Alicante reducir¨¢ las zonas arqueol¨®gicas de la ciudad ante la presi¨®n de los promotores
Las protestas de los promotores han surtido efecto. El Ayuntamiento de Alicante, gobernado por el PP, reducir¨¢ las zonas arqueol¨®gicas de la ciudad, declaradas como tales en un decreto municipal de 1987. La medida dejar¨¢ m¨¢s espacio para construir y abaratar¨¢ los costes de las obras a los promotores, a quienes ahora se obliga a sufragar los gastos de las excavaciones previas al inicio de las construcciones. El departamento de Urbanismo ya ha encargado la redacci¨®n de un plan especial que fije cu¨¢les deben ser las ¨¢reas sujetas a protecci¨®n arqueol¨®gica. S¨®lo las construcciones y demoliciones que se encuentren en el ¨¢mbito delimitado en este plan requerir¨¢n informes arqueol¨®gicos.
Casco antiguo, barrio Benal¨²a y alrededores de la estaci¨®n de autobuses, monte Benacantil y castillo de Santa B¨¢rbara, L"Albufereta, Cabo de las Huertas y Condomina-Orgegia, son en la actualidad las ¨¢reas protegidas, seg¨²n una resoluci¨®n que eman¨® del gobierno del ex alcalde socialista Jos¨¦ Luis Lassaletta. En teor¨ªa, cualquier licencia de obras solicitada para edificar en estas zonas debe comunicarse al t¨¦cnico municipal de conservaci¨®n del patrimonio hist¨®rico-art¨ªstico para que ¨¦ste informe de los trabajos arqueol¨®gicos previos al inicio de las obras. En la pr¨¢ctica, los informes a menudo no llegan a tiempo, y el Ayuntamiento se ve obligado en muchos casos a conceder los permisos por acto presunto, figura legal que permite al promotor iniciar las obras si no recibe respuesta municipal en dos meses. Desde mediados de diciembre de 1998 hasta ahora, se han concedido al menos cuatro licencias por v¨ªa del silencio administrativo, a pesar de conocerse que algunas de ellas ocasionar¨¢n la destrucci¨®n de los restos arqueol¨®gicos subyacentes, seg¨²n advirti¨® el arque¨®logo en los informes que obran en los expedientes. La nueva ordenanza que regular¨¢ la concesi¨®n de licencias de obras, pendiente a¨²n de aprobar por el pleno, s¨®lo exigir¨¢ informes arqueol¨®gicos a aquellas construcciones o demoliciones que se encuentren en el ¨¢mbito delimitado por el futuro plan especial, encargado al arquitecto Marius Bevi¨¤. En estos casos ser¨¢ preceptivo incorporar al expediente el informe del departamento municipal con competencias en arqueolog¨ªa. La Ley del Patrimonio Valenciano establece que los ayuntamientos podr¨¢n delimitar las ¨¢reas con posibilidad de contener restos arqueol¨®gicos. Las acotaciones deben hacerse por t¨¦cnicos competentes en arqueolog¨ªa o paleontolog¨ªa y se elevar¨¢n a la Conselleria de Cultura, Educaci¨®n y Ciencia para su aprobaci¨®n. Si la Administraci¨®n auton¨®mica da el visto bueno pasar¨¢n a considerarse ¨¢reas de protecci¨®n arqueol¨®gica y, como tales, incluidas en el cat¨¢logo de bienes y espacios protegidos de cada municipio. El concejal de Urbanismo, Jos¨¦ Ram¨®n Garc¨ªa, declar¨® ayer que los informes arqueol¨®gicos est¨¢n paralizando muchas licencias. El plan especial contribuir¨¢ a desbloquear la concesi¨®n de permisos de obras y "ayudar¨¢ a que zonas de inter¨¦s arqueol¨®gico est¨¦n defendidas y conservadas". Sin duda, L"Albufereta es la zona donde m¨¢s restos han aflorado, y en la que los promotores tienen m¨¢s dificultades para construir. All¨ª han aparecido asentamientos prehist¨®ricos (edad de bronce), ib¨¦ricos, romanos y musulmanes. Los retrasos en la concesi¨®n de licencias, las modificaciones de los proyectos y, en algunos casos, la prohibici¨®n de construir son los principales problemas a los que se enfrentan los constructores. Algunos de ellos han reclamado al Ayuntamiento indemnizaciones millonarias. El nuevo plan reducir¨¢ el entorno protegido en el barrio de Benal¨²a, donde se hay asentamientos romanos. Tambi¨¦n se exhumaron restos de villas industriales, f¨¢bricas de vidrio y vertederos. Las ¨²ltimas excavaciones se han realizado en la calle Alona.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.