M¨¢s simb¨®lico que bello

ROBERTO R. DE HUYDOBRO Acaba de inaugurarse oficialmente el Palacio Euskalduna de Congresos y de la M¨²sica. El proyecto arquitect¨®nico que en su d¨ªa fue elegido para darle forma presentaba, como explica el dossier t¨¦cnico del mismo, "la soluci¨®n m¨¢s ambiciosa, sugerente e imaginativa" dentro de los requisitos fundamentales que el edificio deb¨ªa cumplir y dotaba al edificio de un "gran car¨¢cter simb¨®lico y fuerza expresiva que lo ligaban a la memoria hist¨®rica del lugar". He seguido su construcci¨®n con inter¨¦s. Cada cierto tiempo, me acercaba a la obra para ver c¨®mo se iba conformando la silueta definitiva del edificio. Sab¨ªa que tendr¨ªa la forma de un barco en construcci¨®n, y hab¨ªa visto una maqueta del proyecto, pero las dimensiones reales de una cosa pueden cambiar la impresi¨®n que producen unos planos o una maqueta. Una vez finalizada la construcci¨®n, confieso que, si bien su tama?o es un poco impresionante, la figura resultante no me provoca suspiros de admiraci¨®n. Por cercan¨ªa, podr¨ªa comparar el palacio con su vecino m¨¢s ilustre, el Museo Guggenheim, pero el resultado de la misma lo dejar¨ªa en demasiada desventaja. Esp¨ªritu del Bilbao mar¨ªtimo No es un edificio especialmente bello, pero ciertamente tiene un "gran car¨¢cter simb¨®lico". Dada su ubicaci¨®n, pr¨®xima a la r¨ªa bilba¨ªna (surcada por buques mercantes hasta hace poco), y ocupando el lugar donde se encontraba el astillero Euskalduna (el palacio toma su nombre), nada mejor que una construcci¨®n que recuerda a un barco (con el casco oxidado) para simbolizar el esp¨ªritu del Bilbao mar¨ªtimo. El Palacio Euskalduna es un barco anclado para siempre en el coraz¨®n de Bilbao. En sus bodegas tiene un cargamento cultural perenne de especialidades congresuales y musicales. Independientemente de su belleza (o falta de ella) y su simbolog¨ªa, lo verdaderamente importante es su finalidad cultural. Su meta es convertirse en foro ideal para la celebraci¨®n de grandes congresos y ser el espacio m¨¢s adecuado que d¨¦ respuesta a la enorme afici¨®n que existe en Vizcaya por la m¨²sica (ser¨¢ la sede de la Orquesta Sinf¨®nica de Bilbao). El Palacio Euskalduna nace con grandes expectativas -aunque con la competencia interna, especialmente en la oferta congresual, del Palacio de Congresos Kursaal de San Sebasti¨¢n, que se inaugurar¨¢ este pr¨®ximo verano, y el Palacio de Congresos Europa de Vitoria, en servicio desde 1989-, pero tambi¨¦n con una sombra: est¨¢ previsto que sea deficitario en alrededor de 150 millones anuales, que cubrir¨¢ la Diputaci¨®n Foral de Vizcaya. En este sentido, la contribuci¨®n del Palacio Euskalduna en el ¨¢mbito de la cultura podr¨ªa disculpar su futuro deficitario: ?acaso no es la cultura una de las formas m¨¢s productivas de invertir el dinero p¨²blico? El peligro es que se convierta en un centro elitista, un reducto de cultura para unos pocos. Ha de ser para todos. Ha de facilitarse el acceso a todos. Si se consigue, el d¨¦ficit (dentro de unos l¨ªmites) que acumule el palacio no ser¨¢ censurable.