Grecia refuerza la seguridad en la frontera turca ante la creciente tensi¨®n por el "caso Ocalan"

ENVIADO ESPECIALLa captura del l¨ªder de la guerrilla kurda, Abdal¨¢ Ocalan, ha desatado una nueva escalada de la tensi¨®n entre Turqu¨ªa, que ha anunciado "medidas de autodefensa" tras acusar a Atenas de "dar cobijo al terrorismo", y Grecia, que ayer confirm¨® que hab¨ªa "reforzado la vigilancia" en la frontera turca y en las islas del mar Egeo ante un eventual incidente con Ankara. Mientras, miembros del Parlamento kurdo en el exilio ped¨ªan por carta al Papa que medie ante el Gobierno turco para evitar el ahorcamiento de Ocalan.

No es la primera vez que Grecia y Turqu¨ªa, te¨®ricamente aliados en el seno de la OTAN, elevan el tono de sus disputas sin llegar al enfrentamiento armado. Por el momento, ni siquiera se ha producido una retirada de embajadores o un intercambio de quejas diplom¨¢ticas. Pero Ankara parece m¨¢s que dispuesta a no desaprovechar ahora la ocasi¨®n de vengarse de las continuas zancadillas que Atenas le ha puesto en su dif¨ªcil camino hacia la integraci¨®n en la Uni¨®n Europea (UE).El precio que los turcos quieren hacer pagar a Grecia no es otro que el desmantelamiento de las bases que el Partido de los Trabajadores del Kurdist¨¢n (PKK) supuestamente mantiene a¨²n en territorio heleno. El proceso abierto ya por los tribunales antiterroristas contra Ocalan -acusado formalmente de "alta traici¨®n", un delito que acarrea la pena de muerte en Turqu¨ªa, que debe ser ratificada por el Parlamento y por el presidente- ser¨¢ sin duda el escenario propicio para ventilar esas imputaciones.

Los servicios secretos de Ankara se han encargado ya de filtrar a trav¨¦s de algunos peri¨®dicos fragmentos del interrogatorio policial del l¨ªder kurdo en los que Ocalan reconoce haber recibido armas de Grecia. Ayer mismo se aireaba que el PKK se sirvi¨® de sus redes de apoyo grecochipriotas para blanquear dinero procedente del narcotr¨¢fico.

En cualquier caso, la detenci¨®n de Ocalan el pasado d¨ªa 15, poco despu¨¦s de haber salido de su refugio en la Embajada griega en Nairobi, no ha sido m¨¢s que el detonante de la contenida ira de los dirigentes de Ankara por los portazos recibidos en la UE. En el mismo avi¨®n en el que regresaba de su viaje oficial a Filipinas el presidente turco, Suleim¨¢n Demirel, ped¨ªa una condena internacional para Atenas: "Grecia apoy¨® los asesinatos de inocentes en Turqu¨ªa, y las manos que apoyan el asesinato de inocentes tambi¨¦n est¨¢n manchadas de sangre". La prensa turca no dud¨® a la hora de colocar el titular: "Ultim¨¢tum a Grecia".

El Gobierno de Atenas pareci¨® tomarse en serio la advertencia y reuni¨® inmediatamente al Consejo de Defensa y Asuntos Exteriores bajo la presidencia del primer ministro, Costas Simitis. El portavoz del Ejecutivo, Dimitris Reppas, precis¨® ayer que se hab¨ªan tomado "medidas para reforzar la vigilancia" en la frontera y en las islas del Egeo ante un posible "incidente" con Turqu¨ªa. Una cadena de televisi¨®n hab¨ªa informado la v¨ªspera de movimientos de tropas en ambos sectores. Pero la presi¨®n turca ya se hab¨ªa hecho sentir antes. Tres ministros griegos y el jefe de los servicios secretos pagaron con su dimisi¨®n por el esc¨¢ndalo de la detenci¨®n de Ocalan.

En las calles de Berl¨ªn, mientras, ayer se manifestaron 10.000 kurdos en una marcha f¨²nebre en honor a sus tres compatriotas que murieron la pasada semana durante el asalto a la embajada israel¨ª en Alemania. En Roma, miles de kurdos (25.000 personas, seg¨²n los organizadores), procedentes de Francia, Alemania y Suiza fundamentalmente, marcharon en apoyo de Ocalan, informa . Adem¨¢s, miembros del Parlamento de Kurdist¨¢n en el exilio han hecho llegar un escrito al Papa en el que le piden que utilice "su autoridad moral para salvar la vida del l¨ªder kurdo".