos candidatos, uno por el PP y otro por el PSPV, y es ¨¦l quien decide si son adecuados, y no al rev¨¦s. Con este m¨¦todo persigue tambi¨¦n equilibrar la instituci¨®n. "El nombramiento de los adjuntos debe realizarse con un di¨¢logo a varias bandas y debe ser el resultado de un consenso de voluntades", expone. En las Cortes, sin embargo, ninguno de los dos grupos pol¨ªticos mayoritarios parece, no ya dispuesto a elegir a su candidato, sino que esperan conocer la decisi¨®n de Saura al respecto. "Es el S¨ªndic quien debe proponer los nombres", responden en el PSPV ateni¨¦ndose al reglamento. "En el grupo nadie sabe nada de eso, y ni siquiera se est¨¢ trabajando en la elaboraci¨®n de una lista de posibles aspirantes", notifica el PP. El nombramiento de los dos adjuntos generar¨¢ un efecto domin¨® de contrataciones, ya que inmediatamente despu¨¦s ¨¦stos deber¨¢n elegir a sus secretarios y asesores, siempre con el visto bueno de Saura. Despu¨¦s, se contratar¨¢n los trabajadores necesarios para cada departamento. Como m¨ªnimo, diez personas en puestos tan distantes como la direcci¨®n econ¨®mica y la ventanilla de atenci¨®n al p¨²blico. El S¨ªndic es tan celoso de su independencia que ni siquiera est¨¢ dispuesto a contratar a los dos administrativos que necesita mientras no se produzca el nombramiento de los adjuntos. Pese a que fue aceptado por mayor¨ªa reforzada en las Cortes, fue propuesto por el PP y sabe que hay quien observa con lupa sus movimientos y no desea que la instituci¨®n se vea envuelta en pol¨¦micas partidistas. Lo cual no quiere decir que se conforme con la situaci¨®n actual. "Personalmente, soy consciente de que la instituci¨®n no puede funcionar a media m¨¢quina", apunta. Apertura de delegaciones El S¨ªndic es una instituci¨®n relativamente nueva y el principal reto de Saura es acercarla a los ciudadanos y dar a conocer sus posibilidades. Para lo primero, estudiar¨¢ abrir delegaciones en Valencia y Castell¨®n para facilitar la presentaci¨®n de quejas y denuncias en estas dos provincias. Para lo segundo, eval¨²a los pros y los contras de contar con un responsable de relaciones con los medios de comunicaci¨®n en la sede central de Alicante. Dos proyectos, como muchos otros, congelados hasta que alguien, sea Saura o las Cortes, se decida a proponer los nombres de los ayudantes del defensor del pueblo valenciano. Mientras tanto, el calendario juega en contra de que se desatasque la situaci¨®n, puesto que s¨®lo quedan cinco meses para la celebraci¨®n de las elecciones auton¨®micas y los dos partidos mayoritarios parecen estar m¨¢s enfrascados por el d¨ªa a d¨ªa de las Cortes en funci¨®n de la campa?a electoral.