El Ej¨¦rcito no podr¨¢ cubrir todas las plazas de tropa profesional por falta de candidatos

El Ej¨¦rcito no podr¨¢ cubrir las 5.800 plazas de tropa y mariner¨ªa profesional convocadas en enero pasado por falta de candidatos suficientes. Las 12.538 solicitudes presentadas suponen 2,16 por puesto, la proporci¨®n m¨¢s baja desde que en 1993 se inici¨® la recluta de tropa profesional. Pero las peticiones no se reparten de modo uniforme: mientras la Fuerza A¨¦rea cuenta con 16 solicitudes por puesto y la Armada con 3,49, el Ej¨¦rcito de Tierra s¨®lo ha recibido 1,87. La falta de aspirantes puede poner en riesgo la profesionalizaci¨®n de las Fuerzas Armadas, seg¨²n el PSOE.

Las 5.800 plazas convocadas no podr¨¢n cubrirse con la cifra de aspirantes que se ha presentado, seg¨²n las fuentes consultadas. En torno al 25% de los candidatos quedan eliminados en el examen de cultura general, el test psicot¨¦cnico, las pruebas f¨ªsicas y el reconocimiento m¨¦dico. O no firman el compromiso al t¨¦rmino del per¨ªodo de instrucci¨®n. Adem¨¢s, aunque se utiliza a efectos estad¨ªsticos la proporci¨®n de aspirantes por plaza, se trata de un dato orientativo, pues muchos aprobados renuncian a enrolarse si no se les concede el destino concreto que han pedido, normalmente en su localidad de residencia.Ya en anteriores convocatorias quedaron plazas vacantes, pero normalmente no pasaron del 10% y en esta ocasi¨®n podr¨ªan llegar hasta el 40%, al menos en el Ej¨¦rcito de Tierra. En t¨¦rminos relativos, la proporci¨®n de candidatos es la peor que se ha producido nunca y, en cifras absolutas, la menor desde 1995, con excepci¨®n de la segunda convocatoria de 1997.

Este resultado se produce tras una intensa campa?a de publicidad, iniciada el pasado junio, en la que el Ministerio de Defensa ha invertido 1.600 millones de pesetas. Adem¨¢s, este a?o es clave para que el Gobierno pueda cumplir su objetivo de suprimir el servicio militar obligatorio antes del 31 de diciembre del 2002. Su cumplimiento requiere la contrataci¨®n de 17.500 nuevos soldados profesionales, 5.000 m¨¢s que en 1998. Para ello se propone realizar cuatro convocatorias, una m¨¢s de lo habitual, lo que supondr¨¢ un aumento en el porcentaje de repetidores.

Pregunta a Serra

El portavoz del PSOE en la Comisi¨®n de Defensa, Pedro Moya, expres¨® ayer su "alarma" y "seria preocupaci¨®n" por el mal resultado de la convocatoria. "Si se mantiene la tendencia decreciente en el n¨²mero de aspirantes, pudiera ponerse en riesgo el proceso de profesionalizaci¨®n de las Fuerzas Armadas", afirm¨®. "Incluso si se consiguieran cubrir las plazas, podemos tener serios problemas de calidad del personal, ya que la falta de candidatos suficientes para efectuar una buena selecci¨®n podr¨ªa llevar a admitir a personas cuyo talante no es el m¨¢s adecuado para la profesi¨®n militar", agreg¨®. El Grupo Socialista present¨® ayer una pregunta urgente al ministro de Defensa, Eduardo Serra, para que informe en el Congreso sobre las razones que explican esta situaci¨®n. A juicio de Moya, lo sucedido "obedece, al margen de las propias dificultades del proceso, a un problema de gesti¨®n. Algo est¨¢ fallando para que se produzcan estos datos y m¨¢s cuando coinciden con una campa?a publicitaria que el Gobierno hab¨ªa presentado como decisiva para estimular la presentaci¨®n de aspirantes", concluy¨®.

El Ministerio de Defensa difundi¨® el mi¨¦rcoles por la tarde una nota en la que reconoc¨ªa que "la cifra es algo inferior a la de anteriores convocatorias". No obstante, agregaba que "conviene contemplar los altibajos con naturalidad y con perspectiva a medio plazo". La nota citaba dos motivos para justificar el escaso eco de la oferta de empleo: por primera vez se ha hecho una convocatoria adicional en enero "y, adem¨¢s, los solicitantes han tenido que cumplir un nuevo tr¨¢mite administrativo que dificultaba grandemente la llegada de solicitudes".

Dicho tr¨¢mite administrativo, que no se ha estrenado ahora sino en marzo del a?o pasado, consiste en el pago de 1.500 pesetas en concepto de derechos de examen. Hacienda impuso a Defensa el pago de esta tasa en la Ley de Acompa?amiento de los Presupuestos de 1997, a pesar de que ya entonces pod¨ªa preverse que los beneficios econ¨®micos ser¨ªan m¨ªnimos, mientras que el nuevo tr¨¢mite podr¨ªa desanimar a muchos j¨®venes de presentarse. Pese a ello, Defensa consigui¨® acabar el a?o 1998 con 3,07 solicitudes por plaza, la proporci¨®n m¨ªnima necesaria para efectuar una selecci¨®n, seg¨²n ha declarado el propio ministro Eduardo Serra. En parte, lo logr¨® gracias al fuerte aumento de la afluencia de mujeres. Ahora, aunque se han presentado 2.569, el 20% del total, no ha bastado para paliar la ca¨ªda de aspirantes masculinos.

En comparaci¨®n con cualquier otra oferta de empleo p¨²blico, el eco de las convocatorias de tropa profesional es baj¨ªsimo. Aunque tambi¨¦n la Guardia Civil ha registrado una fuerte reducci¨®n de las solicitudes para ingresar en el Escala B¨¢sica de Cabos y Guardias, que han pasado de 12.027 a 8.077 en los tres ¨²ltimos a?os, el hecho de que las plazas ofertadas sean muchas menos, entre 970 y 1.370 anuales, le permite mantener una proporci¨®n de m¨¢s de seis aspirantes por puesto.

El plazo de presentaci¨®n de instancias para la tropa profesional concluy¨® el pasado 4 de febrero, pero la difusi¨®n oficial de los datos se demor¨® hasta el d¨ªa 10, en la esperanza, no fundada, de que las solicitudes remitidas por correo mejorar¨ªan sustancialmente el resultado. Defensa ha convocado una nueva campa?a publicitaria para captar soldados por un importe a¨²n mayor que la anterior: 1.950 millones de pesetas.